Buscar Hasta Encontrarte (Niall Horan y Tú) |NO EDITADA|

Capítulo 43

Es impresionante cuán rápido y lento se va el tiempo a la vez. Llevamos tres días aquí apoyando a mis padres, a mi madre tras cuidar a mi padre y a este último acompañándolo día y noche en el hospital. Hace dos noches recayó con un pre infarto, no fue nada agradable ver la escena con mis propios ojos, médicos y enfermeros alrededor de él para lograr estabilizarlo.

Me encuentro sentada en una silla junto a él. Observo la tranquilidad de su sueño, está profundamente dormido. No puedo evitar sentirme tremendamente cansada ya que me quedo toda la noche cuidando de él. Por más que me dice que no es necesario porque hay enfermeros que se encargan de eso me quedo más tranquila estando a su lado.

Niall ha sido estos días un hombre excepcional, su compañía es continua. Cuando voy a casa de mis padres para tomar un baño y dormir unos minutos él se queda con cuidándolo y acompañando a mi madre. Básicamente nos turnamos entre los tres para atenderlo.

Tuve que pedir permiso en mi trabajo para faltar unos días, días que no me concedieron a menos de descontarlos de mi semana vacacional. No dudé ni un minuto en tomar esos días, mi padre es primero. Aunque claro es que Niall cada día recibe más y más llamadas de los chicos para que regrese a terminar de grabar, son días perdidos en los que si no hacen nada perderán más tiempo.

-Hey cielo, ¿Todo bien?- susurra Niall para no despertar a mi padre. Me entrega un vaso con café, algo que agradezco infinitamente ya que mis ojos se sienten cada vez más pesados.

-Sí, hace un rato vino el médico y dijo que mañana puede regresar a casa, sólo debemos darle los medicamentos que requiere- me levanto de la silla para quedar un poco más cerca de la altura de Niall. En el extremo de la habitación comenzamos una charla.

-Te ves cansada. Deberías dormir un poco, tu padre está bien, sólo fue el susto de la otra noche pero ya está bien- dice mientras acaricia mi mejilla con sus nudillos.

-No te preocupes, de verdad que estoy bien. Prefiero que descanse mi mamá.

-Sabes, tienes un gran corazón y por eso te amo cada día más. Ven acá- me invita a sus brazos extendiéndolos. Me acerco a su cuerpo y enredo los míos en su espalda.

-Gracias por estar aquí cuando deberías estar en Londres- digo aferrándome más a él, a su embriagante aroma.

-También lo harías por mí si mis padres estuvieran en la misma situación. No hay nada que agradecer- besa mi cabeza y acaricia mi cabello despeinado.

Platicamos un rato y una nueva llamada en su celular lo hace salir de la habitación. No ha querido decirme nada sobre las llamadas pero sé que lo necesitan en Londres, no soy tonta como para no darme cuenta de eso. Aún así decido escuchar lo que dice con la puerta algo entreabierta.

Sí, tenía razón. Lo necesitan. La cuestión es si quedarme o irme de nuevo con él. La cosa es que si no regreso ahora no sé cuándo lo haré.

Una desesperación extraña invade mi torrente sanguíneo, ¿Qué debo hacer? Irme con el hombre que amo, de regreso a casa o quedarme con mis padres un tiempo. No lo sé. Básicamente ambas partes son mi familia y lo más difícil es tener que decidir entre ambas.

Escucho que termina la conversación y antes de que entre, abro la puerta de golpe para hablar al respecto.

Nial hace una mueca con sus labios y me mira asombrado- ¿Escuchaste cierto?

Asiento y de inmediato se aleja de la puerta para conversar.

-Niall, no sé qué debo hacer. Sé que debes regresar pero no quiero dejar a mi familia cuando pueden necesitarme.