Profesor puede ser sinónimo de prohibido pero una vez que las miradas se cruzan, las mentes vuelan y los pensamientos se nublan, no hay vuelta atrás. Prohibido se transforma en deseado.
El profesor de arte y literatura, Paul Hart, lanza su flecha d...
¿Qué pasó con nosotros? Vaya, ni lo podrían imaginar amigos.
Me casé con Paul.
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Sí, nos casamos en el museo de las artes porque queríamos algo diferente y especial. En la luna de miel, comí muchos rollitos de canela porque tenía que calmar los nervios de todo lo que había sucedido.
¡Ya eres mi esposa! – dijo Paul entre risas – y sigues ansiosa.
Es normal en mi – dije mientras miraba a todos lados – nunca había pasado una luna de miel en un yate – Paul negó.
¿Habías pasado otra luna de miel? – dijo coqueto acercándose a mi cuerpo.
Quizás – bromeé y reímos – esposo – susurré.
Esposa – respondió con una sonrisa coqueta - ¿hagamos el amor y luego leamos alguna novela? – preguntó con naturalidad. Me ruboricé - ¡sigues ruborizándote!
¡SIEMPRE! –grité y lo hice reír.
Ven aquí amor mío – exclamó tomándome en sus brazos – preciosa – agregó en mis labios.
Bueno, algo así fue porque no puedo decir más. Ya me estoy ruborizando por eso. Bruce tuvo cachorritos con Sasha y decidimos regalarlos a las personas que querían perritos para sentirse acompañados. Vivimos en la casa de Paul y arriendo mi departamento a una chica que vive con su novio. Son muy agradables. Mi mamá no dejaba de llorar en el matrimonio y los familiares no dejaban de bromear por el hecho de que Paul había sido mi profesor.
Hemos hecho algunas exposiciones juntos y han sido grandiosas, lo he pasado muy bien. Me he enterado que Steve se casó, Natalie está comprometida con Stefan y David dice que está asustado porque está muy enamorado ¡es tan gracioso!
Hay otra cosa que no les he contado pero es que aún no lo creo...
¡Estoy embarazada!
Será un niño y se llamará Pablo (sí, por Pablo Picasso) y además suena como Paul.
¿Los he sorprendido? Sí, así estoy yo.
Estoy segura de que Paul será un excelente padre porque besa mi abdomen todos los días y le habla con naturalidad. Le gusta leerle fragmentos de sus libros favoritos y lo acompaño mientras pinta. Creo que nuestro pequeño será un artista.
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Ahí está ¿acaso no es tierno?
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Ahí Paul está orgulloso del dibujo que Pablo hizo en un huevo
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Creo que se parecen ¿no es así?
Pablo nos preguntó ''¿cómo se conocieron papis?'' y nos pusimos a reír ¿qué le íbamos a decir?
Buena pregunta hijo – dijo Paul pero no sabía que responder – cuando crezcas, te lo explicaremos ¿está bien? – Pablo asintió y siguió comiendo. Miré a Paul y me guiñó un ojo. Caminé hasta él y me senté sobre sus piernas – le diré que eras mi alumna y que me dejaste enamorado, que nos besamos en la sala de fotocopias, que hicimos cosas sucias en la sala de implementos, que nos ocultamos en mi oficina y otras cosas – susurró en mi oído y reí.
Y luego lo contará en el jardín de infantes como si fuera la historia de la cenicienta – bromeé y lo hice reír.
Bésame – susurró Paul – señorita Evans – me acerqué a su boca y lo besé.
¿Hademos una pintuda papis? – preguntó nuestro hijo y reímos.
Claro que sí campeón – dijo Paul acariciando su cabello – cuando termines de comer – nuestro pequeño asintió animado.
Debes comer ese brócoli o no pediremos una pizza – le dije y Paul negó.
Pediremos la pizza igual amor – murmuró y lo miré con los ojos entrecerrados.
Gracias por interrumpir mi momento de exigencia maternal – bromeé y lo hice reír – recuerda que iremos al baby shower de Natalie la próxima semana – dije mientras acariciaba su mejilla.
Cierto – murmuró Paul – casi lo olvido – dijo con la mirada perdida.
No te olvides de amarme – susurré y sonrió.
Eso jamás – agregó cerca de mis labios – nunca – nos besamos tiernamente mientras nuestro hijo alzaba sus manitos para que lo abrazáramos – ven aquí – dijo Paul tomándolo en brazos – hoy te leeré un cuento – Pablo jugaba con mi collar.
¿Le vas a leer algo de Shakespeare amor? – bromeé y Paul entrecerró los ojos.
Juguetona – dijo estirando su brazo para acercarme más a él. Me sentía completa. Tenía una bella familia, un hermoso hijo, una sonrisa en mi rostro y a un hombre excepcional. Todo había sido perfecto. Ahí descubrí las frases sabias que había escuchado alguna vez...
La vida es como un juego de ajedrez. El destino saca o mueve piezas, te mueves, chocas, te sientes poderoso y a la vez intimidado pero al final, todo debe caer en su respectivo lugar.
