capítulo 6: La enfermera

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Después de que Darío se marchara, Lucas se acercó a Danna. Ella lo miró y los dos se quedaron callados hasta que el rubio suspiró y habló el primero.

- ¿cómo estás?

Danna no supo que contestar, así que optó por hacer lo que mejor se le daba. Parecer indiferente.

- ¿cómo crees tú que estoy después de haberme dejado la mitad de mi sangre en la acera, campeón?

Lucas pareció algo dolido. Sintió algo indescriptible en el pecho al tener a Danna en brazos sangrando pero enseguida se negó a si misma o que oudiera ser alguún sentimiento hondo. Lo asoció con el miedo a ir a la cárcel. Sí - se dijo a si mismo – cuando se recupere y nos aseguremos que no abre la boca se me pasará.

Danna, mientras tanto, al ver que Lucas no contesatba, se repreendió a si misma su conducta, dicienodse que no era justo que lo tratara asi de mal con lo bueno que estaba siendo con ella. Buscó las palabras para pedir perdón pero al levantar la mirada se volvió a encontrar con el Lucas fanfarrón de siempre. Cabreada consigo misma por haber pensado en disculparse, le habló al rubio para mandarle busacr a la enfermera.

Esta apareció poco después, sonriendo falsamente a Danna y coqueteando descrdamente con Lucas, que aprovechó la oportunidad. La rubia, asqueada, pidió a la enfermera que pusiera algo de medicina para dormir en su gotero a lo que la enfermera asintió, probablemente encontrando una oportunidad para quedar a solas con Lucas. Lo último que vio Danna antes de caer dormida fue como Lucas besaba a la enfermera y se la llevaba fuera.

Alek despertó poco después, encontrándose a Danna dormida. Miró su piel de porcelana y quiso tocarla, así que alargó la mano para acariciarle la mejilla. Tocó a la chica y sonrió. Su sonrisa quedó inmediatamente congelada al ver que estaba haciendo. Parecía uno de esos chicos de lso que él y sus amigos se habían burlado tantas veces. Negó con la cabeza por permitirse pensar eso y supo que tenia que alejarse de Danna así que cojió su chaqueta tejana del respaldo de la silla, sacó un cigarro y buscó el mechero para prenderlo. Luego abrió la puerta y se fue, dejando a la chica sola en la habitación.

Lucas mientras tanto salió del vestidor de las enfermeras, ajustándose el cinturón y calzándose la chupa de cuero negro. Pasó las manos por el pelo desordenado después del sexo y dio con la nota que le había dado Darío. La leyó. Con la letra estilizada de Viviana solo había escritas tres palabras. Alejaos de ella. El chico rio burlonamente y pronunció su meta en voz alta

- Tengo que probarla

Ug*q*X)

Wild BlackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora