-Amor mío-

Capitulo Sesenta: Se agranda la familia

Juntos fuimos a la quinta de Tomas y Julia, allí seria la fiesta. Estaba todo tan hermoso, estaba un poco fresco el día pero había un sol radiante. Yo me había sacado el velo, ya no lo necesitaba. Todos los invitados ya estaba en la quinta, todos festejando con nosotros. Con Jorge debíamos esperar a que llagaran todos, para hacer nuestra "entrada" con lo cual esperábamos en la planta alta de la casa. Yo me asome a un balcón que daba a la parte de atrás de la casa, había un lago en el horizonte. Jorge se acercó y me abrazo por la espalda.

-Hola mi vida...-Me dijo dándome un besito en el hombro. Yo gire mi cabeza y mire esos ojos color cielo.

-Hola amor...-Susurre y luego apoye mi cabeza en su pecho, una suave brisa pasaba.

-Como esta Nico?-Dijo recorriendo con sus manos mi panza.

-Feliz... y no es el único.-Le conteste y me enfrente a él sin romper el abrazo.-Espere tanto esto...-Dije con los ojos llenos de lágrimas mientras jugaba con su traje. Luego unimos nuestras frentes.

-Gracias a Dios por haber encontrado ese colegio... que me llevo a encontrarte y a convencerme de que no te había olvidado, que no podía y que no quería hacerlo. Que aunque tuviese que esperarte toda la vida, aunque vos no sintieras lo mismo, aunque me lo negaras, nada iba a cambiar mis sentimientos.-Me dijo y me beso.

-Gracias por no darte por vencido. Sos mi vida, siempre, desde el primer dia en que vi esos ojos celestes te ame. Y hoy mas que nunca soy la mujer mas feliz del mundo por que te tengo.-Le dije sonriente a apenas unos centrimetros de su boca. Me acerque mas todavía y nos fundimos en un hermoso beso. Nos abrazamos y Julia no llamo desde la planta baja.

-Tortolos! Ya están todos!-Grito.

Bajamos y la fiesta comenzó, bailamos, comimos y disfrutamos. Julia con el resto del coro Santa Rosa nos cantaron. Todo salía perfecto. No había mesas sino pequeños livings, era todo muy al estilo campestre, simple y bello. En uno de ellos estábamos nosotros con la Turca, Betty, Julia y Tomas, charlando y riendo.

-Ay como patea Clarita!-Decia Beatriz sorprendida mientras tocaba mi panza.

-Viste! Esta contento jajajaja. Aparte lo dulce le fascina.-Dije señalando la copa con helado que tenia en mi mano. Termine de comerla y la deje sobre la mesita.

-Bueno la chiquita acá no para un segundo y todavía faltan 3 semanas.-Dijo bromeando Julia, Tomas le dio un beso en la frente.

En eso llegaron Pedro con Lola para sacarnos una foto todos juntos. Tomas ayudo a Julia a pararse y de pronto se escuchó un ruido de líquido.

-SE ROMPIO!-Grito Julia mirando al suelo. Mis ojos se abrieron como platos. La bebe...iba a nacer.

-Qué?-Pregunto Jorge.

-Que se rompió?-Pregunto Tomas.

Ninguno de los dos entendía lo que estaba sucediendo con lo cual me gire hacia ellos y les aclare la duda.

-COMO QUE SE ROMPIO? SE ROMPIO! LA BOLSA SE ROMPIO! LA BEBE VIENE!!!!!-Dije y ayude a Julia a sentarse nuevamente.

-QUEEEE?-Dijeron ambos atónitos.

-NO SE QUEDEN AHÍ, HAY QUE LLEVARLA A LA CLINICA...AHORA!- Les dije y ahora si reaccionaron.

Cada uno de un lado levantaron a Julia y comenzaron a caminar hacia donde estaban los autos.

-Súbanla a la combi! Es más espaciosa.-Grito Betty. Encararon hacia la combi.

-NO!-Grite.-QUE SE QUEDA, ANDA MAL!!!-Dije y encararon hacia la camioneta de Tomas.

-MAMA SE ME CAE!!!-Gritaba Julia desesperada. Yo no podía evitar reírme de lo nerviosa que estaba.

-NO SE TE CAE NADA A VOS TRANQUILIZATE.-Le dije y me subí a su lado en la parte trasera de la camioneta. Jorge le tiro las llaves del auto a Pedro para que los siguieran con Lola, Betty y la Turca.-Tranquila, respira, respira y conta... uno... dos...inhalo...exhalo...relájate porque vas a aumentar las contracciones hija.

El viaje fue de unos quince minutos, una vez allí sentaron a Julia en una silla de ruedas y la llevaron a la sala de partos. Tomas iba a su lado sujetando su mano.

-TRANQUILA SUERTE!!!!-Gritaba yo emocionada. Jorge me abrazo.

-Veni, vamos a sentarnos.-Me decía mientras me tomaba de la mano. Nos sentamos y yo me queje, estaba incomoda. El me miro alarmado.-No me digas que vos también por que me caigo aca...

-JAJAJAJJA no amor, estoy incomoda vamos a probar el sillón de allá.-Le dije señalando hacia el frente y acariciando su mejilla. Cambiamos los asientos y estaba mucho mejor.-Ya esta, era demasiado derecha esa silla. Te amo abuelito.-Le dije sonriente y plante un beso en sus labios.

Cinco minutos después llegaron Pedro, Lola, Betty y la Turca. Juntos esperamos una hora y media, hasta que de la sala de partos salió Tomas totalmente emocionado.

-Felicitaciones abuelos, es una princesa de tres kilos doscientos gramos. Las dos están muy bien. Quieren conocerla?

-Claro que si.- Conteste con lágrimas en los ojos. Tomas nos guio a la habitación. Entramos y allí estaban hermosas.-Hola mi vida... como te sentís?

-Hola ma...-Contesto con un susurro para que la bebe no llorara.-Bien, acá estamos...descansando.

-Hola hermosa.-Dijo Jorge y le beso la frente a Juli.

-Hola pa.-Le contesto.- Queres sostenerla?-Le pregunto.

-Dale... me encantaría.

-A ver... despacito.-Decía Julia mientras le pasaba la bebe a su papa. Era bellísima.

-Hola bebe...-Le susurraba Jorge y besaba su diminuta frente.-Queres conocer a tu abuela???-Le preguntaba despacio con risas me paso a la gordita.

-Hola belleza, mucho gusto bebe...-Le susurre yo y luego mire a mi hija.-Estoy muy orgullosa hija... bueno como se llama?-Pregunte.

-Todavía no decidimos...-Comento Tomas.

-Blanca?-Dije yo y mire a los ojos a Julia, vi como rebalsaban en lágrimas.

-De verdad ma?-Me pregunto.

-Si amor... me gusta Blanca... me encanta.-Dije y le entregue a su hija.

-Hola Blanqui...-Dijo conteniendo las lágrimas Julia.-Hola mi vida...

-Si definitivamente tiene que ser Blanca...-Comento mi yerno.

Jorge me abrazo y juntos nos quedamos viendo ese hermoso paisaje.