(Narra Danna)
Al dia siguiente busco con la mirada a alguno de los chicos pero no los veo por ninguna parte. Se me hace extraño pero me había echo ilusiones con ver a Lucas. Me reprendo a mi misma y busco a Vivi. No la encuentro. Las clases se me hacen eternas y cuando por fin suena el timbre me muevo rápido para comer a una hora decente. Una hora después me escurro entre los pasillos del orfanato y me meto en mi habitación. Duermo sola. Al entrar he robado algo de comida. Engullo y luego me meto en las duchas comunes para duvharme con tranquilidad, ya que a estas horas no hay nadie. Peino mi indomable pelo rubio en una trenza poco apretada y me pongo vaqueros y un top estrecho. Busco mi mobil y no lo encuentro. Estara en casa de Mateo. Los tacones aparecen por arte de magia de debajo de la cama. Miro el reloj. Marca las 7.30. De aquí a la heladería tengo una hora mas o menos asi que me maquillo tan rápido como puedo y salgo por la ventana a las 8 (ah si, me olvidé de comentároslo. Mi queridísimo orfanato cierra a las 7 y no permite salidas). Aterrizo con sigilo en el suelo a pesar de los tacones y ando rápido por las silenciosas calles hasta que al llegar al centro se hacen más ruidosas. Llego tarde como siempre. Abro la puerta y no tardo en localizar a Vivian. Habla con Eric. Cuando me ve me sonríe y Eric se gira. Mi amiga lo atrae hacia ella y lo besa. Luego el se marcha y yo me siento en el sitio que acaba de desocupar.
Después de pedir el rico helado empezamos a hablar. La conversa es sencilla y me cuenta de su noviazgo con Eric. Me alegro por ellos. Cuando le pregunto por Lucas su alegría se desvanece.
- Danna tienes que alejarte de el- susurra preocupada-
- ¿Por qué? - pregunto yo inocentemente- Si son tan solo chicos - Viviana parece de golpe nerviosa
- Es que Lucas es muy mujeriego...demasiado. Te he cojido cariño y no quiero que lo pases mal
- ¿Y Alek? - su cara es triste, suspira y se pierde en los recuerdos -
- Era perfecto, tendrías que haberlo conocido hace 3 años...era un cielo. Pero claro después de lo de su familia y Vanessa...
- ¿Que pasó? ¿Quien es Vanessa? - ahora parece que esta asustada. -
- Nada...olvídalo prométemelo que olvidaras eso...- finge mirar el reloj - es tardísimo tengo que irme ya nos veremos en el instituto
Recoje rápidamente sus cosas y se va dejándome confundida e intrigada. Miro yo también la hora. El local ya esta desierto y son las 10:30. Pago la cuenta y la camarera me echa con la mirada. Las calles del centro están bien iluminadas pero conforme me acerco al barrio del orfanato se hacen mas estrechas y sin luz. Tiemblo de frio. De golpe una sombra aparece de la nada e incluso con delicadeza noto algo helado en el cuello. Se lo que es. Una navaja de las grandes. El hombre habla con voz suave pero fría
- Hola bonita. ¿Por qué no me das lo que llevas y asi puedes conservar ese cuello tan bonito intacto? No queremos manchar el suelo de rojo ¿verdad?
Rojo. Mi memoria me traiciona. Mamà...el suelo. BASTA. Calculo mi posición, rezo para acertar y le doy una patada. Voy a ponerme a correr cuando temblando me doy cuenta de que no he calculado bien. La navaja traviesa mi piel y mi sangre empieza a manchar el suelo. Tengo más frio que antes. Tiemblo y el mundo da vueltas a mí alrededor. Lo último que noto es una voz conocida pronunciando unas palabras sin sentido y sus brazos rodeándome y llevándome hacia su pecho.
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Wild Black
Teen Fiction'' ¿Cuanto estás dispuesta a sufrir por aquello que quieres? '' Esta es una historia sobre los amores de juventud, la calle y aquellas opciones que no nos dejan escoger. " La W en su muñeca" " Te amo, pequeña" " Lo siento muchísimo hermano" " La vi...