mama said

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Después de aquellos Josh se tuvo que ir temprano, disculpándose con el menor, pero tenía que estar a altas horas de la mañana en el hospital recuperando todo el tiempo usado con Tyler, el castaño no dijo más y dejo que el tintado, después de unos cuantos besos más y otros te quiero se fue.

Al día siguiente donde Ruby regreso, Tyler le contó lo que había pasado la noche anterior haciendo que la castaña le felicitara y comenzara con sus típicas reacciones. Pero la castaña no quiso preguntar si hubo algo más que sólo besos, ese era el único problema que tenía con Tyler, era muy puro e inocente como para tener dieciocho, sabía que el menor no sabía nada sobre el tema sexual y seria incómodo tener que explicarle todo.

Las clases en aquella pequeña escuela de arte habían ya comenzado, si no fuera suficiente con que Josh no pudiese ver al menor ahora el castaño vería menos al tintado cuando sus clases comenzaran. Pero Tyler no podía quejarse, hablando con el tintado por teléfono a altas horas de la madrugada, escuchando como se quejaba de no haber dormido nada por seguir en aquel hospital y que moriría por tener al castaño en aquellos momentos.

Pero había días en los que podían tener cortos momentos juntos, como cuando Tyler se encontraba al tintado cuando regresaba de sus clases y el mayor salía para comenzar sus prácticas y ahí al menos podía verse y hablar rápidamente y después darse un pequeño beso de despedida para hablar por el móvil unas horas después.

Un mes haciendo esto cansaban al tintado, él quería ver a Tyler y poder besarle, poder pasar un día tranquilo a su lado y descansar de su explotación en el hospital, así que después hablar con el que se encargaba de él y otros más estudiantes, esperando que entendiera su situación y dejarle salir un poco más temprano o tener un día libre. En cambio, Tyler no tenía ningún problema él estaba fuera de casa por las mañanas y antes de que el sol se escondiese ya estaba de vuelta en su departamento y le facilitaba las cosas a Josh.

Josh sabia lo mucho que Tyler amaba el sushi, terminando por comprar esta simple comida en el local a calles del hospital, y después hablar con el menor, preguntándole si estaba ocupado por la tarde y poder ir a su piso a pasar la tarde juntos.

El castaño emocionado acepta y arregla el lugar, diciéndole a Ruby que vendría el tintado a comer la castaña decide salir y ver si Jude estaba en casa, no quería arruinarles el momento a aquellos dos tortolos como al principio.

Y después de que Josh fuera a comprar aquella fría comida y se arreglase un poco en su departamento fue a con Tyler, el lugar era cálido y sencillo no como la primera vez con luces tenues y velas, pero aún seguía siendo perfecto.

No desperdiciaron la oportunidad y cuando se miraron los besos comenzaron, eran como siempre, tiernos e inocentes donde Tyler terminaba gimoteando cuando el mayor se separaba. Y comenzaron a comer, platicando sobre todo lo que hacían tanto en el hospital como en aquella escuela de artes.

La comida eventualmente terminó y aquella pareja terminó en el sofá, donde Tyler seguía contándole sobre todo lo que estaba aprendiendo y lo que verían hasta final de mes, Josh le escuchaba atentamente, acariciando dulcemente la piel que era descubierta de su vestido, haciendo estremecer al menor.

Los besos volvieron a comenzar, pero aquella inocencia se había comenzado a ir, Josh mordía delicadamente los labios del menor y su lengua se movía de un lado a otro haciendo que el menor dejara escapar extraños y vergonzosos sonidos, terminando con sus mejillas rosadas y esperando a que el mayor no los hubiera escuchado para nada.

Tyler asustado al sentir como un calorcillo crecía en su vientre bajo se separó del mayor, con mejillas sonrosadas y labios hinchados, mirando como el tintado sonreía aun acariciando aquella tersa piel del menor, empeorando aquel calor que crecía en Tyler, asustándolo cada vez más. −N-no Josh, no. −Murmuró, separándose del mayor que le miraba confundido. −Yo, eh, yo... −Mordió su labio y terminó por separarse completamente del mayor, quitando su mano de su pierna. − ¿P-puedo pintarte Jish? −Se levantó del sofá, yendo a donde estaba el caballete doblado y unos blancos lienzos descansando sobre la pared.

Josh suspiró, pasando una de sus manos por su cabello y tomar uno de los cojines, terminando por ponerlo entre sus piernas esperando que Tyler no mirase lo que había causado en el tintado. −Claro. −Murmuró con una sonrisilla algo molesta.

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