La Elegida

Capitulo 44

-¿A qué te refieres, Alice?- preguntó Mercy visiblemente confundida por mi actitud.

-Ellos- balbuceé recordando- me mintieron, quisieron borrar todos mis recuerdos- fruncí mi ceño.

Era increíble cómo todo podía cambiar en solo días, como las mentiras salen a la luz, los que llamas amigos pueden defraudarte y mentirte, haciéndote daño.

¿Por qué dolía tanto?

-¿Por qué confías en las personas y luego terminas decepcionada?- le pregunté sintiendo las lagrimas acumularse en mis ojos.

-No podrás evitar hacerlo, pequeña. Algunas personas no son merecedoras de nuestro apoyo- respondió.

-¿Por qué confiar tanto en una persona y que luego te lastime?- volví a preguntar.

-¿Qué ha sucedido para que me preguntes esto?- frunce su ceño.

-Ellos...- tragué saliva incapaz de pronunciar sus nombres.

Eso era lo que me sucedía, había crecido junto a los chicos, confiaba plenamente en ellos, todos los momentos que habíamos construido juntos se habían destruido en tan solo segundos.

-¿Por qué mentirme si sabría la verdad?- me pregunté.

-Por la misma forma que tú también les mientes- volvió a susurrar la voz ronca.

-¿Ellos?- volvió a preguntar confundida.

-Los que solía llamar amigos- respondí seca.

Nunca me había gustado desquitarme con otra persona al estar de mal humor o dolida, cada vez que me encontraba de esta manera solía estar sola por horas para evitar tratar mal a alguien que no tuviera la culpa, por eso prefería estar sola hasta que me pudiera sentir mejor.

-¿Qué sucedió?- su voz se tornó ronca, y sus ojos cambiaron a unos de color miel brillante.

-Querían borrar mis recuerdos- recosté mi cabeza sobre su hombro- Dijeron que alguien les estaba ordenando a que me observen, eso fue lo que escuché antes de irme de ese lugar- sentí como pasaba su brazo sobre mi, abrazándome.

-¿Quién les ordenaba?- preguntó luego de unos minutos de silencio.

-No lo sé- respondí confundida, mientras la abrazaba aún más fuerte- no logré escuchar más nada porque salí antes de que supieran de mi presencia- suspiré.

-Debemos tener cuidado princesa- murmuró, haciendo que levantara mi mirada hacia ella.

-¿Por qué todos me llaman princesa cuando no saben quien soy de verdad?

-Te contaré- me miró- pero cuando estemos en viaje- sonrió levantándose rápidamente.

-¿A dónde vamos?- pregunté levantándome.

-Prepárate- me avisó- porque iremos hacia el palacio de los reyes- giró dirigiéndose hacía la puerta.

-¿Y mis cosas?- respondí preocupada.

-Tus cosas están listas, solo faltas tú para irnos- me esperó a un lado de la puerta- apúrate, no tardes- salió de la habitación.

Sonreí inconscientemente.

Solo esperaba poder sobrellevar las cosas con calma al estar frente a los reyes y ante la nueva princesa, la que solían llamar hija.

-Te dije que no confiaras en nadie.

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¿Llegaremos a los 100k hoy?