POV Andrés:
Abrí la puerta y me encnotré con mi... ¿cómo decirlo?... Zorrita personal. Ximena tenía un ceño fruncido, y una horrible mueca en su boca. Ella se levantó y acto seguido me abofeteó. Valla, la zorrita se reveló. ¿En serio tenía que montarme este numerito cada vez que me iba? Ella sabía muy bien que a mi no me gustaba tener novias, muy pocas eran las que duraban con migo manteniendo una rlación más afectiva que sexual, lo cuál éra casi imposible, o sólo eran amigas. Me sobé el rostro con una mano y con la otra la tomé del brazo para besarla, al principio forcejeó, pero a medida que el beso se profundizaba, ella cesaba su berrinche.
- ¿Mejor? - pregunté sarcástico, ella intentó abofetear me de nuevo, pero fuí más rápido y la tomé de la muñeca sin dejar de tomar su cintura - vamos, no te hagas la orgullosa, que tu dignidad la perdiste hace ya varios años.
- Y pensar que fuiste tú quien me la quitó - y tenía razón.
- Yo no te obligué - hice una pausa recordando - es más, si no recuerdo mal, fuiste tú, quien me lo pidió. Después no diga que no hago lo que te da la gana.
- Por si no lo recuerdas mañana es la visita - dijo cortante como si fuese algo sin importancia.
- ¿Y qué? - dije igual de cortante.
- Oh, vamos - dijo enojada - le prometiste que me cuidarías, al menos da la cara y dile estás prometiendo la mitad de lo acordado - la solté y me encerré en mi pequeña habitación. Ximena comenzó a golpear la puerta con fuerza y acto seguid gritó - fué tú mejor amigo, no seas cobarde - sentí cómo se alejaban sus pasos, pasé mi mano por mi cabeza despeinando todo a su paso.
Tomé la foto que estaba en mi mesa de noche, en ella estábamos mi mejor amigo, Daniel; un jóven de mi edad cabello oscuro y ojos verdes, igual que su hermana; ximena, y yo, dándonos un abrazo mientras sonreíamos a la cámara.
- David, ¿porqué? ¿Porqué te fuiste? Nunca te perdonaré el dejarme a cargo de tu hermanita - susurraba a la foto - ¡Maldición! -mis manos dejaron la foto en su lugar - ni tampoco el haberme dejado solo. ¿Porqué tenías que... Morir?
Me dejé caer sobre la cama, estaba exhausto después de romperle la cara a todos esos imbéciles. Cristina, ¿quién éra esa aparecida? ¿Porqué tuve que besarla? A veces ser tan impulsivo no me favorecía, Jerry, estúpida rata agazapada. Ésa niñita debería tener cuidado con quién y dónde me mete. Siempre estaba metida en algún problema, que fastidio.
Salí de mi casa y me monté en mi moto, le di varias vueltas a la ciudad. Luego decidí ir hasta el club. Bajé la diminuta puerta, y todos me miraron con alegría. Bueno, la mayoría. Bajé los escalones y llegué hasta el DJ, el cuál me saludó chocando la manos y estrechándola, él no éra de aquí, si no que venía de España, país el cuál conocería un día.
- ¿Has visto a Berne? - grité y él solo negó con la cabeza. Dónde se había metido éste. Pasé mi mirada por todo el lugar, hasta reconocerlo, al parecer estaba muy bien acompañado, un par de rubias peli-pintadas, personalmente me gustan más las de pelo natural, morenas, rubias o pelirrojas, el tinte no me gusta mucho en una mujer. Aún así eso no les quitaba lo buenas.
- Hey men - dijo el rubio - estrechando mi mano - me dijeron que les rompiste la cara a los del 7-d - en nuestros barrios, a los grupos se les denominaba por el número de cuadras al que éste pertenecían, en este caso eran la cuadra 7 del barrio d.
- Esos se lo estaban buscando desde hace rato - metí - y el que busca, encuentra. Y, ¿no me vas a presentar a tus... amigas? - ambas rieron al tiempo. Una de ellas se hizo a mi lado y me tocó el trasero disimuladamente, pues sólo yo lo noté.
- Aquí está aburrido - susurró en mi oído la muy fácil - no quieres salir un rato - me reí y los otros dos acompañantes me miraron extrañandos. La música se fué, al parecer estaban cambiado de disco.
