Capítulo 23.

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Me acurruco en la cama justo cuando el reloj anuncia las doce de la noche, hasta mi cuarto logro escuchar el respirar de mi madre, acaricio el borde del libro que tengo en las manos y me inclino a la izquierda para poder acomodar bien la lámpara para enfocar mejor hacía donde estoy leyendo.

Escucho el repicar del aire en mi ventana y el cantar delicado de los grillos que me incitan al sueño; siento como los parpados se me hacen pesados pero la lectura que tengo me mantiene tan concentrado que no puedo dejarlo y dormid.

Paso delicadamente las paginas cuando escucho un vibrar en mi celular, pongo el separador en la página y voy a revisar el teléfono. Una notificación de mensaje de Theo.


Theo:

Me parece que es demasiado tarde para que estés despierto.

Johnny:

Debería decirte lo mismo, y en especial cuando estas en el hogar de tus tíos.

Theo:

Pues para mí todavía es temprano. ¿Qué haces?

Johnny:

Estoy leyendo un libro, ¿Tu qué haces?

Theo:

Esperaba poder verte para contarte el poema, ¿Quieres escucharlo ahora?

Johnny:

¡¡Claro!!


No tengo que esperar demasiado, en cuanto le mande ese mensaje aparece su rostro y los dos botones, el verde y el rojo, rápidamente deslizo el verde y me encuentro nuevamente con su rostro alegre y radiante, por una esquina de la pantalla veo aun la cicatriz.

– ¿Cómo vas con eso? – Pregunto de forma casi indiferente señalando su mejilla.

– Va mejorando – Se la acaricia

– Me alegro –

Veo que el intenta evadir el tema igualmente de mi sien derecha; veo que esta vez no necesita rebuscar entre toda su habitación para encontrar la libreta.

– Ahora si podré decírtelo sin interrupciones – Una duda se forma en mi garganta, pero me la trago para después, se aclara la garganta y separa sus labios – Nuestra vida puede ser marca para siempre con tan sólo un momento, con una mirada, nuestros instantes de felicidad pudieron haberse acabado con la intervención de alguien que lo único que ha querido es arruinar la felicidad ajena; me has dejado experimentar el contacto de tu piel, poder rozar cada parte de esta y experimentar el amor verdadero – Se queda callado y lo miro detenidamente – Mis planes para mi futuro eran confusos, pero ahora son más claros que el cristal, quiero dormir en tus labios y que despiertes es mis brazos – Veo que vuelve a hablar per una voz le interrumpe.

– ¿Por qué tan romántico? – Escucho la familiar voz de su hermano.

– No te metas – Dice la voz de su hermana Taylor quien aparece en plano detrás de Theo – No vez que su cerebro al fin está funcionando para variar –

– ¿Me pueden dejar sólo? – Pregunta Theo claramente frustrado, aunque no lo demuestra con aquella sonrisa que cubre su rostro – Deberían de dormirse ya –

– Lo intentaba, hasta que escucho tu melosa voz a través de las paredes –

– Yo lo estaba, hasta que me despertaste – Dice Taylor golpeando en la espalda a Theo.

Sólo Una Oportunidad. [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora