EN LA MISMA CASA [ #1] *𝗘𝗡 𝗘𝗗𝗜𝗖𝗜𝗢́𝗡*

Capitulo 22.- ¿Pero que...? (Maratón 3/3)

Mis parpados se abrieron pesadamente y me sentí segada por una luz blanca justo sobre mi cabeza, a mis pulmones les costaba adaptarse y por un instante se me hizo difícil tomar aire, hasta que en una gran bocanada retome el aliento.

Parpadee rápido para adaptar mi vista y al aclararse aprecie un techo blanco con una lámpara encendida no muy lejana, trague un poco y sentí mi garganta seca, cosa que se me hizo incomoda. Sentía mi cuerpo pesado y un punzaso en la cabeza no dejaba de atosigarme.

- Jessica... -escuche una voz cercana y al voltear un poco me conseguí con esos ojos grises observándome preocupados, sonreí inconscientemente a lo que el rio entre dientes acercándose un poco a mi rostro- he visto todo tipo de reacciones al verme llegar, excepto que se desmayen – me susurro a lo que yo reí un poco pero enseguida retuve mi voz por el martillazo que sentí en la cabeza, por lo que lleve mi mano hasta mi frente- ¿te duele? –me pregunto, a lo que yo asentí, él acerco su mano hasta mi cabeza y la acaricio un poco – si, es que fue una caída un poco... ¿cómo decirlo? Frente al piso – reí un poco, me hizo gracia la expresión.

Carraspee un poco mi garganta.

- Es que... -trague- tu presencia causa susto –sonreí .Él me miro con ambas cejas elevadas, indignado.

- Pues eso no lo decías en la playa – me sonrió pícaro por lo que yo rodé los ojos.

- Ayúdame a sentarme –le pedí, cosa que hizo sin siquiera protestar. Sentí un mareo invadirme de repente pero segundos después todo se estabilizo.

Mire a mi alrededor y todo volvió a mi mente...

La señora Marie...

- ¿y tu mama? ¿como esta? – pregunte dirigiendo mi mirada hacia él.

- Estará bien, se quedara por esta noche en observación – se levantó de la silla y poso frente a mí, tomándome por las mejillas- y tu como que querías hacerle compañía –sonreí un poco cerrando mis ojos.

Sentí como Jace depositaba un beso en mi frente, haciéndome sentir protegida bajo su presencia, al abrir mis ojos nuevamente, se cruzaron con los suyos e involuntariamente me fui hasta sus labios, tal cual como lo hizo su mirada.

Quedándonos un momento inmóviles, decidiendo que hacer.

Finalmente él empezó a acercarse, permitiéndome en su lentitud cerrar mis ojos, en la espera de que sus labios rozaran con los míos pero...

El sonido de la cortina nos interrumpió, haciendo que Jace retirara su tacto de inmediato y diera dos pasos atrás.

El doctor nos observó a ambos por un instante pero enseguida desvió su mirada al papel en su tablilla.

- Bien, señorita Jessica –ojeo un poco sus anotaciones- ya puedes ser libre de irte, solo fue un desmallo, asi que no hay nada grave, venía a chequear y como he visto que ya has despertado pues... no tengo nada mas que hacer, que tengan buenas noches... -dijo asintiendo como despedida y sin mas se retiró, claro.. nada mas que hacer que interrumpirnos...

(...)

Caminaba con Jace hacia la salida después de haber dado una última vuelta por la habitación de la señora Marie.

La verdad después de lo que le escuche decir no tuve ánimos de entrar, por lo que observe a Jace despedirse desde el marco de la puerta, me sentí mal por eso pero no sé, simplemente fue impactante escuchar tanta información de un solo golpe, por otro lado tenía la gran duda de si sería cierto lo que dijo o solo producto del efecto de los antibióticos.