La Elegida

Capitulo 9

Mis ojos pesaban y un fuerte cansancio me invadió, lo único que podía sentir era el silencio infernal que se envolvía en mi habitación.

Me encontraba en las profundidades de un bosque, la oscuridad era abrumadora y lo único que se veía era los pequeños destellos de luz que eran proporcionados por la luna.

Mis pasos eran un poco torpes, debido a la poca visión que tenia en este momento, a segundos se escuchaban los crujidos de las ramas bajo mis pasos, mi respiración se hacia cada ves más pesada a medida que el aire se tornaba tenso.

Tenía un leve presentimiento de que alguien me estaba siguiendo, pero no quería voltearme hacia atrás para comprobarlo.

No sabía cuanto tiempo había pasado mientras avanzaba buscando algún lugar donde pasar la noche, sentía que mis pies no aguantarían ni un minuto más, el cansancio se estaba apoderando de mí en una lentitud escalofriante.

Preguntas sin respuestas cruzaban por mi mente sin un fin en común.

El aire comenzaba a faltar, pero no podía detenerme, temía que algo sucediera.

Mis pasos fueron más cuidadosos al tratar de no hacer ningún ruido, solo se escuchaba el sonido de mi respiración, intentando no perder el control de mi cuerpo.

Durante un momento sentí un gélido soplido sobre mi mejilla, automáticamente todos mis sentidos se activaron, mi corazón comenzó a palpitar demasiado rápido debido a la adrenalina que sentía en este momento, mi piel se erizo por completo haciendo que tiemble levemente.

Cerré mis ojos rápidamente incentivándome a girar mi cabeza hacia ambos lados, para poder escuchar de donde provenía aquel extraño sonido..

Lentamente fui abriendo mis ojos, mientras giraba mi cabeza hacia la derecha intentando encontrar quien fue el que lo provoco.

Con la poca visibilidad que tenía intente poder ver algún rastro sospechoso e extraño.

Cuando pude adaptar mi vista sobre la poca luminosidad que se encontraba, pude apreciar una sombra que se encontraba parada a unos cuantos metros de mi, fueron segundos los que pase observándolo, pasado los segundos este al darse cuenta de mi insistente mirada, corrió rápidamente con movimientos ágiles, intentando apartarse de mi vista.

Cuando pensaba que se había marchado, nuevamente se devolvió hacia mi corriendo en una manera sobrehumana. Mi cuerpo no actuaba y cuando quise correr fue demasiado tarde, ya que el espectro estaba sonriéndome de manera demoníaca y escalofriante.

"Esto recién comienza, deberías cuidarte" susurró con voz maliciosa, luego de eso todo se volvió oscuro, dejándome así en un profundo sueño en donde la oscuridad se adueñaba de todo incluso de mi.

Desperté abrumada intentando estabilizar mi respiración.

Un pequeño pero audible sonido hizo que levantara mi mirada, encontrándome con el rostro inexpresivo de la mujer quien encontré en la biblioteca.

Abrí mi labios para hablar, pero los cerré dudando de mis palabras.

-Necesito que me acompañes a un lugar, y no acepto un no como respuesta- sentenció, mirándome fijamente.

Pero antes que pudiera hablar, algunas palabras sin sentidos salieron de su boca haciendo que mi vista se nublara y mi cuerpo se durmiera.

Provocando que cayera en un profundo abismo.