Hijo de la Luna |Alonso Villalpando| [FINALIZADA]

Capítulo 58 "Pisotón"

Dos días después.

Viernes de Luna Creciente

Narra Ailim.

Me levante súper rápido, me había quedado dormida, llegaría tarde a la primera clase, maldición, tenia que entregar una tarea, eso me pasa por quedarme hasta tarde viendo la tercera temporada de "Once Upon a Time" no lo vuelvo a hacer.

Agarre un pans cómodo, me hice una coleta, ni siquiera me maquille, tome mi mochila y salí disparada de mi cuarto. Al bajar mi abuelos estaban en la sala de estar leyendo el periódico del día.

— ¡Ailim! —exclamo mi abuela sorprendida — Creí que ya te habías ido desde hace una hora.

Negué, fui a la cocina tome una naranja la metí a mi mochila.

— ¡Me quede dormida, mi alarma no la escuche! — dije saliendo de la cocina — Me voy  — les di un beso en la mejilla a cada uno y corrí a la salida de mi casa.

Las calles ya estaban siendo concurridas, corrí lo mas rápido que mis pies podían, la gente se me quedaba viendo raro.

— ¡Vamos!, ¡vamos!, ¡vamos! — dije, estaba a menos de dos cuadras para llegar a la parada de autobuses.

Iba corriendo tan rápido que alguien se cruzo por mi camino ocasionando que cayera al piso de sentón.

— ¡Au! — Exclame, levante la vista y vi que quien se había cruzado era Alexander, me levante rápidamente y me sacudí la ropa.

— ¡Hola, Ailim! — dijo con una sonrisa que a mi parecer daba miedo.

— Alexander —dije mostrando una sonrisa fingida.

— Te he estado buscando. ¿donde te has metido? —  comentó groseramente.

— No creo que deba darte explicaciones de lo que hago —  dije molesta

Alexander me tomo del brazo derecho bruscamente haciendo que caminara junto con él, del lado contrario a la parada de autobuses.

— ¡Sueltame! — exclame tratando de zafarme de su agarre.

— ¡No!, tu y yo vamos a platicar — dijo el idiota.

Le di un pisotón, y este me soltó rápidamente.

— ¡Maldita perra! — grito, la gente giro a ver quien había dicho esas malas palabras, me eche a correr a la parada de autobuses por fortuna el autobús que tomaba estaba por irse, subí corriendo sin comprar boleto, de eso no me preocupaba, pagaría al bajar, tome un asiento y observe como Alexander venia corriendo hacia el autobús.

— Avanza, avanza por favor —  rogué en voz baja, el chofer cerro las puertas y avanzó dejando atrás a Alexander.

Solté un suspiro de alivio,  estúpido, nunca va a poder hablar conmigo, no lo quiero ni ver.

(...)

Al llegar a la universidad, entre rápidamente a la facultad, todos estaban en clase, los pasillos estaba solos, mire el reloj, 11:55 a.m. demonios ya había perdido dos clases, solo faltaban 5 minutos para que terminara esta, me senté en los escalones que se encontraban frente a mi salón, saque mi celular para enviarle un mensaje a Bryan para que me dijera si habían hecho algo importante.

Hola Bryan se me hizo tarde estoy afuera. Dime ¿han dejado algo de tarea? O ¿ya dijeron fechas para exámenes?

Ailim

Bryan me respondió rápidamente.

Con razón se me hizo raro que no llegarás, la maestra Jaqueline a dejado investigar unos conceptos ahorita que entres te digo cuales, en cuando a exámenes el profesor Rocha dijo que el próximo martes será.

Bryan

Solté un suspiro, estaba preocupada por mi trabajo que no había entregado, tal vez si hablo con la profesora me dejaría dárselo ahorita, decidí ir a su cubículo, en el tiempo que restaba para que la clase diera inició.

Me levante y subi los escalones, salude a las secretarías de la facultad y al llegar al cubículo de la profesora toque la puerta.

— ¡Adelante! — se escuchó la voz de la profesora.

— Buenos días profesora Andrea  — dije ya que aun no daban las 12:00.

— ¡Ailim, que sorpresa!, ¿por que faltaste a clase? — cuestiono — toma asiento — le hice caso.

— Se me hizo tarde, el autobús no pasaba — si mentí pero diganme ¿quien diría la verdad cuando te quedas dormido?

— Comprendo, no puedo quitarte la falta por que no traes justificante — habló, asentí.

— Lo se, solo quería saber si podría entregarle el trabajo que dejo — ella sonrió.

— Sabes que eso va encontra del reglamento — agache la cabeza — Pero te lo aceptaré solo por esta vez, solo por que eres una buena estudiante — levante la vista y sonreí.

— ¡Gracias! —busque las hojas del trabajo y se las di — aquí están.

La maestra las tomó.

— De acuerdo, Ailim —me levante del asiento.

— Bueno, ahora debo irme... Tengo clase — la profesora asintio.

— Claro que si, nos vemos la próxima clase — asentí.

— Hasta luego.

Sali del cubículo y corri escaleras abajo, los estudiantes ya estaban afuera, entre a mi aula y deje mis cosas en mi lugar.

— ¡Hola, Ailim! — me saludo Selene — creí que no vendrías.

— Como no — reí — me quede dormida.

— ¡Hay mujer! — comento Bryan con una sonrisa.

-Dalia