La identificación es un proceso en el cual la acción y el efecto de identificar o identificarse. Esto es reconocer si una persona o una cosa es la misma que se busca, hacer que dos o más cosas distintas se consideren como una misma, llegar a tener las mismas creencias o propósitos que otra persona, das los datos necesarios para ser reconocido.
Esta identificación está vinculada a la identidad, que es un conjunto de los rasgos propios de un individuo o de una comunidad. Dichos rasgos caracterizan al individuo o al grupo frente a los demás. La identidad es, por otra parte, la conciencia que un ser humano tiene respecto a si mismo.
Para la sicología, la identificación es la imagen consistente del sujeto sobre sí mismo, formada por las habilidades, creencias, etc. Esta imagen se construye a lo largo de toda la vida, aunque el proceso es particularmente más activo desde el momento que nos cuestionamos sobre preguntas existenciales de nuestra vida.
Para empezar debemos de saber que identificarse con algo que tú no eres, es el inicio de la creación de TU Ego.
Te puedes identificar con el cuerpo, con la mente, pero desde el mismo momento en que te identificas, te pierdes de tu centro. En eso consiste el ego, así es como se forma y como cristaliza el ego.
Siempre que afirmas el "Yo" se produce una identificación con algo, con un nombre, una forma, con un cuerpo, con un pasado, una mente, unos pensamientos, unos recuerdos. Se produce una profunda identificación. Solo entonces puedes afirmar el "yo". Si no te identificas con ninguna otra cosa y sigues siendo tú mismo, no puedes decir "yo". Ese "yo" simplemente desaparece.
La identidad se convertirá en tu encierro. No te identifiques, sigue siendo tú mismo, así encontraras el camino a la libertad. En eso consiste el cautiverio. El ego es el cautiverio, la ausencia de ego la libertad. Ese ego no es sino identificarse con algo que tú no eres.
Pongamos un ejemplo. Todo el mundo se identifica con su nombre, pero todo el mundo nace sin nombre. Después el nombre adquiere tanta importancia que hay quienes son capaces de morir por él.
¿Qué es un nombre? En cuanto te identificas, adquiere gran importancia. Sin embargo, todas las personas nacen sin nombre. Lo mismo ocurre con la forma. Todo el mundo se identifica con su propia forma. Todos los días te pones ante el espejo, ¿y qué ves? ¿A ti mismo? No. Ningún espejo puede reflejarte a ti tal y como eres, sino solo la forma con la que te identificas. Pero la maquinación de la mente humana alcanza tal grado que la forma cambia constantemente, día a día, y nunca te desilusionas. De ahí nacen los problemas de autoestima.
¿Cuál era tu forma cuando eras pequeño? ¿Cuál era tu forma cuando estabas en el seno materno? ¿Cuál era tu forma cuando solo estabas en la semilla de tus padres? Si te presentaran una fotografía, ¿Reconocerías el feto en el vientre de tu madre? ¿Lo reconocerías y dirías, "Ese soy yo"? No, pero debes haberte identificado con él mucho antes... Después viniste al mundo, si pudiera reproducirse tu primer llanto, ¿lo reconocerías y dirías, "Es mi llanto?. No, pero era tuyo, y debes haberte identificado con él.
Si se pudiera enseñar un álbum a un moribundo... Una forma en continuo cambio... Sí, hay una continuidad, pero cada momento es un cambio... El cuerpo cambia cada siete años, por completo, nada sigue igual, ni una sola célula. Sin embargo, pensamos, "Esta es mi forma, esto soy yo". La conciencia carece de forma. La forma es algo externo que cambia sin cesar, como nos cambiamos de ropa., por eso la conciencia esta origina en un estado de pura energía, en un plano cuántico, no la puedes ilustrar en un forma, es una energía sin forma.
Esa identificación es el ego. Si no te identificas con nada, ni con un nombre, ni con una forma, con nada, ¿dónde está el ego entonces? Entonces eres, pero al mismo tiempo no eres.
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La Búsqueda de Nuestra Energía Elemental (Completa)
SpiritualitéCada vez que me levanto en la mañana, tengo una sensación de que nada me hace sentir bien. Cada día que pasa siento algo en mi interior que está encerrada(o) en si misma(o), en un cuerpo que tampoco siento que me pertenece, que no es mío. Cada vez m...