021:"Llorar por mamá "

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Kian point.

-¿Donde estabas?- Lia me encaró a penas me vio -Preguntó por ti unas cien veces-

¿Ella ya había despertado?¿Había preguntado por mi?

-¿Ya despertó?- hice solo una de las preguntas que rondaban por mi cabeza.

Lia giró los ojos y se puso de pie -Hace como 20 minutos- peinó su cabello hacia atrás antes de seguir hablando -No sé que es lo que ustedes tienen, pero si lastimas a esa chica o eso es lo que estás tratando de hacer con tu juego de dos puntas, no respondo de mi comportamiento o mi reacción contra ti y tu mierda-

No contesté. No sabía que decir, solo asentí.

Trague duro antes de hablar -¿Puedo verla?- Lia se encogió de hombros.

Dejé a la chica sola y di unos golpes a la puerta donde estaba Boo.

Jc se asomó y vi la pequeña figura de Noa temblar, mientras estaba tendida en la cama.

-Jc, no quiero ver a nadie ¿dónde está mi mamá?- las espesas lagrimas recorrían el rostro de la chica.

Miré a Jc en busca de explicaciones y él me entendió.

-La anestesia. Hace que hable incoherencias. Está así desde un rato-

-Jc, por favor. Me duele mucho-

Mi amigo bufo pero trató de calmarla por más irritado que esté con la situación -Va a dejar de doler si dejas de llorar y hablar, Boo-

Sus grandes ojos vidriosos chocaron contra mi rostro y casi me pone de rodillas.

-Hola- le sonreí un poco.

-Hola, Kian- dijo algo distante.

¿Qué estaba mal?

-Te traje tu ropa y gatorade de manzana- levanté el bolso un poco para que lo vea antes de apoyarlo a un costado.

Miré a Jc, esperando que dijera algo pero solo se encogió de hombros.

-Jc no me quiere decir dónde está mi mamá- miré a mi amigo, una vez más esperando que diga algo.

-Bueno, creo que puedes dormir un poco más y luego ver dónde está ¿te parece?- hablé como si se tratara de un niño.

Ella asintió y puso toda su atención en la televisión que colgaba en la pared.

El móvil de Jc sonó y gesticulo "Es mi tío" e hizo señas antes de salir a atender.

-¿Tu novia sigue siendo una perra?- Boo acomodó sus manos entrelazadas sobre sus muslos.

La miré y sí, ella no tenía ni idea de qué hablaba.

Sus ojos estaban desorbitados y sus palabras eran arrastradas.

-¿A ti que te parece?- en verdad quería saberlo.

-A mi me parecen muchas cosas. Te mereces a alguien mejor. Te odio muchas veces, pero sé que eres bueno y por eso me gustaría que sepas que alguien que se comporta de esa manera no te quiere, solo juega contigo. Es difícil cuando las personas hacen eso contigo- sabía que ella estaba haciendo hincapié a nuestro juego. Mi juego.

-También sé que eres muy detallista y te preocupas por el bien de todos, hasta de las personas que crees que no te caen tan bien- hizo un seña con su mano para que me acercara a ella. Me agache un poco -También eres extremadamente sexy y eso que hacen tus labios cuando estás enojado me dan ganas de apretarte contra mi y pellizcar tus mejillas, pero no se lo digas a nadie-

Dio una larga respiración antes de seguir hablando -Pienso que eres un estúpido por alejarte de tus amigos por una chica ¿que novia hace eso de todas formas?- hizo una mueca y negó con la cabeza -No puede separarte de tus amigos, eso te pertenece y parece que no eres consciente de ello. La próxima piensa en ti, no en lo que quieren o esperan los demás de ti-

Lo había hecho, dijo todas los errores que estaba cometiendo, las cosas que están mal en mi.

Ni siquiera era consciente de lo que estaba diciendo pero pude apreciar que estaba más interesada en mis virtudes que en mis defectos.

No iba a mentir, eso elevó mi ego un poco más.

Cuando me quise dar cuenta Boo había caído dormida. Sus pestañas sobre sus mejillas me parecieron la cosa más hermosa que haya visto nunca.

"Pinky promise?" | Kian Lawley. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora