-No, no me puse a régimen, fui adelgazando sin proponérmelo -respondió, y su tono reflejaba que no entendía bien el porqué de la pregunta-. Estaba tan liada que me saltaba muchas comidas, y todavía me sigue pasando.
-¿Por qué?, ¿Por qué decidiste cambiar tan drásticamente?
Un repentino hormigueo le dijo a _______ que esa conversación no era inocente, un ponerse al día desde los viejos tiempos, sino que Justin la había conducido deliberadamente hasta ese punto. Él no podía saber la verdad, pero, en cualquier caso,
a ella no le importaba contársela. Levantó la vista hacia él.
-Al marcharte me dijiste que te llamara cuando fuera lo bastante mujer para ti. Casi me muero, quería morirme. Luego decidí recuperarte, convertirme en la mujer que tú querías, y me apunté a mil cursos y aprendí un montón de cosas, entre otras, a arreglármelas sin ti. Eso es todo.
-Todo no -dijo él sarcásticamente-. El bribón de tu marido ha reaparecido y empieza otro capítulo, y que sea tu jefe lo vuelve todo más interesante. Veamos -musitó-, ¿la empresa tiene alguna normativa que prohíba contratar a familiares?
-Si la tiene -respondió ella-, te recuerdo que yo estaba aquí antes.
-Pero yo soy el jefe -le recordó él con una sonrisa-. No tienes de qué preocuparte, cielo, no tengo intención de despedirte. Eres demasiado buena para dejar que te pases a la competencia -se puso de pie y ella también se levantó-. Siéntate, no
he terminado.
______ volvió a tomar asiento obedientemente y él rodeó el escritorio y se sentó en su silla. Tomó una carpeta mientras se recostaba en el respaldo.
Ella vio que era una ficha del departamento de personal y cayó en la cuenta de que debía ser la suya, pero no tenía ningún motivo para desear que Justin no la leyera, así que lo miró mientras la hojeaba.
-Tengo curiosidad por ver la solicitud que enviaste -dijo-. Dices que nadie sabe que estamos casados, entonces ¿qué pusiste en el epígrafe de «estado civil»? -preguntó-. Ah, aquí está. Muy sincera. Admites que estás casada y el apellido de tu
marido es... «Separada. Información confidencial».
-Te he dicho que no lo sabe nadie -replicó.
Él echó un vistazo a la solicitud y alzó bruscamente las cejas.
-¿«Pariente más cercano: Ninguno»? -leyó con voz enfadada-. ¿Y si te llega a pasar algo? Imagínate que mueres. Esas cosas pasan, lo sabes perfectamente. ¿Cómo iba a enterarme?
-No pensé que te importara, la verdad -se defendió ella-. En realidad, ni siquiera pensé en esa posibilidad, pero ahora me doy cuenta de que sí te interesaría. A lo mejor un día decides volver a casarte. Lo siento, no ha sido muy delicado por mi parte decir eso.
Una vena se hinchó en la sien izquierda de Justin y _______ lo miró, fascinada. Eso significaba que estaba furioso, como muy bien recordaba, pero no lograba imaginar el motivo de su enfado. Después de todo, no se había muerto, así que no había de qué preocuparse.
Él cerró la carpeta y la dejó de nuevo sobre la mesa. Sus labios formaban una línea muy fina.
-¡Volver a casarme! -exclamó de repente-. ¿Por qué iba a hacer semejante tontería? ¡Con una vez es más que suficiente!
-Desde luego -ella corroboró aquella afirmación con toda sinceridad.
Justin entrecerró los ojos y se obligó a dominar su genio.
-¿Es que no te gustaría volver a casarte?
-Un marido interferiría en mi trabajo -dijo, y meneó la cabeza-. No, prefiero vivir por mi cuenta.
-¿No tienes... eh... ningún amigo íntimo que proteste cuando te ausentas varios días, o varias semanas? -tanteó.
-Tengo muchos amigos, sí, pero la mayoría son de la profesión, así que entienden lo que es ir a cubrir una noticia -respondió con calma, sin decirle lo que él quería saber.
No era de su incumbencia si tenía amantes y, de repente, le pareció importante para su orgullo que Justin no se enterara de que era el único hombre con el que se había acostado. Al fin y al cabo, él no vivía precisamente como un monje. La imponente Coral Williams era la prueba fehaciente.
LINDAS COMENTEN Y VOTEN :( <3 DESDE AHORA NO SE IMAGINAN LL QUE VIENE :o JUSTIN UPS:x NO DIGO MAS ;)

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YA NO ME INTERESAS...
Fanfiction______ se preguntaba si Justin la reconocería después de siete años. Había perdido peso, se había vuelto más segura y había conseguido hacer carrera como reportera de una importante revista. Después de tanto tiempo, ¿reconocería Justin Bieber, el nu...