Solo es imposible si lo crées.

[Esta noche soñé con tu amor, y no pude evitar sonreír] Part. II

NARRA ____.
Mi hombro contra el suyo. Rozándose. Compartiendo partículas nuevamente.
Este hombre podía hacer que me estremezca de piés a cabeza, tan sólo con... rozarnos.

Íbamos de camino a el trabajo de Giuli. Preferimos que ella empezara a trabajar antes del lunes. El tema "money" nos tenía muy asustadas, y preocupadas. Queríamos terminar de una vez por todas, con las deudas del choque.
Mientras ella cumplía sus horas, yo seguiría en la gran búsqueda de un trabajo.

En nuestro apuro, sin querer, me choqué con un pibe. Me quise disculpar. La verdad, es que yo fuí la despistada. Pero cuando lo veo... Era quien menos me esperaba.
Encapuchado. Intentando ocultar su cara, y ese liso cabello. Sus ojos. Sus definidas fracciones. Este hombre se ponía más lindo segundo a segundo. Iba acompañado de sus hermanos. La realidad es que me colgué en sus ojos. En ese momento, yo entendí el infinito entre los dos. Esos ojos, me hicieron perdurar en el tiempo, hicieron que fueran los dos segundos más eternos de mi vida. Éramos solo el y yo. Los dos. O simplemente, éramos uno.

Sólo Patricio tenía el poder de causarme todas estas emociones. Juntas.

Increíble todo lo que puede pasar, con tan sólo, una mirada.

Después de eso, estuve todo el fucking día intentando revivir ese momento. Su dulce voz.

Dejé a mi amiga en su trabajo. Seguí repartiendo currículums por la zona, y me fuí a casa.

Llegué, y busqué mi viejo atril.

En mis tiempos libres, pintaba. También dibujaba. Era mi mejor método expresivo. Giuli solía decirme, que según los colores que utilizaba al pintar, era mi estado de ánimo. Los tonos fríos. Destacaban la tristeza. La melancolía. La antipatía. La repugnancia. El rechazo. El rencor. La hostilidad. El abísmo entre tenerlo todo, y no tener nada. Lo negativo. El odio.
Los tonos cálidos, por el contrario, la felicidad. El afecto. La admiración. La simpatía. La pasión. La caída libre hacia la positividad. El amor.

                     "No pude evitar,
                   ponerme a pensar.
          Que sería de tí en estos días"

Sin darme cuenta, estaba haciendo un retrato. Me dejé llevar por lo que mi pequeño corazón sentía. Sonreía al ver la pintura. Y nunca entendí el por qué, pero lo pinté a él. Intentando detallar profundamente cada una de sus imperfecciones, que lo hacen completamente perfecto. Sus ojos, por sobre todo. Existía una inmensidad en ellos. Reflejando una mirada fría, pero profunda. El secreto que esconden. El tesoro más preciado.

Mi debilidad. Mi talón de Aquiles, en un cuerpo ajeno.

Lo terminé. Era mi obra más sincera. Hecha desde lo espontáneo, pero real.

No podía dejar de pensar en el. Un mensaje interrumpe mis pensamientos.

Mensaje de Xxx.
Xxx- [Un gusto haber coincidido en esta vida señorita, pero la próxima, mida sus pasos]

Mensaje a Xxx.
____- [Disculpame. Quien sos?]

Mensaje de Xxx.
Xxx- [Quien sorpresivamente se topó con usted esta mañana. Buenas tardes, noches]

¿Era él?

Mensaje a Xxx.
____- [Ah, vos. Buenas. Puedo ayudarte en algo?] contesté sin aún estar segura de la identidad de ésta persona.

Mensaje de Xxx.
Patricio- [Si, quería que le pregunte a la señorita ___, si tiene un espacio disponible en su agenda. Quisiera invitarle un café, para conversar]
[Las mejores intenciones. Pero vió que ella va ocupada por la vida, chocando gente]

Sí. Era él. ¿Un café? Obvio que sí.

Mensaje a Xxx.
____- [Dice que está llena de turnos, la gente pide chocarse con ella. Jaja.]
[Un café? Estaría bien]

Mensaje de Xxx.
Patricio- [Paso por ella a las 16. Mañana]

Mensaje a Xxx.
____- [A esa hora está bien. Av. Florida 1789]

Mensaje de Xxx.
Patricio- [Vive cerca de mi casa, señorita. A las 16 estoy ahí]

Mensaje a Xxx.
____- [Hasta mañana entonces]

No lo podía creer. Un café con el.
En ese preciso momento, me olvidé de todo lo que estaba pasando a mi alrededor. Sentí que no era necesario respirar, para seguir con vida. Porque el me hacía sentir más viva que nunca. Me gustaría, que por lo menos, una sola vez, se mirara con los mismos ojos que lo veía yo.

"Mi razón de sonreír,
es que cada día, seas más felíz"

Me estaba enamorando, sin siquiera conocerlo. Estaba apostando por un amor imposible, no lo hacía menos real. Simplemente. Imposible.