El Barco.

Las tripas de Bobby, el oso.

"En el cole a principio de curso, siempre había niños nuevos. Los nuevos al principio siempre estaban tristes, por eso, la señorita Maica siempre decía que había que hacer que se sintieran como en casita. Les daban los libros y un babi como el nuestro. A los nuevos había que ponerles nuevos pupitres para que pudieran hacer los trabajos de manualidades y los deberes. Teníamos que enseñarle todo a los nuevos, donde enganchar la chaqueta, donde está el comedor y los baños. Por si querían hacer pipí o lo otro. Antes de la primera clase, los nuevos tenían que salir a la pizarra y decir su nombre, así los conocíamos y poco a poco empezaban a sonreír."

Los nuevos tripulantes se adecentan y preparan para comenzar su nueva andadura, se presentan a todos los tripulantes. Leonor, Dulce, Tom y Víctor. Después, todos van a la clase de supervivencia con Gamboa.

-¿Cómo es? –Pregunta Ainhoa por el walkie talkie que le ha dado Ulises mientras todos estaban sumergidos en la presentación de los nuevos.

-Verde, pequeñita, con cinco hojas, la más bonita que he visto en mi vida. –Le relata Ulises. -¿Te acuerdas de lo que haríamos cuando saliera el primer brote? Así que ahora tendremos que ser como las personas normales. Tendré que mandarte un SMS todas las mañanas diciéndote lo bonita que eres, te iria a buscar a la puerta del colegio con mi moto y te llevaría al cine.

-No nos pondríamos de acuerdo con la película. –Dice Ainhoa sonriente.

-A mi me da igual la película. Por que te estaría besando desde los trailers hasta los títulos de créditos, Ainhoa.

-Te pedí paciencia, Ulises. –Dice Ainhoa, cuando mira para arriba y se da cuenta de que Gamboa le ha pillado el walkie talkie.

-¿Con quién estaba hablando? –Dice Gamboa furioso.

-Estaba hablando con mi hermana, lo siento. –Dice Ainhoa y se va.

Si llega a durar unos minutos más, Ulises hubiese sido capaz de haberle contestado. Pero por el tono de voz con el que le ha escuchado a Ainhoa dirigirse a Gamboa, se da cuenta de que es un tono de miedo, así que le da por pensar, que quizás todo lo que les está pasando es por culpa de él.

-La clase ha terminado, pueden marcharse, por favor. –Dice Gamboa.

Julia sigue examinando a los nuevos.

-Muchas gracias, doctora. –Le dice Victor.

-¿Qué tal están?

-Algo desnutridos, pero hasta que no tenga los resultados no podré decirlo con exactitud.

-Bueno, pues ya me dirá lo que les pasa. –Dice Ricardo.

Leonor se encuentra en el camarote de Ricardo, viendo todo lo que tiene. Tocándolo. Cuando toca la urna donde están las cenizas de Marisa, algo le sucede. Tiene como una especie de visión que la aturde y tiene que sentarse.

-Tome esto, le sentará bien. –Dice Ricardo.

-Acabo de enterarme que la Tierra ha desaparecido. ¿No tiene algo un poco más fuerte? –Dice Leonor.

-Tenga. Puede que no le sirva de consuelo, pero, la Tierra ha desaparecido, pero no toda, sabemos que existe otra isla, puede que tardemos años en encontrarla, pero hay esperanza.

Piti está hablando con Vilma sobre su relación.

-He de decir, que nuestra relacion es un poco bizarra. –Dice Piti.

-¿Bizarra? ¿Pero porqué? –Pregunta Vilma.

-Pues porque sí, o sea me baño contigo en bolas sin tocarte un pelo, me declaro padre de tu hijo sin haber echado la cimiente y ahora me voy a vivir contigo al mismo camarote sin haber tenido una primera cita, pues bizarra.