maratón 5/6

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Narra Elisabeth:

Este verano ha sido bastante deprimente, Harry y yo intentamos estar lo menos posible dentro de la casa de nuestros tíos.Solemos salir todos los días a dar un paseo a un pequeño parque que hay cerca de la casa. Sobre Hogwarts, no hemos recibido ni una sola a carta de nuestros amigos, ni siquiera de Fred, y eso me preocupa bastante la verdad. Después de lo de que él fuera mi tesoro en la prueba del lago del torneo no hemos vuelto a hablar de un nosotros... bueno, realmente nunca hubo un "nosotros" , aunque siempre supe que sentía cosas diferentes por él que por George y creí que él sentía lo mismo por mí pero ya no lo tengo tan claro. El curso pasado le vi pasar mucho tiempo con Angelina Jhonson  quizá sea porque son los dos del equipo de quidditch pero no lo creo y además ya no hace tantas bromas con George y conmigo. También es verdad que este último año ha sido complicado, con lo del torneo, el regreso de Voldemort y la muerte de Cedric, que al parecer ha afectado a Harry demasiado, todas las noches tiene pesadillas con lo que pasó aquel día en el cementerio. Pero este año ya no hay excusas, en cuanto vuelva a ver a Fred hablaré con él, creo que los dos lo necesitamos.

-¡Elisabeth!- me llamó mi hermano.

- ¡Dime!

-¡Es hora de nuestro paseo!

-¡Voy!

Harry y yo salimos de la casa y nos dirigimos a los columpios del parque al que habíamos estado yendo los últimos meses. Nos subimos a ellos y comenzamos a hablar.

- Hermione y Ron no me han mandado ninguna carta, no es raro en Ron ya que es demasiado vago pero si me extraña de Hermione, ella siempre suele mandarme cartas sobre los viajes que hace con su familia y los libros que se lee.- se quejó mi hermano.

- Fred y George tampoco me han mandado nada a mí, la única carta que he recibido este verano fue una de Neville que había vuelto a perder a Trévor y para decirme que su abuela se había cambiado de sombrero y le tenía muy asustado.

-Algo tiene que estar pasando pero ¿Qué podrá ser?

-¿Crees que se habrán olvidado de nosotros?

- No, claro que no. Estoy seguro de que lo que quiera que sea que esté pasando nos lo están ocultando.

- Pues espero que no sea nada malo.

En ese momento apareció la persona a la que menos queríamos ver, nuestro primo Dudley y su panda de estúpidos.

-Pero mira a quiénes tenemos aquí, si son mis primos los raritos-fanfarroneó Dudley a lo quesus amigos contestaron con unas risas burlonas. 

-¿Qué haces aquí?- preguntó Harry de manera despectiva.

- Buscaba a alguien a quién pegar.

- Deja de pegar a niños de 10 años y métete con gente de tu tamaño.- se enfadó Harry.

- ¿Cómo con tu novio? Cedric...- Dudley empezó a burlarse de las pesadillas de mi hermano.

- Cálate Dudley y vete de aquí.- le grité enfadada.

- ¡Cedric! ¡Cedric!- lloriqueaba imitando a mi hermano en sus pesadillas.

- ¡Lárgate ya estúpido!

- ¿O qué? ¿Se lo vas a decir a tus papás? ¡Ah no! Si están muertos- Harry apretaba los puños enfadado pero yo no podía callarme.

-¡Ahora si te has pasado imbécil!- dije sacando mi varita y acercándome peligrosamente a él mientras le apuntaba, él retrocedió boquiabierto y sus súbditos salieron corriendo para el otro lado.

- ¡Estúpidos!- nos gritó mientras corría como todo un cobarde.

El cielo empezó a oscurecerse, empezó a hacer un frío infernal y pareció que la felicidad se escapaba y entonces me di cuenta.. ¡Dementores!

-¡Corred!

Grité y los tres comenzamos a correr lo más rápido que pudimos hasta llegar a un pequeño túnel en el que los dementores nos alcanzaron y comenzaron a succionar nuestros recuerdos.

- ¡EXPECTO PATRONUM!- Harry lanzó el hechizo y los dementores se fueron.

MellizosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora