POV. Castillo Camberleck.
Mis pasos eran rápidos y tambaleantes, la niebla opacaba mi vista y me era casi imposible poder seguir el camino sin perderme.
No comprendía hacía donde me dirigía siguiendo la silueta de una mujer que caminaba rápido, con prisas. Pude observar que entre sus brazos ocultaba un bulto protegiéndolo del frío espeso, apretándose sobre su pecho.
La oscuridad se escurría por cada poro de mi cuerpo, dejando solo la tenue luz de la luna, iluminando la niebla. Un pequeño llanto captó mi atención, centré mi atención en la mujer que se encontraba a tan solo unos metros de mí, sin inmutarse ante mi presencia detrás de ella.
El llanto era leve, apagándose en segundos hasta dejar que el silencio volviera al lugar envolviendonos.
Mis pasos fueron frenando a medida que una pequeña cabaña se hacía presente entre el medio de grandes árboles, ocultándose ante la presencia de los demás.
Aquella extraña se dirigió hacía la puerta de la cabaña, dejando suaves golpes sobre esta, segundos más tarde apareció una anciana.
Su mirada se centró sobre el pequeño bulto, al observar su rostro se suavizó haciéndose a un lado para dejar pasar a la mujer.
De un segundo a otro me encontraba dentro de una sala pequeña donde yacían las dos mujeres junto a una pequeña niña recién nacida.
-¿Es ella?- preguntó suavemente la anciana mirando la pequeña bebé en los brazos de la joven.
La susodicha asintió en silencio mientras delicadamente se la entregaba con cuidado de no despertarla.
-Debemos sacarla de aquí- le informó con la voz agitada.
-Alice.
-Encuéntrala- susurraron muchas voces a la misma vez, como si estuvieran angustiadas.
-No dejes que se la lleven- volvieron a repetir.
-¡Es tu hija!- gritó la anciana apareciendo de entre la oscuridad.
-Debes recordar- susurró antes de que cerrara mis ojos.
-¡No!- grité exaltado mientras lágrimas resbalaban con violencia sobre mis mejillas.
Un suave apretón sobre mi hombro hizo que mi respiración se relajara rápidamente, giré mi rostro encontrándome con el de mi esposa quien me observaba con lágrimas en sus ojos.
-¿También soñaste con ella?- susurró con la voz entrecortada.
***********
POV. Alice Camberleck.
-Ethan- susurré al verle frente a mi puerta.
-Princesa- sonrió abriendo sus brazos para que lo abrace, y así lo hice.
Rápidamente envolví mis brazos sobre su cintura aferrándome a él.
-Te extrañe, pequeña.
-Y yo a ti- sonreí feliz de verlo.
-Necesitamos hablar- su voz sonó firme una vez que nos encontrábamos dentro de la casa.
-¿Qué sucede?- pregunté preocupada.
-Es sobre los chicos- alzó su vista para mirarme a los ojos- nos ocultan algo- añadió confirmando mis sospechas.
Abrí mi boca para poder contestarle pero fui interrumpida por Mercy, quien se encontraba caminando hacía donde estábamos.
-¿Qué sucede aquí?
-Ethan- lo llamé haciendo que se diera vuelta, para presentarlo- ella es Mercy mi protectora- le presente.
Este levantó su rostro para observar, pero al momento de que miradas conectaron sus ojos brillaron.
Silencio...
Eso era lo que habitaba en la sala, un inmenso silencio. Mi mirada se dirigía desde Ethan hasta Mercy, sentía que algo estaba sucediendo entre ambos.
Carraspee haciendo que desconectaran sus miradas rápidamente.
-Tengo cosas que hacer- respondió mirándome fijamente, entonces lo comprendí.
Algo había pasado entre ambos al observarse, una idea de lo que podía ser cruzó mi mente.
Abrí los ojos sorprendida.
-No puede ser- susurré en mi interior.
ESTÁS LEYENDO
La Elegida
Vampire«Eres nuestra reina» «El momento está llegando» Susurros y pesadillas constantemente, me mantenían confundida y asustada. Sabía que algo se avecina, pero algo muy malo. «Nuestro futuro está en tus manos» «Ya es la hora mi niña» «No tengas miedo...
