Ángeles Caídos.. {Liam & Tú}

Capitulo 10:

Girando un poco la cabeza, ví una forma de sombras estirarse por mí suelo. Me gire rápidamente para mirar la ventana, pero se encontraba la luna, la única luz en la habitación que hacía que se formaran aquellas sombras.
Pero allí no había nada. Apreté con fuerza la almohada contra mí y me dije que era una nube pasando sobre la luna. O un trozo de basura volando en el viento. Esperé hasta que se me calmara el pulso. Para cuando reuní el valor para salir de la cama, el jardín debajo de mí habitación estaba silencioso y quieto. 

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El profesor de biología estaba en la pizarra explicando nuevos temas. Pero mi mente estaba al otro extremo del salón.
Estaba ocupada haciendo una lista por la cuál Liam y yo no deberíamos ser compañeros, y al final del día, se lo entregaría. «Demuestra poco interés en trabajar en equipo» ― agregué.

Un susurro detrás de mí, hizo que me alertara.

― ______, ¿irás a la fiesta de mañana? ¿Verdad? ― Dijo Catalina evitando la clase.
― No, no iré porque gracias a mi compañero de banco, tengo que terminar todos los trabajos yo sola ― Dije tratando de que Liam no escuchara, aunque fuera imposible.
― Vamos ___, James irá.
― Te dije que no, no iré, además, James estará con Mariana.
― No. ¿Qué te hace pensar eso?
― Pues averígualo tu misma. ― Dije señalando con la mirada.
Estaba James con su compañera de banco. Mariana. Ella me odia, y no sé porqué. Ellos estaban disfrutando de una conversación que al parecer “era divertida” ya que se reían a cada rato. Él, era mi amigo. «Era». Aunque no me importa que él me cambie. «Cuando una persona te cambia por otra, no es tu verdadero amigo.» Pero últimamente las personas cambian a sus amigos por personas desconocidas que se hacen pasar por agradables. Por unos meses él me gustó, pero llegué a la conclusión de que jamás pasaría y solo quedábamos como amigos. Aunque, creo que ya no somos ni amigos, porque al parecer, se ha olvidado de mí. Mi pulso paró por completo cuando recordé la advertencia de Liam con James. ¿A eso se refería? ¿A qué más?

Encontré unas marcas de nacimiento de Liam y estaba asustada por el incidente en mi ventada la noche anterior. No estaba completamente segura de que Liam me estuviera espiando, pero no podía ignorar la coincidencia de que estaba casi segura de que vi a alguien mirando por mi ventana solo horas después de que me encontré con él.

― ¿Señorita Greyson? ― El profesor se detuvo en el frente del salón, con su mano extendida en un gesto que mostraba que estaba esperando por algo ― mi respuesta. 
― ¿Podría repetir la pregunta? ― Pregunté.

La clase rió.

― ¿Qué cualidades te atraen en una relativa pareja? ― Dijo el profesor, con un poco de irritación.
― ¿Una relativa pareja?
― Vamos, que no tenemos toda la tarde.
― ¿Quiere que mencione las características de…?
― De una posible pareja. SÍ.

Sin proponérmelo, miré a Liam de costado. Él estaba recostado en su silla, estudiándome con satisfacción. Luego mostró una de sus sonrisas burlonas y picaras. Hasta que me dijo por lo bajo. «Estamos esperando».
Yo puse mis manos sobre la mesa, esperando lucir con más compostura de la que en realidad sentía. ― Nunca he pensado sobre ello.
― Bueno, pues piensa rápido.
― ¿Podría preguntarle a otro primero?

El profesor señaló con impaciencia a mi izquierda. «Tu turno Liam»

― Inteligente. Atractiva. Vulnerable.

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