Para Andrew [En Edición]

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No quería recordar nada más, tenía demasiado en la mente como para preocuparme en lo que había hecho, Matt tenía razón, no podía darle mi lugar a otra persona pero también era difícil para mí, me he besado con Andrew lo sé, quizá estoy siendo injusta con los dos pero he tratado de frenar cualquier cosa que se tornaba más seria, de hecho ni siquiera he podido responderle con el mismo romanticismo a Andy pero pensar que Tomás ha tocado a otra mujer de verdad me lastima. ¿A caso no tengo el derecho a sentirme hecha pedazos?

Dejé el tema ahí, era muy pronto para pensar una solución, dormí lo que pude hasta que mi hijo me despertó, los siguientes días transcurrieron de forma normal, ignoraba a Tomás tanto como podía y como no pensaba volver a mi antigua rutina me dediqué a investigar algunos Jardines que quedan cerca para que a Ocean pudiera asistir, no era bueno que perdiera clases y de cierto modo habíamos alargado nuestra estancia aquí y con su padre despierto no tenía el corazón de alejarlos.

—Te agradezco que me permitas acompañarte, Car —Ciel, lucía muy emocionada.

—Quería matar dos pájaros de un tiro —no puedo evitar reír por mi propio comentario.

—¿Disculpa? —puedo ver la confusión en sus ojos, no me extraña, es un defecto mío expresarme mediante refranes.

—Quería pasar contigo y de paso aprovechar y buscarle un nuevo Jardín a mi hijo —este día sería solo de las dos, tarde de chicas, no había podido compartir mucho con ella y a pesar de todo, era mi hermana y me gustaba esa idea.

—No te imaginas cuánto esperé por esto —tomó mi mano y empiezo a correr como si no hubiera un mañana hacia una feria de atracciones que estaba cerca, me dejé llevar por su alegría y la seguí, estaba emocionada, hace tiempo que no visitaba una de estas.

Tomás

Cariba no me llamaba, no quería forzarla a hablarme pero la incertidumbre no me dejaba trabajar, a petición de la compañía me presenté a desarrollar mis actividades cotidianas en este lugar, había olvidado lo que se sentía estar bajo las órdenes de alguien pero eso no me incomodaba, lo hacía el hecho de no recibir una palabra aunque fuera insulto de su parte, sólo sabía que seguía viva porque Arly me lo había contado, ella también estaba distante últimamente, era obvio que lo sabía, entre amigas se cuentan todo.

Alex ya no quería avisarme nada porque su prometida le había pedido que guardara el secreto y aunque me daba pequeñas pistas no quería meterse en problemas, tampoco quería ocasionarle alguno ya suficiente tenía con el que hizo que Ethan no me hablara, no respondía mis mensajes tampoco, Matt era más importante de lo que había imaginado.

Sabía que mi ¿esposa? No estaba seguro de seguirla llamando así, después de lo que hice no me sorprendería que me llegaran los papeles dem divorcio, en fin, Car buscaba un nuevo Jardín para nuestro hijo, era obvio que no pensaba regresar y por el momento tampoco quería irme y dejarla sola.

Tenía frente a mí columnas enteras de papeles que debía revisar como Presidente de Velmort - Ikhenny Association pero mi mente estaba en otro lado, necesitaba a mi esposa, necesitaba con una urgencia que me asustaba despertar a su lado y contemplarla como si fuese un delicado lirio hasta que ella por fin abriera los ojos.

-Hermanito, siempre tan aburrido como siempre -Andrew había llegado y no sé cuánto había me visto divagar pero su sonrisa de incredulidad decía mucho.

-Es porque tengo mucho trabajo por hacer -respondí restándole importancia.

-Tenías la sonrisa de un enamorado, dime ¿ha llegado la adecuada ya? O es que esa niña pálida de tus sueños sigue haciéndote despertar por las noches -se estaba acercando bastante, las dos eran correctas, estaba completamente enamorado de su novia, de mi esposa y despertaba al menos ocho veces en la madrugada sintiéndome solo.

-Algo así ¿por qué has venido? -necesitaba cambiar de tema o terminaría soltando la verdad que hasta ahora era un arma de doble filo.

