EN LA MISMA CASA [ #1] *𝗘𝗡 𝗘𝗗𝗜𝗖𝗜𝗢́𝗡*

Capitulo 14.- Enfrentamiento

Multimedia: Bobbi <3

Jace.

Trate de seguirla pero Amelie me frenaba y por primera vez desde que la conocí quería que desapareciera, no hacia mas que retenerme pero yo no quería dejar ir a Jessica con esos pensamientos tan erróneos.

Yo la... demonios, no sé ni lo que siento por ella, no tengo palabras para definirlo, es como si supiera que es incorrecto pero aun así, quiero ir en su busca y zacear estas ganas tan inmensas de besarla, de dejarle claro que no es solo eso, que nunca fue solo eso...

Trataba de avanzar a través de la calle pero el aguante de Amelie me frenaba, jalaba de mi brazo con tanta constancia que ya perdía mis cabales, no estaba para escenitas de niña malcriada ahora.

– ¡podrías dejarme en paz Amelie! ¿¡qué demonios te sucede!? -grite deteniéndome, ya no podía mas con esto, nunca la había visto comportarse de tal forma y honestamente eligió el peor momento-

– No deberías estar corriendo tras de ella, quiere estar sola, empeoraras las cosas -dijo elevando la voz, apreté con fuerza mi dentadura, no le grites... no le grites...

– Suéltame Amelie, y hazlo ahora -dije remarcando la última palabra, manteniendo la poco o nada de paciencia que me quedaba.

Me miro enrojecida de la furia y por dios que nunca sentí mas ganas de mandar a la mierda a alguien.

– Yo te saque de allí, deberías agradecérmelo y no estar gritándome – irónicamente ahora quien gritaba era ella, no hice mas que soltar una risa sarcástica al aire, bendito el día en el que esta complicación melodramática llego a mi vida.

– Deja el drama -tome su mano y la despoje de mi brazo- porque para empezar este problema se debe a ti, al igual que todos los putos dilemas que han surgido en mi vida desde que llegaste, estoy harto de tus incoherencias, estoy harto de ti, ahora déjame en paz una sola vez en tu vida -dije ardiendo de rabia, completamente inconsciente de lo hiriente y mordaz que llegaron a ser mis palabras.

Amelie me observo con los ojos húmedos, su boca se abrió y cerró rápidamente, como si en algún momento una palabra fuese a escapar pero no paso. Pude darme cuenta que la había lastimado, que había sido un imbécil al decir eso, pero cuando trate de tomar su mano ella la aparto con un desagrado y desapego inmediato, dejando caer una sola lagrima a través de su mejilla cuando sus ojos azules me acuchillaron.

– No quería... -trate de disculparme pero ella me interrumpió.

– ¿Sabes qué? ¡vete a la mierda! -espeto con fuerza, para luego sin mas darse la vuelta y alejarse en dirección contraria.

Solo pude halar de mis cabellos con frustración mientras de mi voz emergía un gruñido de exasperación, ¡¿Pero qué demonios me está sucediendo hoy?! ¿Es que nada me va a salir bien? ¡¿qué mierda me sucede?!

Mire en la dirección por la que había desaparecido Amelie pero para que mentirme a mí mismo, no era a ella quien quería ver en este momento, así le hubiese lastimado como lo hice seguía pensando en una sola persona...

Jessica.

Caminaba con tanto desorden en mi subconsciente que quizás ni logre notar que había anochecido por completo.

Mis ojos combatían para no derramar ni una sola lágrima, pero contenerlas me formaba un enorme nudo en la garganta, ¿porque demonios dije eso? ¿Porque? ¿Qué es lo que me sucede que me comporto como si fuéramos algo? Pero no, no lo somos... ni lo seremos...