The Theory of Everything

Chapter 51

Jim Parsons

Habían sido dos semanas de auténtica desconexión, sin móviles ni otra clase de dispositivos tecnológicos de por medio. Nada. Sólo Todd y yo disfrutando de unas bucólicas vacaciones que sin duda iban a ser inolvidables. Lo que comenzó siendo un pequeño viaje romántico terminó convirtiéndose en una gran sorpresa para Todd. Y también para mí.

La idea me había rondado la cabeza desde hacía meses, desde el mismo momento en que Mayim me hizo saber que Todd, en su esfuerzo por reconquistarme durante nuestra ruptura, estaba dispuesto a proponerme matrimonio. Me parecía tan lejano que es como si nunca hubiese tenido lugar. Sin embargo se me ocurrió que, después de todo, era una buena forma de cerrar ese capítulo de la historia, agridulce sin duda, pero nuestra.  Si hubiera llegado a darme aquel anillo le habría correspondido sin pensármelo, pero ahora había sido yo quien, en un acto de romanticismo, había dado el paso definitivo.

Quería dar un giro a nuestra relación y ser los protagonistas de un nuevo comienzo, nada fácil para una pareja como la nuestra. Por ello fue algo íntimo y secreto, o casi. Mi madre y Julie estaban al tanto de todo al igual que la familia de Todd. Les había comunicado la noticia unas semanas antes del viaje. Les expliqué que no quería llamar la atención de los medios ni celebrar el enlace por todo lo alto. Quería pillar por sorpresa a Todd. Además nunca había sido partidario del compromiso en esos términos y organizar una ceremonia no entraba en mis expectativas. Una celebración familiar a nuestro regreso estaría bien, sin formalismos ni tecnicismos.

–No me puedo creer que no nos dijeseis nada.– repetía Johnny anonadado sin dejar de mirarnos.

Todd servía en los platos el pollo agridulce con una sonrisa torcida que expresaba entusiasmo.

–A mí no me miréis.– dijo.– Hasta el día de irnos sabía lo mismo que vosotros.

Mayim rió. Era la única del grupo a la que no le pillaba por sorpresa puesto que yo mismo le había contado los planes.

*¿Puedo preguntarte algo?*

*Ya lo estás haciendo.*

*¿Por qué contarme esto ahora Jim? ¿Por qué antes de irte?*

*Prométeme que lo mantendrás en secreto, por favor.*

*Prometido.*

*Voy..., voy a pedirle a Todd que se case conmigo esta noche y necesitaba aclarar esto. No..., quería tener dudas.*

*¡Oh Dios mío Jim!* Recordaba sus brazos estrangulándome. *¡Enhorabuena! ... ¿Cuándo...?*

*Ahí viene la parte secreta. Si aceptase...*

*Que lo hará.*

*...nos casaremos en Hawaii, lejos de las miradas de la gente y los focos de las cámaras.*

–¡Oh cielos! Es tan... ¡Creí que no os vería casados nunca!

–Bueno, técnicamente no los has visto Kaley.– bromeó Simon separando el par de palillos chinos.

–¡Cállate! Lo que hubiese dado por verlos.

–Fijaros en los anillos.– Melissa se aproximó a nosotros y nos tomó de las manos analizándolos de cerca.– ¡Me alegro tanto por vosotros!

Mayim buscó mi mirada y me guiñó un ojo dedicándome una sonrisa de complicidad. Me puse de pie y todos parecieron entenderlo como un gesto para que se sentaran.