- Gracias linda - dije ella se ruborizó - pero no requiero de tus servicios esta noche, ya tengo mi zorra personal - la chica me miró con odio al darse cuenta de que llamó muy bien la atención, ésta me abofeteó, auch, van dos en sólo día, quizá mi boca está un poco suelta hoy, la tomé a la fuerza y la besé. Al soltarla pude ver la íra en sus ojos, intentó abofetear me de nuevo, pero, al igual que como hice con Ximena, me adelanté y le tomé por la muñeca - una por turno - dije y salí sonriente del espectáculo.
Ximena apareció de nuevo, aunque fuese una fácil, era lo úni más cercano a familia, nos conocíamos desde que nació, éra como una hermanita, pero bueno, ella creció y se volvió lo que és ahora, una fácil, pero eso no le quitaba el cariño que le tenía. Por su expresión pude ver que todavía estaba enojada con migo.
- Hola - dijo fría, la tomé de los hombros, mientras comenzaba a bailar al ritmo de la canción angel de sahggy .
- Sabes lo bella que te ves con ése vestido - en realidad ni lo había visto hasta que lo pronuncié, pero con tal de tenerla feliz cualquier excusa me servía, ella esbozó una pequeña sonrisa - vamos a bailar un rato muñeca.
La tomé del hombro y la llevé hasta la pista central, bailamos, pasaron varias canciones, ella sabía como moverse, tenía unas lindas caderas y con esos pasos embobaba a cualquiera.
La puerta se abrió y todos desviaron la vista al rubio nuevo que iba cruzando el lugar, si no me fallaba la memoria, ése rubio éra... ¿La rata de Jerry? ¿Qué hacía ese ricachón de ballet aquí? Todas las mujeres centraron sus mirada en él, y, como si nada, comenzó a bailar con una pelirroja que lo acompañana, no lo niego, no estaba nada mal. Ximena me soltó y comenzó a menear su trasero delante de la rata. No, ratica, nadie me quita lo que es mío.
Baile y me moví por la pista hasta quedar frete de la rata, y con un movimiento lo reté, la rata comenzó a bailar, nada mal, pero no se comparaba con migo, un paso él,un paso yo, y asi sucesivamente, el DJ tomó el micrófono.
- Bien - dijo el DJ -pero que espectáculo, los de arriba contra los de abajo, bueno que os parece si hacemos un concurso, ¿vale? - todos aplaudieron - Andrés, escoge una pareja, mira que chicas es lo que sobre y bien buenas, eh - tomé a Ximena, la cual sonrió con maldad a la pelirroja - entonces los dos de arriba, contra los dos de abajo, la pareja más aplaudida se queda, la otra se marcha sin resoplar. ¿Listos? - DJ comenzó con una canción también de shaggy llamada Repent.
Ximna y yo comenzamos con un paso suave, luego ellos, muy mala pareja en verdad, no dejaban de equivocarse, nosotros seguimos con mayor movimientos, pero ritmo lento, ellos comenzaban a cojer el paso de la canción, nosotros aumentamos el ritmo y luego bajamos. A pesar de todo Ximena no se comparaba con la cabecita de cebolla de Cristina, es niña baila muy bien, sabía cómo debía llevarme el paso. El DJ paró de mezclar.
- ¿Qupe os pareció el espectáculo? - todos comenzaron a gritar 5 a, repetidamente, mi barrio, mi cuadra, mi pista, mi chica. Ellos salieron por la diminuta puerta. Debo reconocer que, para ser la primera vez que bailan, no lo hacían tan mal. No podía sacarme de la cabeza a la jodida de Cristina. Maldito el día en que me engatuzó la bailarinita ésa.
Ximena y yo salimos de la pista sudando a mares, en verdad lo disfrutábamos. Nos montamos en mi moto y salimos de allí, r´pidamente llegamos hasta mi casa, tomamosun ducha juntos y no acomodamos para domir, ella se quedaba con miggo, puesto que el morir Daniel, su casa se derrumbó prácticamente. Ella preparó un puré de papas y comimos en silencio. Luego de unas horas vien la T.V., nos acostamos a dormir.
Ella se puso sobre mí y comenzó a besarme, la tomé de los hombros y la dejé al otro lado de la cama.
- No - fué lo último que dije antes de caer en un profundo sueño.
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Zapatillas rotas.
DragosteCristina, una joven que, obligada por su madre al preocuparse por su extremada timidez, decide meterla en una academia de baile, pues ella siempre la escuchaba hablar sobre baile. Cristina trata de no mezclar su vida privada con su vida en el baile...