Fabio
La alarma suena, son las 8 de la mañana. Abro los ojos y me encuentro a una Miriam dormida desnuda con las sabanas cubriendo su cuerpo , la mano en la almohada y colocada en frente de mi. La beso en la frente, voy al baño, me visto y la despierto zarandeándola.
-Miii cariñoooo, despiertaaa.
Poco a poco abre sus ojos verdes y me sonríe.
-Buenos días Fabio.
-Buenos días, venga ve al baño y te vistes mientras yo voy al hotel a por tu hermano.
-Vale, cuando termine iré al box, me se el camino.
-De acuerdo- le deposito un beso en la frente- adiós, te quiero.
-Adios, y yo a ti también.
-No llegues muy tarde.
-Tranquiloooo, antes de que te montes en la moto estaré- se ríe.
Miriam
Voy al baño, es raro despertarse desnuda, no se... es un sensación extraña... Voy al armario y me visto.

Me maquillo un poco y voy al paddock. Entro en el box de mi novio y veo que ya han llegado.
-Creía que me haría viejo esperándote hermana.
-Buenos días a ti también Sil- refunfuño.
Fabio, Silver y yo nos quedamos hablando hasta que llega un ingeniero de mi chico.
-Fabio, necesitamos una paragüera para ti, la chica se ha puesto enferma y no ha podido venir.
Yo estoy mirando a otro lado, que pena la chica, nótese la ironía. Las chicas esas me caen mal, la verdad. Noto 6 ojos posarse en mi. Levanto la mirada y los veo sonriendo cómplices, me giro para ver a que miran, detrás de mi no hay nada.
-¿Que-que p-pasa? ¿P-porque me mirais así?
*~*
-Esa es tu talla ¿no?
¿Como habia llegado hasta aqui? Pues bien, el graciosillo de Fabio no paraba de darme la lata, asi que ya harta, acepté de mala manera.
-Si, ¿puedo verme en el espejo?
Me miro en el espejo, no parezco yo, parece que tengo muchos años mas. El vestido es blanco, acabado en tubo y llegandome por la mitad del muslo, tiene mucho escote y es de manga corta. Me hago una coleta alta como peinado.
Aparece por detras de mí mi novio. Aun no tiene puesto el mono y me mira mordiendose el labio.
-Tu familia me va a matar- comenta riendose.
-Me incluyo, en los dos bandos. Aii dios, esto me hace demasiado escote, voy provocando.
Me da una palmadita en el culo bien fuerte.
-Aah, que duele- me quejo.
-No lo tengas tan blando- se empieza a reir a carcajadas.
-Ja ja que gracioso- pienso un momento en como devolversela y se me ocurre una brillante idea- a lo mejor Danny Kent dice lo mismo ¿no?
Se para de reir y me mira enfadado.
-¡Eh!
-Ah, se siente, la proxima vez te lo piensas Quartararo- rio saliendo de la habitacion.
Llego al box y alli unos agentes del circuito me explican todo lo que tengo que hacer.
Los pilotos estan llegando a la linea de salida, yo me voy a donde Fabio. Esta mirando fijamente la moto.
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Mi chico perfecto
RomanceMiriam Fernández es una joven emeritense que en un viaje conoce a uno de sus idolos, Fabio Quartararo, ¿habrá química entre ellos o él la tratara como a una fan?