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Jueves temprano en la mañana Jongin tuvo que volver a la oficina, por andar con su cabeza en las nubes se le había acumulado demasiado trabajo y papeleo que debía achicar si quería pasar un buen fin de semana en la playa como le había prometido a Kyungsoo.

Kyungsoo despidió a Jongin con un largo beso en donde miles de mariposas Bailaron, no quería dejarlo ir, pero debía hacerlo ¿No? El deber mandaba.

Suelta un suspiro viendo el auto de su esposo alejarse y mira hacia el filo de la escalera donde un pequeño perrito sollozaba por el miedo abajar. Con una sonrisa en su rostro subió escalón por escalón hasta llegar con la pequeña bolita peluda y tomar en sus brazos.

—Debes tener Hambre— Dice Kyungsoo acariciando su cabecita y ganando algunas lamidas.

—Eres muy tierno, ¿Como pudo alguien dejarte abandonado?—Baja las escaleras y entra a la cocina. —Prepararé algo de leche para ti porque todavía eres un Bebé y luego iremos a comprar todo lo que necesites y al veterinario.

Kyungsoo ríe negando porque hablaba con un pequeño perrito que apenas cabía en su mano que ahora curioseaba en la cocina. En cierta forma Jongin le había acertado en traerlo, ahora no estaba tan solo cuando él se iba al trabajo.

—¿Que nombre te podríamos poner?—Piensa Kyungsoo algunas ideas pero ninguna es la correcta.

Cuando Kyungsoo le deja la leche ya tibia en un platito al perrito esta tímidamente la olfatea y luego da pequeñas lamidas, provocando la sonrisa de corazón en Kyungsoo.

El sonido del celular de Kyungsoo lo saca de ver tan tierna imagen y camina hacia la mesa en donde sonaba, viendo el identificador de llamadas contesta.

—Hola Junmyeon Hyung—. Dice con una sonrisa Kyungsoo.

—Kyungsoo cariño, ¿Como estas?—Habla Junmyeon siempre alegre.

—Ahora muy bien, gracias Hyung. ¿Tu como has estado?

— Yo estupendo cariño, quería invitarte a almorzar conmigo, Jongdae tiene turno en el hospital y mamá se fue a una junta con sus amigas. ¡Me han abandonado!— Dramatiza haciendo leves gemiditos de dolor.

—Entonces estaré ahí contigo, pero iré con compañía...tengo un nuevo compañero que no puedo dejar solito. — Sonríe Kyungsoo mirando al pequeño perrito que aun bebía de su leche.

—¿Compañero?

—Jongin se ha encontrado un perrito en la calle y lo ha traído— Responde.

—¡Perfecto! Así puede jugar con Ashter.

—!Estas loco! Lo podría aplastar — Exclama horrorizado Kyungsoo, Asther es un gran perro San Bernardo.

La risa de Junmyeon se escucha a través del teléfono. — Solo decía mi querido Kyungsoo.

Kyungsoo verifica la hora en su reloj y ya faltaba poco para las diez de la mañana.

—A las doce estaré por allá ¿Si? Tenemos algo que charlar Hyung.

—perfecto, entonces te espero. Adiós cariño.

La llamada es cortada y Kyungsoo niega con su cabeza riendo. — Junmyeon es un loquillo. Mira que tu jugaras con Ashter.

El perrito lo mira ladeando su cabecita y luego caminando a sus pies siendo alzado por Kyungsoo que lo acomoda en sus brazos.

—vamos de paseo perrito.

Kyungsoo sube primero hacia su cuarto y deja al pequeño cachorrito sobre la cama quien de inmediato se acurruca como una bolita peluda.

El bajito se viste con algo sencillo pero elegante, con su color favorito -El negro- y en media hora ya estaba listo sentado en el auto con la bolita peluda sentada en el asiento de copiloto nuevamente acurrucada para dormir.

¿Pareja Perfecta? ~Kaisoo~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora