Lo que queda del mundo.

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"Buque Estrella Polar, cuaderno de bitácora, hora solar, 6,30. Capitán, Ricardo Montero. Día 132 de travesía, tripulación, 19 alumnos, 19 marineros y 2 pasajeros. 40 tripulantes, 40 almas. Desconocidos hace unos meses, hoy convertidos en una auténtica familia. Gente con sueños, con ilusiones, deseos. Gente con frustraciones, con vacíos, con miedos. Gente desengañada, gente enamorada. Todos montados en el mismo cascaron, todos con un mismo rumbo. Con un mismo destino. Dia 132 de travesía, hora solar, 6,39 minutos de la mañana. Por fin, el Estrella Polar avista Tierra. "

Ricardo, se levanta como todos los días pronto, para prepararse su desayuno, sin todo el gentío, va a la cocina, coge el vaso que le hizo Valeria para la boda y se echa su café. Se dirige hacia cubierta y se queda mirando el horizonte durante unos minutos, para asegurarse, de que lo que está viendo el real.

-Capitán, si sale en pijama, se va a acatarrar. –Dice Burbuja.

El capitán, no contesta. Está ensimismado con lo que está viendo. Hasta que Burbuja, mira a la misma dirección, y ve lo que quería ver. Tierra. Sube despavorido en el palo mayor, y empieza a gritar.

-¡TIERRA! ¡TIERRA!

Salomé, Julián, todos lo empiezan a oír. Sonríen. Se colocan en las ventanas para asegurarse de que es verdad. Y sí, a lo lejos a unas pocas millas, se encuentra una isla, bastante grande. Todos ilusionados, todos, menos dos personas. Max y Gamboa. Que saben que no pueden llegar a Tierra antes que los demás. Y que seguramente, tengan problemas.

-Comprueben el estado de todas las tiendas de campañas. Linternas, bengalas, todo listo para el desembarque en 20 minutos. –Dice Ricardo.

-Ricardo, no me hagas esto. Que no. 20 años juntos y ahora me mandas a Tierra solo. Que yo soy de mar no de secano.

-A ver, Julián. Necesito a alguien que me haga de avanzadilla mientras que vamos a por los demás. Hay que empezar de cero. Tienes que ser el capitán en Tierra.

-Que no, que tú eres el capitán. Hazlo tú. Yo no voy a saberlo.

-Sabes que no puedo. El capitán es el último en abandonar el barco, recuérdalo. A demás, también va a bajar Salomé.

Algunos están en la cocina con Salomé.

-Bueno, vamos a ver. Los cubiertos los tenéis en el segundo cajón, los trapos de cocina a lavar. –Dice Salomé, dejando a todos las órdenes para que mientras que ella está en Tierra, su cocina siga en las mismas condiciones.

Por lo demás, todos están en el comedor preparando como les ha dicho el capitán la tienda de campaña.

-Vamos a ver, como estamos de celebración, he decidido hacer una porra. ¿A ver quien es el primero en echar un casquete en Tierra? –Dice Piti. –Vilma, tú y el chinorri vais en cabeza. Ainhoa, no te pongas celosa, que si quieres yo te ofrezco un revolcón.

-No vas a necesitar eso. –Le dice Max a Gamboa en su camarote. Mientras ve como guarda pistolas.

-Permíteme que no esté de acuerdo. No sabemos lo que podamos encontrar.

-Me refería a tu mochila de investigador. No vas a ir, te quedas en el barco.

-Salomé, no te preocupes,, que vamos a estar a menos de una milla. –Dice Palomares.

-Cuidar de Burbuja, y del capitán y Valeria. –Dice Salomé.

-¿Estás bien? –Dice Vilma a Ainhoa.

-Sí. No sé, es que llevo tanto tiempo pensando en pisar Tierra, que en todas las imágenes Ulises estaba a mi lado.

-Bueno, si te sirve de consuelo, en las mías estaba Piti. Y ahora pagaría para que le encerraran en el cuarto de las escobas. Te lo juro.

El Barco.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora