Losing Virginity (BORRADOR)

Capítulo 60: "Decir la verdad"

*Mikazorra en galería, si no la amara la odiaría :) xd loool chaval ahrekhe*

Aún seguía recordando a la perfección la cara de Eric al golpear a ese viejo verde que no dejaba en paz a esa chica, Mel, ni a mí. Estaba tan enojado, tan celoso, que en parte me halagó que me defendiera, me enterneció, pero cuando otros dos más se sumaron y uno de ellos golpeó sus costillas con fuerza, no pude evitar meterme en el medio de la pelea para que Brennett no terminara más lastimado, de nuevo.

¿Qué recibí al haberme metido en el medio? Bueno, pues el puño de uno de esos viejos inútiles fue a parar a mi nariz. ¿Y que salió de eso? Pues que una cascada de sangre manchara toda mi ropa, y que a Eric casi le diera un ataque al corazón, y, claramente, que mi novio se enojara más y que entre él y Piero mataran a golpes a esos tres hombres. 

Eric estaba como loco, y sin pensarlo dos veces me sacó de ese lugar, me metió al auto y empezó a conducir a toda velocidad hacia el hospital. Ya había dejado de sangrar, pero dolía como los mil demonios, y como veía a Eric más que nervioso, le decía:

- No es nada, Eric. Fue solo un poco de sangre.

Y entonces él me miraba enojado y con el ceño más que fruncido y decía, enojado, y gritando:

- ¿Sólo un poco de sangre? ¡Ese hijo de puta te rompió la nariz, Val! 

- Pero... - empezaba yo y él no me dejaba terminar.

- ¡Ese maldito desgraciado! Juro que lo hubiera matado - se pasaba una mano por el cabello nerviosamente y decía en voz baja -. No soporto el hecho de haber visto como te golpeaban. No lo soporto. No puedo ni recordarlo sin que mi cuerpo se llene de rabia. 

Yo simplemente me callé, porque supe que detrás de esas palabras había otro significado, pero no podía averiguar cual, y eso me causaba estrés. Cuando llegamos al hospital, Eric empezó a gritar como loco que atendieran a su "malherida novia", y eso hicieron. No había pasado nada malo, el hueso por suerte no estaba roto, y fue solo el impacto tan fuerte que logró que empezara a sangrar de esa manera o algo así. Tenía una herida abierta sobre el puente de mi nariz, y entonces me pusieron una pequeña venda sobre esta.

Cuando llegué a casa, para mi gran desgracia estaba Matt, y cuando vio mi cara, lo primero que hizo fue querer matar a Eric, pero entonces yo lo detuve y le expliqué qué había pasado. ¿Saben que hizo Eric? Se escondió detrás de mí. Otra vez. Y yo que pensaba que se había visto tan masculino golpeando a esos hombres, y entonces iba y se escondía en mis espaldas del puño de Matt. Ni quien entienda a Eric Brennett.

Por suerte habían empezado las vacaciones de Navidad, por lo que me había pasado todo el día durmiendo, y me llevé una gran sorpresa cuando desperté. 

- ¿Qué haces aquí? - pregunté refregando mis ojos. Eric sonrió.

- ¿A caso ahora no puedo venir a ver como estás, enana? - se sentó en la cama, a mi lado, con una media sonrisa.

- Si... Pero no cuando estoy durmiendo - me quejé cubriendo mi rostro con la almohada -. Vete.

Escuché su risa y luego sentir uno de sus dedos jugar con el dobladillo de mi camiseta, para luego sentir la piel fría de su índice pasear relajadamente por mi vientre. Agh, el idiota sabía que eso me volvía loca.

- No me quiero ir. - de repente quitó la almohada de mi rostro y sus labios se encontraron con los míos. Instantáneamente habría empezado a besarlo, solo si no hubiera recordado que recién me levantaba.

- No. - espeté apartando su cara de un manotazo. Mis ojos se clavaron en su mirada divertida, y sentí su sonrisa en la palma de mi mano.

- ¿Qué te pasa?