Mi mamá escucho atentamente nuestra platica, le conté desde que lo vi en el camión, incluso mi mamá parecía tranquila ante todo esto lo cual me sorprende, Theo le cuenta lo que empezó a sentir por mí, aunque no le contamos nuestros momentos íntimos, aun mi corazón parece ir demasiado rápido y no sé qué decir, Theo es el que está tomando más iniciativa al hablar, y la mirada de mi madre cambia de furiosa a confusa, y luego a comprensiva.
Cuando terminamos de relatar suspira con fuerza.
-Bien... – Es lo primero que dice y lo tomo a mal.
Intercambio miradas tímidas y tristes con mi mamá y luego con Theo quien está igualmente triste.
-Que bien que me cuentas esto hijo – Dijo con toda serenidad, se levanta y se sienta a mi lado, me acaricia la mejilla y sonríe – Me alegro que me puedas contar esto –
-Mamá – Digo calmadamente – ¿No te sientes decepcionada? – Suelto de forma muy insegura.
- ¿Decepcionada?, ¿Por qué? –
-Por qué no soy un buen hijo -
-No, no eres un buen hijo, eres el mejor – Me acaricia el brazo y luego la mano – No te juzgare, eres lo que quieres ser –
- ¿No...te incomodo mamá? –
- ¿A quién le importa cómo me siento? – Nos mira a Theo y a mí – Lo que importa es como ustedes se sienten – Estira su otra mano y toma la de Theo – ¿Cómo se sienten? –
-Me siento... perdido – Miro mis piernas
-Asustado – Dice Theo
-Y... Feliz –
-Completo –
-Ya está – Levanto la vista y me encuentro con los ojos sonrientes de mi mamá – Por mí no te preocupes hijo, te apoyare en lo que quieras hacer o con quieras estar, y tu – Voltea a ver a Theo con la misma sonrisa – Si quieres estar con mi hijo estas bien recibido –
Mi mamá no parece evitar el impulso de abrazarnos, y lo hace.
La mano de Theo y la mía se encuentran en la espalda de mi mamá, y el aprieta con fuerza la mía; siento un claro calor emanando de lo que está sucediendo.
-Bien – Dice mi mamá cuando nos separamos – Voy a salir, la vecina me está pidiendo visitarla desde la semana pasada, y siento que es una buena oportunidad, y aparte podre dejarlos solos –
Mi mamá se levanta y se dirige hacia la mesa del comedor y toma sus lentes.
- ¿No quieres que te acompañe? –
-No – Dice mi mamá con tono indignado, pero con una sonrisa – No querrás dejar sólo al invitado – Se acerca a la puerta – Se cuidan – Y cierra la puerta; se escuchan su paso hasta que la puerta principal da indicios que ha salido.
-Wow – Dice Theo.
- ¿Qué pasa? –
-No sé a qué temías –
-Mira quien lo dice, tú también estabas temblando –
-No es cierto –
-Claro que sí, tenías las manos sudorosas –
-No es cierto –
-Pareces niño enojado –
- ¿Si? –
-Si –
Se cuerpo se mueve rápidamente y me abraza por la cintura y me da un beso en los labios, subo mis manos a sus hombros y lo beso igualmente, siento como todo es transmitido, la inseguridad, el dolor, pero también el amor.
ESTÁS LEYENDO
Sólo Una Oportunidad. [Completa]
Romance¿El amor puede ser correspondido? ¿Los momentos en el autobús pueden ser inolvidables? Johnny es un chico de diecisiete años, quien está a punto de terminar la preparatoria, y con deseos y sueños de seguir estudiando, llegará alguien que le c...