POV. Alice Camberleck.
¿Por qué las personas tienden a pensar en lo que les hace daño?
La mayor parte del tiempo posamos nuestra confianza en personas las cual pensamos que nunca podrán decepcionarnos.
Nos cegamos tanto que no vemos nuestro alrededor, pensamos que estará eternamente a nuestro lado, que siempre podremos contar con su presencia, pero en el fondo sabemos que nada es para siempre.
Entonces... ¿Por qué dejar que sus acciones nos destruyan?
Es increíble como todo puede cambiar en tan poco tiempo, como las personas que más querías se vuelven desconocidos en tu vida, y como todo en ti puede cambiar.
-¿Hacía dónde nos dirigimos?- pregunté por décima vez, al notar como nuestro alrededor estaba repleto de árboles.
-Muy pronto lo sabrás- la voz irritada de Mercy se escuchó en ecos por todo el lugar.
Suspiré resignada al no obtener información adecuada.
El tiempo pasaba y aún nos encontrábamos dentro un auto dirigiéndonos en una dirección completamente desconocida ante mis ojos, habíamos dejado la ciudad atrás hacía unas horas y en este momento todo a nuestro alrededor estaba repleto de árboles y pequeñas montañas.
Mis ojos pesaban luego de estar horas sin cerrarse para poder descansar, el pequeño camino lleno de pequeñas piedras no permitía que descansara, cada vez que me concentraba intentando cerrar mis párpados el auto se movía bruscamente.
-¿Por qué Ethan estaba junto a ti en la sala?- pregunté luego de minutos en silencio.
Mi mirada se dirigió hacía su rostro ruborizado por mi pregunta, su manos se aferraron en el volante antes de responder.
-No lo sé- sus mejillas de enrojecieron dejando en evidencia que algo había sucedido y no quisiera contarme.
-¿No me dirás?- la observé ofendida.
-No- respondió mirándome por un breve instante con diversión en sus palabras.
-Está bien- contesté completamente ofendida.
Luego de finalizar la conversación nuestro alrededor quedó en un completo silencio, a medida que los minutos pasaban el enojo crecía en mi interior haciendo que pequeñas nubes comenzaran a formarse sobre el cielo, oscureciendo todo a nuestro alrededor.
Pero no estaba enfadada por la pequeña conversación con Mercy, me encontraba enfadada al recordar nuevamente todo lo que había sucedido horas atrás creando mucha rabia en mi interior.
Una sensación de querer dañarlos crecía en mí lentamente, alimentándose de mi dolor, disfrutando de cada emoción que intentaba reprimir.
-Alice- escuché la voz horrorizada de mi acompañante.
Mis párpados se cerraron ejerciendo presión sobre ellos, intentaba luchar contra lo que comenzaba a crecer en mi interior, queriendo volver a la normalidad, sabía que si no lograba controlar mi cuerpo quizás podría ocasionar mucho daño a mi alrededor, no permitiría que lo que habitara en mi hiciera daño a personas inocentes.
-Debes controlarte- mi cuerpo no reaccionó ante su grito- ya casi llegamos a nuestro destino- sentí un tacto sobre mi brazo para luego ser retirado rápidamente.
-Joder Alice, estás ardiendo- jadeo asustada- ¡Contrólate!- gritó nuevamente, pero esto no causó ninguna reacción en mi.
-No luches contra nosotros.
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La Elegida
Vampire«Eres nuestra reina» «El momento está llegando» Susurros y pesadillas constantemente, me mantenían confundida y asustada. Sabía que algo se avecina, pero algo muy malo. «Nuestro futuro está en tus manos» «Ya es la hora mi niña» «No tengas miedo...