Sylvie, el regalo que siempre hemos añorado.

Capricho

Un nuevo día se presentó para todos los integrantes de la "Familia Earl Lang", todos ellos habían pasado su primera noche en el gran hotel de la región "Elmecer".

Mero y Arian decidieron levantarse de la cama para emprender sus actividades diarias.
Los pensamientos de "Arian Earl Lang" se enfocaron en su primer objetivo. Ella deseaba persuadir a su hermana Anastasia de alguna manera para que ella comience a mostrar interés por William.

Ella tomó de la mano a su amado novio e hizo que ellos fuesen a bañarse juntos. Arian utilizo a su cuerpo como una suave esponja que rozaba por todo el cuerpo de su amado Mero. La pequeña señorita le dijo algunas palabras a su amado novio.

— ¿Te gusta lo suave de mi piel mi amado Mero? ¿Lo disfrutas? ¿Te estimula bastante?, ¿no es así?

— Esto es muy sensual de tu parte mi amada Arian. Me va a costar contenerme si sigues rozando tu suave trasero en mi cadera desnuda. No podré apaciguar mi creciente erección que está en proceso de alzarse inminentemente.

De forma impulsiva la pequeña señorita mencionó:

— No te controles Amor, no lo hagas, ¡hazme tuya!, ¡hazme tuya!, te necesito Amor. Entrégame toda tu pasión. Tú me perteneces completamente... ¡¿No es cierto?!

— Así es mi amada Arian, yo te pertenezco completamente.

Mero no pudo contenerse más, el sexy cuerpo de su novia no le permitía hacer eso, los ataques de seducción de su pequeña amada eran demasiado certeros, él hizo que Arian colocase sus brazos en alto mientras sus manos abiertas se apoyaban en una de las paredes de la ducha donde ambos se bañaban de pie. El suave y lindo trasero de la pequeña señorita quedó a la vista de un excitado Mero, este mostraba leves rastros de espuma de jabón en su contorno y el agua que se vertía de la regadera de la ducha lo mojaba sutilmente. La erección del falo de Mero era evidente y su excitación ya no se podía apaciguar. Él acercó su cadera hasta el redondeado trasero de su novia y con un embate certero logro ingresar totalmente en ella. La pequeña señorita dijo algunas palabras de forma muy sensual.

— ¡Ohhh!, ¡ohhh!, eres increíble Amor, estas llenando completamente mi interior en estos momentos, estoy disfrutando mucho esto, eres tan delicioso, eres tan varonil conmigo. Te amo tanto Amor.

Las manos de Mero se agarraron firmemente de la cadera de Arian. Los golpes de la cadera de él con el trasero de su novia eran intensos y sonoros. Después de sucesivos embates de lujuriosa pasión, Mero no aguantó más y llegó a su límite. El interior de Arian se lleno de todo el néctar de vida de él. La pequeña amante suspiro profundamente y de su boca se generó un gran suspiro que demostraba que ella también había logrado un excitante orgasmo. Ella volteó su cuerpo y comenzó a besar efusivamente a su novio. Mero y Arian habían establecido su intimidad mientras se duchaban hace algunos momentos.

La pareja de enamorados término de bañarse, salieron de la ducha y se dispusieron a secarse con unas suaves toallas. Después de algunos momentos se vistieron adecuadamente.

Mero y Arian ordenaron su habitación de forma adecuada. Ellos no quisieron que el servicio de mucamas del hotel se hiciera cargo del orden de su alcoba. Ambos enamorados se dispusieron a salir de este lugar, antes de ello, Mero le preguntó de forma curiosa a Arian.

— ¿No tomarás a tu gran oso de peluche mi amada Arian?, ayer no deseabas soltarlo por nada del mundo en todo el día.

— Por el día de hoy no deseo cargarlo mi amado Mero. Quiero que él sea el guardián de nuestra habitación por el momento.

Los pensamientos de "Arian Earl Lang" se pronunciaron en su mente.

— ¡Cielos!, ¡cielos!, ¡ya no soy una niña!, porque querría pasear al lado de mi amado Mero sosteniendo en mis brazos a un gran oso de peluche. Lo lamento Sylvie, el regalo que te hicieron recientemente me parece muy infantil para mí. Por suerte he creado una buena excusa para dejarlo en esta habitación.

Mero respondió de forma sorprendida y espontánea.

— Esta bien mi amada Arian, si tu deseas que sea de esa forma, será así.

Mero y Arian salieron de su habitación. Ellos tenían que dirigirse en camino a la gran cocina y comedor que estaba disponible en el hotel para poder desayunar con toda la "Familia Earl Lang". En el pasillo que daba a las afueras de las habitaciones, la pareja de enamorados se encontró en primer lugar con Anastasia, después se sumaron Alfred, Johnn, William, "Miss Abigail" y por último Mary. Todo el grupo se movió en conjunto a su destino.

Por su parte a Cristy le fue asignada la misión de guiar al cocinero Tomás hasta la cocina del gran hotel. "Miss Abigail" deseaba probar sus habilidades culinarias, sus hijos Johnn y Anastasia le habían dado muy buenos comentarios sobre los deliciosos dulces que él preparaba.
Cristy llegó hasta la habitación de Tomás y golpeó su puerta. Él la abrió al instante. Cristy lo saludó de forma cordial.

— Buenos días Tomás, me presentó ante ti, mi nombre es Cristy y soy una de las dos principales sirvientas que estaremos a cargo de la mansión de la señorita "Arian Earl Lang" en un futuro próximo. Por mi parte te doy la bienvenida personalmente a esta gran familia. Estaría agradecida que me acompañaras hasta una de las cocinas de este hotel. "Miss Abigail" desea que prepares deliciosos postres en la cocina de este gran hotel. De igual manera pienso que la señorita Anastasia como también la señorita Arian estarían contentas de que las sorprendieras con tus deliciosas recetas. Ellas pueden solicitar algunos dulces para que los prepares en estos momentos.

— Es un gusto conocerte Cristy. Te doy gracias por tu bienvenida. Espero que trabajemos de buena manera en favor de nuestra señorita "Arian Earl Lang". Las órdenes de "Miss Abigail" para mí son ley. Por favor indícame en que dirección debo ir para poder llegar hasta las cocinas de este hotel.

— Bueno Tomás, acompáñame por favor.

Todos los integrantes de la "Familia Earl Lang" llegaron hasta el comedor que estaba al lado de la cocina en el gran hotel. Todos ellos estaban sentados en lujosas sillas alrededor de una gran mesa de forma rectangular.
"Miss Abigail" se levantó de su silla y dijo:

— En estos momentos nuestro nuevo cocinero Tomás se encuentra en las dependencias de la cocina de este hotel. Me gustaría que cada uno de ustedes pidiese algún dulce en particular, deseo que él me muestre su versatilidad como repostero y pastelero. Favor háganle saber sus pedidos a Mary, ella se preocupará de mostrárselos a Tomás.

Cada integrante de la "Familia Earl Lang" se dispuso a realizar su propio pedido, Mary en sus manos tenía su propia libreta y un bolígrafo para anotar cada requerimiento.
"Arian Earl Lang" solicito unos sabrosos Hotcakes cubiertos con miel.
"Anastasia Earl Lang" solicito unos esponjosas crepas rellenas de crema con salsa de frutilla.
Esos fueron algunos de los pedidos de dulces de algunos integrantes de la "Familia Earl Lang".
Arian le pidió permiso a su madre "Miss Abigail" y le mencionó algunas palabras delante de todos.

— Tengo una propuesta que deseo hacer. Quiero que mi amado Mero y William ayuden con sus tareas de cocina a Tomás. Deseo que ellos cocinen el postre para mí y mi hermana Anastasia.

De forma curiosa "Sir Johnn" le mencionó algunas palabras a su pequeña hermanita.

— Ya veo, ya veo. Entiendo tu propuesta mi querida hermanita. Deseas que Mero preparé con ayuda de Tomás tus Hotcakes. Por su parte William deberá preparar las crepas rellenas con crema para Anastasia. ¿No es así o me equivocó?

Los pensamientos de "Arian Earl Lang" se pronunciaron en su mente.

— Mi hermano mayor Johnn se cree todo un sabelotodo, su actitud es muy irritante, debo calmarme, debo calmarme, Sylvie actuaria de forma cordial con él a pesar de todo.

Arian le respondió de forma cordial a su hermano Johnn.

— Tus palabras resumen de manera adecuada todas mis recientes intenciones desde mi discurso anterior querido hermano.

"Sir Johnn" levantó su tono de voz y enunció:

— ¡¡¡Están de acuerdo con las órdenes de mi hermanita pequeña, Mero y William!!!

Mero y William respondieron al unísono.

— ¡Estamos de acuerdo!, nosotros nos preocuparemos de ayudar a Tomás a preparar los dulces que ordenaron Arian y Anastasia.

Anastasiasintió un extraño sentimiento que empezaba a crecer en su tranquilo corazón, elentusiasmo y ánimo de William para poder cumplir con su capricho había provocadoesto. El leve plan que había llevado a cabo "Arian Earl Lang" seestaba desenvolviendo sutilmente.