El sol brillaba sobre la Ciudad Blanca arrancando níveos destellos de la deslumbrante roca que conformaba su imponente estructura. Una paz relativa se cernía sobre Minas Tirith y su gente, mientras sobre el campo del Pelennor continuaban las labores de limpieza y recogida de los miles de cuerpos allí presentes.
Después de un agradecido y saludable almuerzo en grupo, los hobbits decidieron estirar un poco las piernas y acompañar a Gandalf, Aragorn e Imrahil hacia lo más alto de Minas Tirith, la Ciudadela, donde la roca de la montaña extendía el piso de aquel nivel hacia adelante, como la proa de un gigantesco navío.
Una vez arriba, Merry y Pippin caminaron detrás de los dos hombres y el Istar. Se detuvieron frente a una fuente de estanque redondo donde los restos de lo que fué un árbol de corteza blanca que creció en el borde, se alimentó una vez de las aguas que manaban de ella.
Pippin se acercó al árbol y pasó la mano por la corteza.
_Este sitio es impresionante_dijo mirando a su alrededor, donde la alta torre de Ecthelion junto a un elaborado y límpido edificio blanco al igual que ésta, coronaba el último nivel de la ciudad sobre la Plaza del Manantial_. Un árbol seco no adorna ésta plaza como merece.
_Es el árbol blanco de Gondor, plantado aquí por mis antepasados_dijo Aragorn observando sus ramas secas y retorcidas_. La peste hizo estragos en estos lugares hace muchos años y se abandonaron sus cuidados. Este símbolo ancestral de Gondor acabó muriendo, como muchos de sus habitantes.
_¿Y por qué no lo quitas?_dijo Pippin con inocencia_ Tú eres el rey, tu ciudad debe lucir bella y cuidada.
_Se hará cuando se pueda, Peregrin Tuk_se adelantó Gandalf_. Si se puede...hay otros asuntos que ocupan ahora mayor importancia.
Gandalf se dirigió hacia el borde del afilado extremo que sobresalía de la Ciudadela seguido por los demás y, apoyado en su vara, miró en lontananza.
En el horizonte, hacia el este, el sombrío manto que cubría las tierras de Mordor acechaba en la lejanía, temible y amenazante.
_Esto aún no ha terminado, queridos hobbits_dijo el Istar con el ceño fruncido_. Sauron sigue activo bajo el velo negro de su destrucción...nada lo detendrá hasta ver realizado su propósito.
Merry y Pippin se miraron entre ellos.
_¿Quieres decir que...atacará de nuevo? ¿Aquí?
Gandalf se volvió hacia ellos.
_Es lo más probable_contestó el Istar_. Ésta mañana he podido ver a sus Nazgul sobrevolando la ciudad vigilando el terreno.
_Pero...Sauron busca el anillo, ¿no?_dijo Merry_. Nosotros no lo tenemos, no tendría por qué enviar a más de sus orcos a morir aquí.
_Eso él no lo sabe, Merry_entró Aragorn a aquella conversación_. Sauron ignora dónde está el Único. Lo único que sabe es que un mediano se hizo con él y trata de encontrarlo.
_Y...¿no sabe que el anillo quizá pueda estar ya en Mordor?
Aragorn negó con la cabeza.
_Si supiese eso, no tendría su Ojo puesto en Gondor vigilando nuestros movimientos y ya habría dado con Frodo. Por eso uno de sus siervos intentó llevarse a Aelin, porque sabe que ella sí está aquí y puede llevarle directamente hacia el Único.
_Podría volver a por ella...¿no?_Pippin tragó saliva.
_Pero Aelin no cederá fácilmente, ¿verdad, Aragorn?_añadió Merry_Nunca revelará el paradero de Frodo deliberadamente.
_No, no lo hará... Gandalf_respondió mirando al mago_, debemos organizar las defensas, reparar lo que pueda repararse en tiempo récord y buscar más efectivos donde sea y como sea.
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ESDLA,una elfa en la Compañía
FanficAelin Tindómiel es la hija menor de Elrond, hermana de Arwen y discípula de su padre en el arte de la sanación élfica. Ambas se parecen bastante físicamente, pero Aelin posee una personalidad muy diferente a ella. Es atrevida, inquieta y decidida...