Mis ojos se abrieron lentamente y lo primero que se me vino a la memoria fue Jace, ya no me sentía molesta o disgustada, solo un poco dispersa, como si de repente algo hubiese dejado de estar en su lugar.
Mi cabeza seguía en la almohada pero es como si estuviese en otro lado, donde las preguntas y dudas se hacían frecuentes, una de las mas fuertes y atosigantes... ¿que provoco ese mal humor en Jace ayer?
Irónicamente la única fuente que me ofrecía esa respuesta era su boca y estoy muy segura de que no me contara nada, soy una extraña para él y se supone que el para mí también pero... yo no lo siento así.
Debía levantarme, hoy sería otro día de universidad y tenía que arreglarme sin embargo los pensamientos me adherían a la cama, quizás no sería tan bueno vivir bajo el mismo techo con un chico como el...
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Iba caminando a través del pasillo de la universidad; esta vez me trajo la señora Marie y di gracias a Dios por ello, después de aquello sucedido con Jace hubiese considerado muy incómodo estar a solas con él.
Mi cabeza estaba dispersa, los pensamientos iban y venían y sin darme cuenta el libro que traía entre manos se deslizo de entre mis dedos hasta el piso; tuve intenciones de agacharme pero una mano desconocida lo levanto por mí.
Me fije en las facciones tiernas y aniñadas de aquella chica, era pelirroja y pecosa, con una estatura ridículamente reducida teniendo en cuenta que estamos en la universidad.
Dirigió una sonrisa amable la cual correspondí sin pensarlo, parecía agradable... o quizás era que me causaba ternura su aspecto de muñequita de porcelana...
– soy Rane, un gusto -dijo repentinamente la pelirroja mientras estrechaba la mano, la cual acepte de forma tardía-
– soy Jessica -dije mientras soltábamos nuestras manos-
– es un lindo nombre, Jess, ese será tu apodo -dijo con una sonrisa cálida. ¿que? ¿Jess? Aquí como que tienen sobredosis de confianza, primero Fyl y ahora esta chica, estoy pensando muy seriamente en no pasar mas por este pasillo...
– emm... -dije frunciendo el ceño, aquello se me hacía demasiado extraño-
– oh, disculpa si soy un poco rápida o tomo confianza con facilidad... a muchos no les gusta, lo siento... -dijo con voz sumisa mientras bajaba la mirada, la verdad me dio mucha lástima que se sintiera apenada por eso, en cambio, deseara yo tener esa confianza para acercarme a las personas-
– no, tranquila, eres muy agradable, ¿en qué semestre vas? -dije con dulzura para hacerle sentir cómoda-
– el primero, apenas ingrese -dijo con un brillo en la mirada-
– oh, que coincidencia, yo también -dije con entusiasmo-
En fin, la pelirroja y yo hablamos de muchas cosas, resulta que cursábamos varias clases juntas pero nunca habíamos cruzado palabra alguna hasta el momento; la verdad es que ella me resulto muy agradable, su manera de expresar sus pensamientos es... libre... si así puedo describirlo pero de resto es muy tierna.
El pasar de las clases fue como un pestañear, literalmente, voló la mañana. Tras meter mi libreta y lápiz en mi bolso me dispuse a salir del aula, iba con un pensamiento rondando en mi mente como un millón de pájaros
<<¿Quién me iba a buscar hoy?>>
Para mi fuero interno rogaba que no fuera Jace y a la vez deseaba verlo de nuevo, no se... es extraño. Esa mañana no lo vi en el desayuno y me provoco cierta ansiedad y alivio ligados, era muy poco tiempo para acostumbrarse a una persona, es mas... como podría acostumbrarme tan rápido a alguien como el... cambiante, engreído, maleducado, confuso, encantador, atractivo, dulce... demonios! Porque tiene que ser tan...tan... diferente...
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EN LA MISMA CASA [ #1] *𝗘𝗡 𝗘𝗗𝗜𝗖𝗜𝗢́𝗡*
Teen Fiction"𝓃ℴ 𝒷𝓊𝓈𝓆𝓊ℯ𝓈 𝓊𝓃𝒶 𝓇ℯ𝒶𝓁𝒾𝒹𝒶𝒹 𝓆𝓊ℯ 𝓃ℴ 𝓅ℴ𝒹𝓇𝒶́𝓈 ℯ𝓃𝒻𝓇ℯ𝓃𝓉𝒶𝓇..." El inicio de un todo siempre es intenso... No somos nada. Decía... Pero el destino conspiró... A nuestro favor y en nuestra contra. Y ahora... Frente a las verdade...