¡Me he olvidado completamente de esto! Bueno, yo ya les he dicho a ellos que soy pésima cocinera. Así que, no acepto reclamos.
No entiendo porque no han pedido una pizza o comida italiana como suelen hacer todas las noches. Algo están tramando esos dos, lo siento a kilómetros.¿Está es su sorpresa? ¡Waw! Por favor, chicos, no piensen demasiado que pueden estallar sus cabezas.
- ¿Y qué dices? -Cedric ilusionado es lindo, pero no comprendo su ilusión en esto- ¿Te gusta?
- Es... una hamaca, Cedric. -exclamo desinteresada pasando por alto la risa burlona de Declan desde las escaleras- ¿Puedes decirme que significa?
- ¿No recuerdas la primera vez que nos vimos?
Declan abandona la habitación para dejarnos solos, seguro presintiendo que se viene un momento romántico.
- ¡Oh! -ya lo recuerdo- ¿Y la has conseguido por eso?
- Claro. -sonríe- La pondré en el patio y volverás a "tocar el cielo", como antes. -se acerca capturando mis labios y dando un suave apretón a mi mano.
- Que tierno, Cedric. -murmuro viéndolo alejarse.
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La chica común y el boxeador imponente.
RomanceElla tiene dieciséis años. Él tiene veinte. Ella jamás se ha metido en problemas. Él vive para eso. Ella se asusta con mucha facilidad. Él piensa que eso es patético. Ella no quiere enamorarse. Él desconoce ese sentimiento. Kalinda necesita a...