One-Shoots Love Live

Madres al rescate.

Eli y Nozomi habían tenido una niña, su pequeño ángel Mari, pero ella se sentía algo sola, por lo cual sus madres decidieron traerle algo de compañía por lo cual ese fue el día en el cual llego You a la vida de Mari.

Ambas chicas habían comenzado su vida en la preparatoria pero como siempre algo puede tener pequeños problemas. Ambas chicas siempre se apoyaban mutuamente, incluso cuando algo inesperado sucedió en su vida. El amor llego a ambas chicas, You se había enamorado de una chica de Tokyo, esta era Riko Sakurauchi; mientras que para el caso de Mari esta se había enamorado de la chica que tenía una actitud seria y diferente a la de Mari, Dia Kurosawa.

Eli y Nozomi se enteraron de esto, por lo cual no dudaron en ofrecer su ayuda a sus hijas.

-¡¿Qué ustedes que!?
Exclamo You.

-Vamos cariño, es una oportunidad única.
Trato de calmarla Eli.

-Pero mama.

-¡Sin peros! ¡Salgan ahí y sean valientes!
Exclamaba emocionada Eli.

-Elicchi creo que te excediste un poco.
Se había acercado Nozomi.

-Ellas ya no son unas niñas Nozomi, ellas tendrán que dejar el nido una vez que crezcan, por eso es buena idea de vez en cuando dar un empujón.

You y Mari salieron al lugar que sus madres las habían mandado, un restaurante Italiano, que era dirigido por nada más ni nada menos que Maki y Nico.

-¡Oh ahí están!
Exclamo Nico.

Ambas chicas habían entrado a aquel restaurante que sus madres les habían recomendado, justo ahí dentro estaban ambas chicas esperando, sus citas, sus amores, las chicas que hacían que You y Mari suspiraran.

Se acercaron a la mesa de ambas chicas y comenzaron a hablar de cosas triviales como la escuela y el club en el que todas esas chicas estaban.

-¡¿A ustedes también las obligaron a venir aquí?!
Exclamo Riko.

-Digamos que nuestras madres son algo raras.

-Es curioso ya que mi madre y mi padre no se quejaron en cuanto les dije que me gustaba alguien.
Dijo Dia.

-Gustar alguien.
Pensó en voz alta Mari.

Mientras estas chicas disfrutaban su cena, se podía observar a Maki y a Nico hablando por teléfono acerca de la situación de You y Mari.

-Sí, si ellas están bien pero...
Nico observo a las chicas.

-Ellas son más lentas que Rin y Hanayo.
Hablo ella.

-Escucha bien Nicocchi, tienes que hacer nuestras hijas puedan tener éxito en esa cita planeada. Si no puedes hacerlo puedes estar segura de que te visitare.
Nico se exalto al escuchar esto y se cubrió los pechos con sus brazos.

Maki salió a tomar las órdenes de las chicas.

-¿Qué es lo que van a ordenar chicas?

-Yo quiero lasaña y algo de espagueti.
Hablo You.

-Yo quiero una malteada de chocolate.
Hablo Mari.

-Ok.

-Pero...
Se detuvo Mari.

-Pero...
Hablaron Dia y Maki al unísono.

-Quiero que tenga un popote con corazones (como el que sale en un capítulo de Love Live, el de Maki y Nico).

-Ok.

-Yo solo quiero café, hablo Riko.

-Yo quiero...
Dia no termino de hablar ya que Mari la había pateado.

-Iré a la cocina por sus pedidos.
Maki regreso a la cocina con Nico.

-¿¡Por qué me pateaste Mari-san!?

-Porque ya había pedido nuestra bebida Dia.
Dia solo se sonrojo debido a que sabía a qué se refería Mari.

Mientras tanto en la cocina...

-Mari pidió una malteada con popote de Corazón.
Hablo Maki.

-Esa niña es rápida.
Hablo sorprendida Nico.

La cena transcurrió con normalidad, al momento de irse del restaurante ocurrió algo que sorprendió a Maki y a Nico.

-Mari-san yo te amo.
Hablo Dia.

Mari sonrió ante la confesión de la pelinegra y solo se acercó a Dia para depositar un dulce beso en sus labios.

-Yo también.
Ambas chicas se retiraron del lugar dejando a You y a Riko.

-Yo también tengo algo que decirte Riko...
Riko interrumpió a You debido a que esta abrazo a You.

-Ya sabía para que era esta cena, yo también te amo You-chan.
Sin esperar ninguna objeción Riko beso a You.

Ambas chicas miraron a las dueñas del restaurante y se alejaron, no sin que antes Riko regresara a este por su abrigo y hablara con las dueñas del restaurante.

-Gracias a ambas y a las madres de You y Dia.
Maki y Nico se quedaron atónitas de saber que aquella chica sabía todo.

-Al menos ambos pares de chicas son felices las unas con las otras.
Hablo Nico quien entrelazo su mano con la de Maki.

-Ni que lo digas.

Fin.