Capitulo cuarenta.

8.1K 354 6
                                    

Mishauv me sonríe malicioso.

—Sí, probablemente matando a algunos, no tienes idea como pueden lamerme los pies cuando están sufriendo.

Me detengo en la última puerta del pasillo y me giró a mirar a mi compañero.

—Prefiero que no entres conmigo. Hablaré con Viktor.

Mishauv asiente y se aleja. Tomo aire y abro la puerta Viktor está sentando detrás de su inmenso escritorio de madera, botellas de ron y vasos hay encima de ella cubriendo la mayor parte junto a diferentes papeles de diferentes colores. Lo saludo con un movimiento de cabeza e intento no mirarlo directamente a los ojos, Viktor se inclina del escritorio y cruza sus dedos, su mirada intensa se intensifica sobre mí poniéndome nervioso.

— ¿Y bien? —pregunta.

—Fallo—bajo la cabeza para no mirarlo.

—Lo sabía—dice rascando su mentón.

Frunzo el ceño.

— ¿Y porque me has ordenado hacerlo por las buenas? Tu estilo es mas de romper los huesos hasta conseguir lo que quieres—digo.

—Solo quería ver como perdías el tiempo y también quería saber si acudes a todas mis órdenes si fueran incluso estúpidas. Ahora se muy bien que si te pido que me beses el culo lo harás.

Aprieto los puños reprimiendo mi necesidad de golpearlo. No puedo. Si llego a ponerle una mano encima me despellejara con sus propias manos y no quedará ningún rastro de mi cuerpo.

Viktor ríe al notar mi cara enrojecer y se levanta para rodearme y poner una mano sobre mi hombro.

—Siento tus ganas de golpearme te recomiendo no hacerlo—dice palmeando mi hombro caminando a mí alrededor—Ahora, volviendo al plan me pondré serio y comenzaré con el verdadero. Quiero que hagas cualquier cosa para conseguir esos planos, coge las armas también. Si los tengo puedo tener gran parte de los Estados Unidos y Rusia en la palma de mi mano.

— ¿Cualquier cosa? ¿Hasta matar a Hamilton? —pregunto.

Viktor sonríe ante mi tono ansioso.

—Hasta matar a Hamilton—afirma.

—Hecho—sonrió satisfecho—Hare lo que sea para conseguirlos.

—Así es como piensa un mafioso, hijo mío—sonríe.

Viene drama del bueno🔥😕. ¿Tendrán Ian y Vee un final feliz? Quien sabe.

Un mes de placerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora