Buscar Hasta Encontrarte (Niall Horan y Tú) |NO EDITADA|

Capítulo 39

ADVERTENCIA: Capítulo con contenido sexual explícito, se RECOMIENDA discreción.

La escasa luz que emite la luna provoca que las flores a nuestro alrededor apenas se distingan. El hueco sonido del silencio llena el lugar, apenas es notado el melodioso canto de los grillos. La mano de Niall se enreda en la mía entrelazando nuestros dedos. La noche es fría pero no como otras veces, podría decirse que es la noche perfecta.

Nos acercamos a la mesa con mantel blanco, una hermosa bajilla se encuentra sobre este. Las velas al centro hacen que sea aún más romántico. No trato de evitar la enorme sonrisa que se dibuja en mi rostro, es tan automática como mis palpitaciones desenfrenadas al sentir el esmero que puso en todos estos detalles.

Él acomoda la silla para que pueda sentarme, así lo hago. Aún no me considero capaz de articular alguna palabra, qué podría decir, es mágico, increíblemente romántico y hermoso.

Niall rodea la mesa y se sienta frente a mí, la mesa no es muy grande, lo que me permite estar un poco más cerca de él. Su mirada encuentra la mía haciendo que un mar de sensaciones recorra mi cuerpo, las pupilas de mis ojos se dilatan al ver al hombre frente a mí, tan perfecto como lo ha sido siempre.

-Es hermoso todo- digo una vez que me apresuro a dar una reacción, sé que esperaba que dijera algo- No tengo palabras para esto, es perfecto- digo sonriéndole ampliamente. Un brillo especial se asoma por su mirada, noto cuan satisfecho está por conseguir sorprenderme. Recorre su mano sobre el mantel y toma mi mano, podría jurar que estoy temblando, empezar de nuevo en el mismo lugar que antes decidimos aceptar nuestro amor me hace sentir sumamente especial más porque aquella vez me dijo que era su lugar preferido.

-Yo sólo quiero que sea perfecta esta noche, es el renacimiento de nuestro amor y una vez más quise que fuera aquí porque hace meses me prometí que te amaría el resto de mi vida y que lucharía por hacerte feliz- su pulgar acaricia mi piel tan delicadamente como si estuviera tocando a una rosa. Durante estos minutos no he parado de sonreír y no creo poder dejar de hacerlo, no cuando siento que es un día especial.

-Te amo Niall- digo levantándome para correr a sus brazos, el también se levanta y me abraza por la cintura mientras que deposita un tierno beso sobre mis labios.

-Promete que jamás te irás de mi vida- susurra a escasos milímetros de mi boca.

Levanto la mirada para encontrarme con la suya y digo decidida- Lo prometo- jamás había estado tan alegre y emotiva de entregarme a un amor como este, supongo es por el hecho de que con Niall he descubierto lo que es el amor verdadero, el que sabe querer, escuchar, apoyar y perdonar. Lo que te hace mantener estable y a flote una relación así.

Lo beso una vez más para luego regresar a la mesa. A los pocos segundos un mesero llega con los platillos que ha preparado para esta cena, un delicioso manjar alimenticio va directo a mi mirada, Niall por su parte muestra mucho mayor interés por devorar aquél alimento. No sin antes dedicarme una cálida y hermosa mirada nos disponemos a comer, entre pláticas y risas disfrutamos del increíble platillo que ha elaborado el chef para nosotros.

-Está delicioso- digo al tragar una cucharada de alimento.

-Y se pondrá mejor- susurra más para él que para mí. Mi ceño se frunce mientras trato de descifrar el pensamiento que vaga por su cabeza. El sólo sonríe y levanta las cejas- te amo.

Cuando terminamos de comer me pide que bailemos, pone algo de música romántica y tranquila mientras pide mi mano para comenzar un baile. Nuestras manos se entrelazan mientras que mi otra mano se coloca en su hombro y la de él en mi cintura. Los pasos van lentos y coordinados, un pie, después el otro.