Perdida en tu mente

CAPITULO 24

Despierto con la sensación de que alguien está zapateando sobre mi cabeza. Abro los ojos y tengo que volver a cerrarlos cuando la luz taladra mis retinas sin ninguna contemplación, pero cuando escucho que alguien sale del cuarto de baño me obligo a abrirlos de nuevo, y para mi sorpresa me encuentro con la estupenda estampa de Zack vestido tan solo con un pantalón azul. Miro a mi alrededor extrañada y me doy cuenta de que esta no es mi habitación. Me incorporo a duras penas mientras las sienes me martillean con cada latido de mi corazón.

-¡Buenos días princesa Johnny Walker, veo que ya has despertado del coma etílico!- dice al verme.

-¡Ssss, no grites!- protesto y él suelta una carcajada- ¿qué hago aquí?

-¿No recuerdas nada?- pregunta burlón y yo me miro para suspirar aliviada al comprobar que llevo toda mi ropa puesta.

Niego con la cabeza, consiguiendo que esta se queje protestando en forma de aullido doloroso. Me la agarro con las manos como si con ello consiguiera aplacarlo.

-¡Que malo es el alcohol!- grita a mi lado y yo le lanzo cuchillos con la mirada que solo consiguen hacerle reír de nuevo- Pues te haré un resumen lo más escueto posible...yo estaba en esta cama enroscado en las interminables piernas de mi rubia azafata cuando suena el teléfono de la habitación y me informan de que una loca borracha que dice conocerme intenta subir a un avión- me mira como si comprobara que le estoy entendiendo- la loca borracha eres tú.

-Gracias por la aclaración- contesto irónica.

-Así que me planto allí y te traigo de vuelta como si de una coctelera andante te trataras...- me mira burlón y yo pongo los ojos en blanco- ¿y sabes para qué?

Niego con la cabeza, esta vez muy despacio para evitar que me mate el dolor.

-¡Para que te negaras a regresar con mi hermano y me jodieras la noche con mi espectacular azafata!

Parpadeo incrédula.

-¿Dan vino a por mí?

-¡Sí, yo le llamé y tengo que decir que fuiste muy grosera con él!...- le miro tratando de recordar algo pero lo único que consigo es que la cabeza me duela todavía más.

-¿Sigues sin recordar?

Asiento y él me tiende un par de aspirinas y un vaso de agua. Mientras me las tomo se sienta a mi lado en la cama. Le echo una miradita de reojo y me doy cuenta de que la espléndida genética de ambos hermanos es idéntica. Él me mira y sonríe seductor- no me mires así Kalanie...eres fruto prohibido para mí desde que mi hermano puso los ojos en ti...- dice suspirando- ¿y dime...que es eso tan gordo que te hizo mi hermanito para que le vapulearas de esa manera?

Esa pregunta trae a mi memoria el momento en el que él se atrevió a negarme el orgasmo.

-Tu hermano es insufrible...!no puedo más!

Zack me mira y sus ojos se tornan tristes.

-Sé que Dany no es fácil de llevar...él ha sufrido mucho, su infancia no fue nada fácil y...- se queda parado como si de pronto fuera consciente de que no debe seguir hablando más de la cuenta- tuvo muchos problemas que le hicieron encerrar su alma y su corazón en una especie de caja fuerte...- me mira, sonríe y quitándome un mechón de la cara añade- de la que estoy seguro sólo tú tienes la combinación.

Suspiro con tristeza.

-¡Vamos!- exclama levantándose- sólo tienes una media hora para ducharte y arreglarte, hemos quedado para comer con el resto de la familia.