Theo y yo somos los últimos que quedamos en la sala mientras Joseph y Taylor están sentados ya en la mesa, la mamá de Theo y mi mamá están en la cocina revisando los últimos aperitivos para la cena, el papá de Theo está en la cocina junto con ellas, pero he de dudar que también este cocinando.
– Y pensar que mañana regresare con mi familia a la casa – Dice un poco decepcionado.
– Pero no es una despedida para siempre – Digo mientras mi mano sigue aferrada a la suya.
– Lo sé, pero pasar tiempo sin ti siempre es difícil –
– Lo sé – Lo volteo a ver y me da un beso en los labios –
– Y pensar que mi hermano da más besos que yo – Ambos volteamos a ver a Joseph que parece estar muriéndose, pero por la expresión de Taylor ha de estar sobreactuando – Yo, cuatro años mayor que el... Y no tengo novia –
– Tal vez debes hacer lo mismo que Theo y conseguir un novio – Dice Taylor riéndose.
– ¡No! – Se levanta sobresaltado – ¡Yo no bateo chueco!, Sin ofenderlos chicos –
– No nos ofendes – Dice Theo sonriendo.
Theo se vuelve a acercar a mí y me da otro beso en los labios. Lo abrazo con fuerza de la cintura y el me abraza por los hombros.
– Unas cuantas horas y comenzare el año con mi persona favorita – Me dice Theo al oído.
– Y ¿Quién es esa persona? – Entrecierro los ojos y lo observo.
– Obviamente yo – Dice Joseph poniéndose en medio de nosotros.
– Bueno, pero si te intento besar a medianoche no te quejes – Le empuja el rostro y este se regresa a su asiento.
– ¿Pensabas besarme a medianoche? –
– ¿No quieres? –
– No, no se me antoja un beso tuyo – Digo con sarcasmo.
– Pues qué pena, tendrás muchos en la noche – Me acerca a él y me empieza a besar en el cuello, siento una combinación de euforia y vergüenza.
– Ustedes dos, no me dejan escuchar la tele – Dice Taylor con una voz serena pero potente.
– Pero si esta en comerciales –
– Prefiero escuchar los comerciales que sus cuchicheos de pareja –
– No decías eso cuando tu novio te besaba – Dice Joseph mirándola de reojo.
Dirijo la mirada a Taylor quien le hace un ademán a su hermano con el dedo y noto que en sus mejillas se aparecen unas pequeñas manchas de un rojo pastel. Veo que Theo esta tan sorprendido como yo y me vuelve a dar un beso en la mejilla, se inclina más en mí y su peso hace que me acueste más en el sofá.
– Cuando estoy así contigo creo escuchar campanas y la marcha nupcial – Me dice con una gran sonrisa.
– Cuando estoy contigo de esta forma siento como mis órganos se reprimen –
– ¿Por qué?... ¡Hay! – Retira su codo que estaba contra mi estómago y mis órganos parecen regresar a la normalidad.
– Tienes el codo muy afilado – Me sobo el estómago y con otra mano empiezo a acariciar su brazo.
– Tengo brazo largo – Dice sonriendo.
– Ya me di cuenta –
Vuelvo la vista a la televisión la cual están pasando noticias de la ciudad, no logro captar desde el principio, pero una parte de lo que comenta el reportero me llama la atención, parece estar en la fachada de un bar bastante excéntrico, con luces por todas partes, que hasta me lastiman los luego de un rato.
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Sólo Una Oportunidad. [Completa]
Romansa¿El amor puede ser correspondido? ¿Los momentos en el autobús pueden ser inolvidables? Johnny es un chico de diecisiete años, quien está a punto de terminar la preparatoria, y con deseos y sueños de seguir estudiando, llegará alguien que le c...