Da media vuelta y sale de la habitación. Aunque, ya hice planes, y tengo en mente salir un poco a dar la vuelta; según tengo entendido, irán los 3 amigos al arcade.
Estuve pensando en lo que pasó, las palabras de Joana fueron «quiero que seas feliz Rubius. Y puedes serlo. Te prometo que así será: serás muy feliz, siempre. Te ayudaré con ello, y estaré para ti eternamente. Estaré contigo siempre, a tu lado, a cada momento del día si me lo permites»
Ella me quiere. Y tal vez lo haga más de lo que puedo creer, sobre todo porque agregó un «pero no hoy». Claramente ella se refería a un pequeño tiempo entre ella y yo, como cuando esperas a que un plato de sopa hirviendo se enfríe un poco para poder disfrutarlo. Quizá ella dijo que le gustaba alguien más porque tiene miedo de algo con respecto a mí, y lo que quiso decir realmente no era eso, sino esto que pienso. ¿Pero y si no? Es por eso que debo ir a buscarle y asegurarme de que mi mente no juega conmigo.
Seré como su sombra; no me siento psicológicamente preparado como para hablarle en caso de que ella me vea. Antes de salir, me pongo una vieja sudadera negra que tenía guardada desde hace mucho y una gorra para cubrirme el cabello. La capucha de esta chamarra me va a ayudar a cubrir la mayor parte de mi rostro, por lo que será más fácil caminar entre la gente sin ser del todo reconocido.
Joana solía decirme que un rechazo limpio es siempre mejor que una falsa promesa.
(╥_╥)
Después de haberla seguido por casi toda la plaza, me doy cuenta de que no importa qué, ella siempre seguirá siendo hermosa. Viste su acostumbrada falda y sus plataformas, con una chamarra para cubrirla del frío que hace. Y su cabello, tan precioso y brillante como usual, hace que me desconcentre de lo que tengo que hacer.
Cuando se adentra en el arcade, voltea hacia atrás como buscando algo, por lo que me escondo detrás de un pilar que hay cerca. ¿Me vió ya? ¿Cómo? No. Eso es imposible. Me asomo ligeramente y me percato de que ha entrado al lugar ya, por lo que corro hacia ella. El lugar está invadido por chavales y tíos que sólo vienen a perder el tiempo, y al fondo a la derecha, en la barra de sodas, están aquellos que vienen a pasar un buen rato con amigos.
Desde aquí, Joana, Jamie y el resto de sus compañeros parecen estar pasando un buen rato. Aunque, no puedo decir lo mismo por parte de Alejandra; con esa mirada seria no sé realmente cómo se siente. Si me descubren, estaré en graves problemas.
Sea como sea, me acerco de manera discreta lo más que puedo hacia ellos; no quiero perder el mínimo detalle de lo que se habla, pero justo cuando tomo asiento en un lugar disponible, Joana se retira en dirección a los baños y los otros dos sujetos en dirección contraria, quedándose únicamente Jamie y Alejandra en la barra.
—Ale —escucho decir a Jamie—. ¿Are you Okay?
—Sí.
—Te noto rara desde que llegaste...
—No es nada. Es que tengo calor.
—¿Reconoces esto?
Volteo apenas un poco para percatarme de que le muestra algo a través de su móvil.
—¿De dónde sacaste eso? —da un sorbo a su botella de agua.
—Eso no importa —carraspea un poco la garganta—, ¿sabes quién lo hizo?
Ale se encoge de hombros a manera de respuesta. Puedo ver la mitad de la escena por mi capucha tapándome una porción de mi vista.
—¿Por qué debería saberlo?
—Tiene un profile en Deviantart —explica—. Conoces a muchos de ahí.
Se hace un silencio. ¿Hablan de los dibujos? ¿De la chica misteriosa? ¿La conoce? ¿Sabe algo de ella? Claramente el no haber obtenido respuesta significa una posible certeza.
—Quiero jugar —invita ella, poniéndose de pie—. Vamos.
¡La conoce! ¡Sabe quién es! Alejandra definitivamente sabe algo... ¿Pero qué? Tengo que hablar con ella. Aunque, después de lo que pasó en la mañana, tal vez quiera golpearme o algo peor cuando vea mi rostro.
Jamie comienza a caminar por delante de ella, por lo que aprovecho y corro hasta el pasillo que da a la salida trasera por el que ellos van a pasar, colándome por las máquinas de juegos para no ser visto. Me quedo quieto en las sombras, atento a que Jamie pueda pasar para poder hablar con Alejandra sobre los dibujos. Me pego lo más que puedo a la pared y justo cuando noto el pequeño cuerpo de mi amigo pasar, comienzo a susurrar.
—¡Pst! ¡Ale! ¡Ale! —alzo mi voz apenas un poco, desesperado—. ¡Alejandra!
Al ver que no voltea, saco mi mano y le tomo de la muñeca para jalarla hacia donde estoy yo. Su cuerpo da una especie de traspié pero como puede se mantiene en equilibrio y al principio, intenta golpearme.
—¡E-espera, soy Rubius! —grito, al tiempo que me cubro con mis brazos.
Sin dejar de sostener el puño en alto, me mira fastidiada con el ceño muy fruncido. Oh, por favor, que no me suelte un golpe.
—¿Qué quieres?
Sus ojos evidentemente muestran un claro sentimiento de odio y de querer matarme en estos instantes.
—Tu ayuda.
—¿Ahora sí? —deja caer el brazo a un lado de ella—. Tengo mejores cosas que hacer.
Da media vuelta y comienza a caminar de nuevo hacia las máquinas de juego. Espera, ¿qué?
—¡No! —grito desesperado.
Rápidamente hago una serie de movimientos que terminan aprisionándola contra la pared y mi brazo.
—E-espera —digo, mirándola a los ojos—. Sabes quién es ella, ¿no? La chica del dibujo.
Trato de examinarle el rostro, de intentar descifrar qué hay más allá de esa seria y fría mirada que me lanza.
—No —me aparta el brazo.
—¡A-ayúdame, por favor! —le tomo la muñeca y miro al suelo—. N-necesito saber... realmente quién es ella —sé a lo que quiere llegar—. Está bien, y-yo, lo siento. Por lo de la mañana.
Sabe que lo digo en serio. Poco a poco, suelto la manga de su suéter. Tal vez estoy equivocado y realmente Joana no quiso decir eso con sus palabras; quizá ella sólo... Sólo quería decirme que lo nuestro nunca iba a suceder, que no le merezco y que no... podré estar nunca con ella.
Estoy perdido. Sabía que esto de seguirla no tendría sentido y sería una pérdida de tiempo.
—Haré lo que pueda.
Volteo a verle en cuanto dice eso. ¿Qué?
—Pero hablaremos de esto luego.
Antes de que pueda agradecerle, da media vuelta y sale casi corriendo a alcanzar a Jamie. A pesar de que las máquinas le iluminaban el rostro con luces de colores, pude notar que sus mejillas estaba rojas...
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Peor Que Un Gato [Rubius Fanfic]
Fanfiction⚠️⚠️[NOVELA EN PROCESO DE REVISIONES/CORRECCIONES/EDICIONES]⚠️⚠️ Alejandra Melgar tiene muchas preguntas. ¿Por qué sus días son una rutina constante? ¿Cuándo pasará algo interesante? ¿Está conforme con su vida, o sólo ya no le importa? ¿Continúa hac...