Para Andrew
25-10-2017
Hola amor, probablemente te encuentres confundido en este momento ¿me casé? ¿Por qué con tu hermano? ¿No te amo? Ninguna de esas interrogantes son ciertas.
Tomás te ama demasiado al igual que yo, no es una traición la que cometemos, es un plan desesperado por salvar a nuestro bebé, cuando me enteré de esta noticia deseé que estuvieras conmigo pero no fue posible, él no se siente feliz por esto.
Ambos hemos sido amigos durante este tiempo y quisiera no haberlo metido en esto pero con papá intentando que aborte no hubo otra alternativa, quiero que sepas que ha sido un ángel, una excelente persona como tú lo dijiste y ahora aquí estamos, a punto de cambiar nuestras vidas con una boda, una reversible por supuesto, en cuanto podamos acabaremos con esto amor así que no te preocupes.
Te amo
Att: la chica de a lado que siempre va a amarte con todo su corazón.
— ¿Estás lista Car? —mi amigo me indica que el momento había llegado, hoy todo cambiaría para los dos, hoy nos convertiremos en esposos.
—Lo estoy Tom —doblé la pequeña hoja de papel y la escondí en mi bolsillo.
—Pues vamos, acabemos con esto de una vez, antes de que tengamos al señor Velmort instalado en nuestra puerta pidiendo explicaciones.
— ¿Irás así? No te has cambiado —la ropa que traía era la misma con la que salió de casa esta mañana, en mi defensa yo no tenía otra que usar.
—Y perderme la oportunidad de casarme en ropa informal ¡jamás! —dijo fingiendo emoción—. ¿Sabes? Esto es extraño, toda mi vida huyendo del matrimonio y al fin alguien consiguió ponerme los grilletes.
— ¿Nunca pensaste en casarte?
—No, tuve muchas mujeres en vida, ninguna seria claro está, cuando empezaban a fantasear con una boda no tardaba en terminar con ellas —la forma en la que lo dijo me dejó estupefacta, por lo visto la fama que tenía de ser un playboy arrogante y cruel tenía algo de verdad, no creo que sea los dos últimos pero frente a mí todo este tiempo había tenido a un mujeriego.
—Deberían darme un premio entonces —contesté sin importancia siguiéndole el juego.
—Tal vez, pero no deberías compararte con ellas.
La nana de Tom había llegado para indicarnos que ya era tarde y que se molestaría si no salíamos ahora, es más, casi nos arrastra ambos.
El dinero ayudó a arreglar muchos detalles sueltos, el Juez registró en el acta de matrimonio la fecha de ayer para que nuestra historia fuera más creíble.
Y aquí estamos, poniendo nuestras firmas, fingiendo felicidad, con nuestros atuendos de pena, con un sentimiento de culpa en el estómago.
—Los felicito señor y señora Velmort, legalmente son una pareja casada -el señor frente a nosotros era ya bastante mayor, su cabello blanquecino lo confirmaba y con una sonrisa y palabras de emoción finalizó con todo... Me había casado con otro hombre.
Al llegar al edificio nos excusamos con nuestros amigos y les contamos que con el hermano de Tomás en el hospital no era el mejor momento para festejar y ellos entendieron.
Fuimos en completo silencio todo el camino hasta el departamento y una vez dentro fue él quien habló.
—Tengo una idea, hagamos un contrato matrimonial nosotros también, no uno abusivo sino uno que nos ayude a sobrellevar la situación y que nuestra convivencia no sea incómoda —ahora entendía la razón del silencio que hasta ahora había mantenido.
—Está bien —contesté aún no muy convencida.
—Primero, cada uno dormirá en cuartos separados, así no será incómodo para ti.
—No tienes otro cuarto —dije no muy convencida.
—De hecho si lo tengo, hay dos más pero como estaban llenos de cajas no los tomaba en cuenta, el punto es que mientras estábamos en el registro civil les pedí a los empleados que los desocuparan y limpiaran para ti.
— ¿Y a dónde fueron las cajas?
—Unas a donación y las que eran importantes están en la bodega del edificio, me las cuidarán hasta que encuentre un mejor lugar para guardarlas —su voz era de indiferencia, despojarse de sus cosas y compartir su casa no parecía importarle.
—Ahora no tenemos que pelear por la cama, eso es bueno ¿verdad? —dije en broma para alivianar el ambiente.
—Sí, es muy bueno, podrás decorar tu habitación como gustes hasta que mi sobrino o sobrina nazca y bueno los procesos siguientes los trataremos en su momento —tomó una agenda de la mesa pequeña que se encontraba en el centro de la sala y sacó un bolígrafo de su bolsillo.
— De acuerdo, yo propongo que seamos un matrimonio para relaciones sociales y amigos aquí en la confianza y seguridad de nuestro hogar —mi sinceridad había hablado por mí de forma abrupta.
—Buena idea pero aumento la condición que se cumpla con todos los deberes y derechos que tiene un matrimonio excepto dormir juntos claro.
— ¿Todos los derechos? —de acuerdo, eso sonaba tan mal que aunque lo estimaba podría darle un golpe bien merecido.
—Defendernos si hace falta, con garras y dientes para hacerlo más explícito y acompañarnos si tenemos que asistir a algo importante —al inicio me costaba comprender lo que decía pero en cuando acabó supe que era para guardar apariencias.
—Quieres decir cumplir los deberes de esposos para guardar las apariencias en tu trabajo.
—No por esa razón, Cariba somos una bomba de tiempo que puede explotar en cualquier momento por la fragilidad de la situación en la que nos mentimos —exclamó cansado con un toque de frustración, de acuerdo no estaba cooperando para hacerle fácil manejar todo.
—Así lo haré, Tom, prometo defenderte como tú lo hiciste conmigo y apoyarte, si te hice enojar lo lamento, por ahora paremos aquí ambos tuvimos un día agotador, buenas noches —me despedí cortante y fui a mi habitación, quería hacerlo con un abrazo pero ¡demonios! Estamos casados, ya no somos simples amigos.
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Hola
Otro capítulo largo para ustedes con mucho cariño desde el fondo de mi corazón.
¡Suerte en lo que estén haciendo!
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Para Andrew [En Edición]
Short StoryCariba y Andrew son vecinos, ambos con sentimientos entre sí, un día una inesperada carta da inicio a su historia de amor y decenas de ellas son testigos del cariño que se profesan. Juntos tendrán que enfrentar muchos obstáculos para ser felices pe...