Perdida en tu mente

CAPITULO 25

Me despierta la voz de Ricco. Se le escucha hablar abajo y parece estar muy cabreado por su tono de voz. Afino el oído para saber de qué se trata.

-¡No son horas de venir a molestarla y además espero por tu bien que no seas tú el que la tiene medio deprimida porque si no!...- le escucho decir y me pongo alerta, ¿será Erik?, me pregunto pero enseguida lo descarto, estando Trys a él no se le ocurriría aparecer por aquí.

-¡Sé que no son horas pero ya le he dicho que necesito verla!- la mandíbula se me descuelga cuando escucho la inconfundible voz de Moore. Salgo disparada de la cama y me apresuro a salir al rellano, desde lo alto de la escalera puedo ver a Ricco y Moore, ambos muy enfadados y a Trys que observa la escena paralizada como si fuera una estatua de piedra.

Entonces sus fríos ojos se clavan en mí- ¡Kalanie por favor!- me pide y su voz es prácticamente una súplica. Miro a Ricco y a Trys, la cual me lanza una mirada acusadora con los ojos entrecerrados. Trago saliva como si tragara piedras.

-¡Vamos tío, lárgate ya!- dice Ricco.

-¡Ricco, déjale que suba!- me atrevo a decir finalmente.

-Pero...

-Yo me ocupo- insisto.

En cuanto Ricco se aparta de la puerta Moore empieza a subir la escalera y a cada peldaño que le acerca más a mí, más se me acelera el corazón presa de una extraña alegría.

Trys y Ricco observan la escena hasta que ambos desaparecen de su vista. Trys que no ha dicho una palabra resopla fastidiada- ¿se puede saber dónde estaba yo cuando repartieron las caras y los cuerpos perfectos?

Ricco la mira extrañado por ese arranque.

-¡Ese era el padre de mis hijos!- exclama ella haciendo un puchero- y Kala se lo ha quedado...

-¿Ese?- dice él mirando hacia arriba en tono despectivo- ¡Oh, vamos, nena!- y mirando su cara de disgusto añade- ¡venga te propongo un polvete rápido para quitarte el disgusto antes de terminar de ver la peli!

-¡Tú eres bacón, Ricco!- contesta ella.

-¿Que soy qué?

-¿En serio crees que me puede apetecer bacón cuando ahí arriba hay caviar?

Ricco resopla- ¿Qué ese es caviar y yo bacón?...!pues bien que te pones ciega a bacón los fines de semana y caviar todavía no te he visto comer nunca!...!además eso sabe a pescado!

Trys suspira- ¡pues ahora ni bacón ni caviar!- dice llorosa.

Entramos en mi cuarto y veo como hace un barrido visual, imagino que mi sencillo y pequeño dormitorio debe parecerle insignificante comparado con su enorme habitación tipo suite con mirador acristalado incluido.

Cierro la puerta y él se vuelve hacia mí.

-Siento venir así, Kalanie...

Me fijo en su rostro cansado, lleva barba de varios días, la que por cierto le sienta de fábula, pero digo yo... ¿y qué no le sienta bien a este hombre?

-¿A qué has venido, Dan?

-Hurgas en mi cabeza y luego me dejas tirado...

-¿Cómo dices?- pregunto molesta, es el colmo que venga a mi propia casa a reclamarme que ya no lleve su caso.

Suspira y sus ojos se tornan tristes.

-Sé que te dije que no quería saber nada de lo que averiguaras en la hipnosis, pero siento que me estoy volviendo loco...- le miro interrogante tratando de averiguar qué es lo que parece preocuparle tanto- desde que me hiciste ese maldito test no consigo dormir...- se lleva las manos a la cabeza- tengo sueños extraños...¿quién demonios es Eórenor?