-Quería que me lleves a un parque de diversiones que llegó a la ciudad ayer -se sentó en una de las sillas giratorias y jugaba como un niño, nunca podría enojarme con él, lo quería demasiado.

-De acuerdo, de todos modos no iba a acabar de revisar todo esto aquí -cerré todas las carpetas que tenía desplegadas sobre el escritorio y pedí que me las enviaran a casa ya que no podía dormir sería bueno matar el tiempo trabajando.

Conduje hasta el lugar, era un parque abierto, como un espacio verde en medio de rascacielos, todos jugaban y reían, había estudiantes, familias y parejas de enamorados, una vez más pensé que era un maravilloso lugar para estar con Car, nunca habíamos ido a uno de estos, creo que saltarnos el noviazgo y pasar directo al matrimonio fue un factor decisivo que nos cortó muchos escenarios románticos, también lo eran el que Andrew estaba en coma y nadie quería disfrutar, además no se podía dejar de lado el hecho de que Ocean venía en camino.

Desentonaba por completo, tenía este aburrido traje mientras que todos traían ropa cómoda para divertirse, simplemente no dejaba de pensar en todo de forma seria hasta que mi corazón dio un pequeño vuelco de alegría, mi preciosa princesa caminaba distraída a unos metros de nosotros, por más irreal que pareciera esto, era como ver doble, estaba acompañada de su hermana y de este modo se podía apreciar mejor lo similares que eran, obviamente reconocía a mi esposa, tenía muchos factores para identificarla pero además podría reconocer esa mirada en medio de una multitud.

-¿Qué hacen dos hermosas señoritas en este lugar tan solas? -mi hermano trataba de sonar seductor y eso me hacía gracia, no hacía falta forzarlo tanto, bueno yo no lo hacía de ese modo, me golpeé mentalmente por las estupideces que pensaba y me mantuve en silencio, callando todo lo que deseaba decirle, al menos las palabras porque nuestros ojos decían cientos de cosas.

-Venimos a conquistar hombres -me gustó la respuesta de Ciel, ella me caía bien, después de todo, evitó que me estrellara en el asfalto ese día y podía notar que siempre tenía respuestas divertidas a todo.

-Que graciosa, aprovechando que estamos entre hermanos juguemos en parejas -la idea que proponía Andrew no era mala, sabía que iba a ser difícil estar con Cariba pero quería hablar con ella.

-Es una buena idea, para hacerlo justo, juguemos piedra, papel y tijera, el ganador de los hombres y la que pierda de ustedes dos -sabía la respuesta del versus con Andrew.
¿Pero y de las chicas?

-Eres malo en este juego - añadió Ciel.

-Por eso espero que Cariba gane.

El juego se realizó y como lo predijo la hermana de mi Car, gané, siempre le había ganado en todos los tipos de juegos así que no me asustaba el resultado, las muchachas empezaron a jugar y con cada empate mi corazón amenazaba con salirse de mi pecho, finalmente se decidió, Cariba había perdido, Andrew no se enojó, al contrario, lucía tranquilo, después de todo no me veía como competencia.

-Que mal, será para la próxima bebé-se despidió de "su novia" con un beso en la frente y tomó a Ciel de la mano para llevarla a una atracción que se veía peligrosa-. Vámonos cuñadita, La Catapulta nos espera.

Los dos se marcharon con gran emoción mientras nosotros permanecíamos inmóviles, como si acabaran de presentarnos, como dos jóvenes inexpertos en una cita arreglada, su mirada me pedía que la abrazara pero su expresión me decía que me fuera, luchando contra cualquier pronóstico me acerqué a ella.

-¿A dónde quieres ir? -pregunté con una sonrisa triste.

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¡HEY MELONES!

¿Cómo han estado? Me desaparecí, lo sé pero estaba en un bloqueo y pensé seriamente poner en pausa la historia, por el momento se ha arreglado pero no puedo decir nada a futuro.

Espero les guste 👻 ❤️

Discúlpenme el retraso, por favor 🙏

Las quiero

Millows fuera 👻👀....