Obsesión

1.1K 82 20
                                    

Desde pequeña fui criada para servir, mi Madre se preocupó de enseñarme todo lo necesario para que cumpliese con mis labores en toda la mansión de forma satisfactoria, pero a veces mis acciones terminaban en movimientos torpes que provocaban errores.

Mi Madre me enseñó que mi corazón no tenía que albergar rencores, al tener odio en nuestro interior nunca podremos ser felices, desde que tengo conciencia de mi misma he recibido de parte de ella ese cálido mensaje.

Me gusta mucho recorrer esta mansión, sus pasillos son largos con preciosas y finas alfombras en sus pisos. Hay diversos tipos de cuadros colgados en la pared con diferentes diseños, algunos muestran hermosos paisajes y otros dan a relucir extrañas formas, lo último al parecer lo llaman arte abstracto.

Mi Madre siempre me ha dicho que recorra la mansión ocultando mi cabello en una capucha, también me recalcó que no debo mirar a nadie a los ojos. Nosotros somos la servidumbre que se preocupa de atender las necesidades y caprichos de nuestros amos.

Hoy he tenido la oportunidad de cruzar mi camino con el líder de la "Familia Earl Lang", él es una persona distinguida, con buen porte, su presencia es abrumadora, hago caso de las enseñanzas de mi Madre y sólo atiendo a mirar el piso, pasados unos segundos realizó una leve reverencia delante de él. Él pasa al lado mío ignorándome y haciendo caso omiso de mi presencia, al parecer mi amo no se percato de mi presencia.

El líder de la "Familia Earl Lang" ha decidido que sea transferida a la mansión de su hijo menor llamado "David Earl Lang", no sé que lo ha llevado a tomar esa decisión, pero debo atenerme a lo que él me ordene. Mi Madre se puso muy triste al escuchar esta noticia, ella se acercó a mí y me dio un gran abrazo, las lágrimas brotaban de sus ojos incansablemente. Ella me dijo que fuese fuerte, que no me rindiese ante cualquier adversidad que se me presentase en mi camino. No tengo un buen presentimiento sobre mi traslado a ese lugar, en toda la mansión se rumorea que los tratos de "Sir David" a sus esclavos son muy abusivos y crueles.

La persona encargada de la servidumbre en la mansión de mi nuevo amo me presentó ante los ojos de "David Earl Lang", en esos instantes él se preocupaba de revisar unos papeles en su despacho personal y no prestó mucha atención a mi presentación.

Mis torpezas me han costado caro, he ensuciado la fina alfombra del despacho de "Sir David", por ello he sido castigada y enviada al calabozo de la mansión. Me siento despojada de mi dignidad, me han arrebatado todas mis ropas de sirvienta, ahora el amo ha decidido que use una camisola sucia y percudida de color café. El castigo no es suficiente, el amo pone grilletes de acero en las muñecas de mis manos, su proceso de torturarme está a punto de comenzar.

Latigazos con una fuerza desmedida caen sobre mi desprotegido cuerpo, golpes de puños en mi vientre hacen que pierda el aliento y no pueda respirar bien. Deseo que este cruel castigo dado por parte de mi amo termine pronto. Trato de estar consciente, pero el gran daño que tiene mi cuerpo hace que me pueda desmayar de un momento a otro.

De algún modo he podido sobrevivir a las primeras tandas de castigos. El amo inserta en mi boca una pastilla, hace que la tragué a la fuerza y me hace beber un poco de agua.

¿La sesión de castigos ha llegado a su fin?

No, estoy equivocada, mi real castigo está a punto de llegar ahora.

El amo ha rociado por la mayoría de mi cuerpo un ácido espeso que corroe la piel, el dolor ha sido insoportable, he terminado perdiendo el conocimiento al final del proceso de torturas.

En estos momentos siento que soy cargada por una persona mayor, casi todas sus vestimentas son café, el olor a humo en el ambiente es notorio, a lo lejos mis ojos pueden ver una gran llamarada que se consume en esta sombría noche.
La persona que me tiene en su poder ahora luce muy cansada, debe ser que ha caminado mucho tiempo cargándome en sus espaldas, él me dice que nos queda mucho camino aún por recorrer.

Sylvie, el regalo que siempre hemos añorado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora