Dependencia

730 56 58
                                    

Sylvie y William continuaban hablando en la habitación de Anastasia. La conversación entre ellos era amena y agradable. William de improviso atendió a mencionar palabras sobre el paso del tiempo, esto no fue la decisión más adecuada para el momento actual, ya que Sylvie comenzó a sentir una gran angustia en su corazón por la ausencia de amado novio.

— Señorita Arian el tiempo pasa rápidamente ya han transcurrido veinte minutos desde nuestra reciente conversación.

Sylvie contesto de forma preocupada y asustada.

— ¡¿Ya han pasado 20 minutos?! ¡¡¡No me había percatado de eso!!!

— ¿Está bien? ¿Señorita Arian? ¡¿Se encuentra bien?!

De los ojos de Sylvie comenzaron a salir algunas lágrimas, la posición de su cuerpo tomó un estado defensivo. Sus manos apretaban los muslos de sus piernas por encima de su vestido. Ella comenzó a hablar tristemente mientras lloraba.

— ¡¿Dónde está?! ¡¿Dónde está?! ¡¿Dónde está mi amado Mero?! Te extraño mucho Cariño. ¡¿Por qué no has regresado aún?!

Ante la actitud sorpresiva e inesperada de Sylvie, William solo atendió a entregarle un pañuelo a la preocupada chica para que lograse secar sus lágrimas.

Sylvie le agradeció con una débil sonrisa.

— Gracias William eres muy amable. Lo lamento, no puedo controlar mis emociones, extraño mucho a mi amado Mero.

— No se preocupe señorita Arian, pero por favor este tranquila. Mero volverá pronto.

Los pensamientos de "William" se pronunciaron en su mente.

— La señorita Arian es totalmente dependiente de Mero como me comentó Johnn en una de nuestras pláticas anteriores. Su devoción hacia él es excesiva. No deseo ni pensar que monstruo interior puede despertar en ella si le sucede algo a Mero. Debo hablar personalmente con Mero y explicarle lo peligrosa que puede ser esta actitud de ella a futuro.

A pesar de las palabras de ánimo de William, la actitud de Sylvie no cambiaba, sino que aumentaba la intensidad de su pena y llanto. Ante este hecho desfavorable William decidió salir personalmente a buscar a Mero, antes que pudiese concretar dicha acción. El esperado novio de Sylvie llegó hasta la habitación de Anastasia.

La vista de la pequeña señorita se ilumino y sus lágrimas comenzaron lentamente a desvanecerse en su rostro, ella levantó su cuerpo desde el sillón donde estaba sentada y corrió al lado de su amado. Mero apuro el curso de sus acciones y colocó de forma rápida la bandeja que transportaba en la mesa de centro disponible en la habitación. Sylvie le brindó un gran abrazo a su amado novio, ella se arrimó fuertemente al brazo derecho de Mero y le mencionó algunas palabras.

— ¡¡¡Te demoraste mucho Cariño!!! No permitiré que me dejes sola nuevamente... ¡¿Bueno?!

— Esta bien Sylvie, estaré pegadito a tu lado y no nos separaremos de ahora en adelante.
Por cierto Mary nos preparo dos vasos con jugo para nosotros, que te parece si lo disfrutamos mientras William come el pedido que ordeno.

— Bueno Cariño, quiero beber este jugo al lado de mi amado novio.

Los pensamientos de "Mero" se pronunciaron en su mente.

— Me preocupa demasiado esta excesiva dependencia de mi amada señorita, pero este hecho es un pequeño avance, ella antes no podía estar más de diez minutos separada de mi, ahora viendo el reloj han pasado veinte minutos desde que fui hasta la cocina-comedor a buscar el pedido de William.

¡¿Debería hablar sobre esto con los hermanos mayores de Sylvie?!

Los pensamientos de "Sylvie" se pronunciaron en su mente.

Sylvie, el regalo que siempre hemos añorado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora