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Todo el viaje se había cuestionado acerca de estar tomando una decisión inteligente, una parte de él lo maldecía, probablemente después de esto alguno de los tres terminaría en problemas y todo por pensar con la cabeza caliente.

Volaron toda la madrugada, las muchachas los encontrarían ahí, era uno de sus lugares favoritos en el mundo pero como Cariba odiaba el calor no había podido traerla a disfrutar de este paraje.

Se reprimió, no era momento de pensar en ella, esta vez se había puesto de meta divertirse por todos esos años de matrimonio devoto en los cuáles dedicó su esmero total.

Los tres amigos brindaron con sus vasos de whisky por la amistad tan larga que juntos habían consolidado, sin duda era lo mejor que había hecho, se ponían como prioridad ante una relación y esa había sido la clave para mantenerse unidos, jamás peleaban por alguien, era absurdo, nadie valía lo suficiente para arruinar una amistad de más de una década.

Al bajar del avión, Ethan había invitado a Yant a hospedarse con ellos en el Hotel, argumentando que el viaje fue largo y debía relajarse, además como él debía esperar a que Tomás le diera ganas de irse que mejor que aprovechar y vacacionar con todos los gastos pagados por cuenta de la pandilla Playboy

Era un lugar magnífico, lo había apreciado desde el aire, la arena de la playa era blanca y el hipnotizante mar de un color turquesa, brillaban con el sol en un total equilibrio, simplemente me había cautivado a primera vista y todo hubiese seguido así hasta que a Alex se le escapó que El Atlantis Hotel era un Resort Familiar, a escondidas tomé un folleto de actividades y había tantas cosas para disfrutar con Ocean, había parques acuáticos que a el probablemente le habría encantado.

-¿Me quieres decir por qué cambiamos de lugar? El hotel de Alex era mejor para esconderme -en mi voz podía notarse la frustración, no quería pagarle todo esto a Lowe cuando lo hubiese aprovechado mejor con mi familia.

-Te equivocas, Arly podía hallarnos más rápido y a ninguno nos espera nada bueno si eso pasa -admitía que Alex tenía razón, un lugar conocido por nuestros padres arruinaría todo.

-Dale una oportunidad Tomás, vamos a pasar una semana aquí y enserio quiero muchas actividades con las cuáles divertirme -mis amigos hacían esto por mí así que debía quitar mi rostro de enojo.

-De acuerdo pero que conste que Lowe y Nia se hospedarán por separado -algo de sentido común había vuelto a mí, no iba a compartir habitación con una mujer.

-Claro, los seis nos hospedarnos en habitaciones separadas pero con una sala común ¿me explico? -Ethan tenía todo bajo control como siempre, pésimo defecto -. Otra cosa, no debiste invitar a mi prima, Lowe enserio cambió mucho, ya no es la chica buena que conociste, ahora disfruta manipular a los hombres de su alrededor y te agradece ese pequeño detalle a ti.

-¿Enserio cambió tanto? Para mí sigue siendo la chica dulce que conocí.

-Es una manipuladora -siguió Yant -. ¿Quién crees que dañó mi relación con Ethan? -soltó una pequeña risa con una mezcla de resignación y resentimiento.

-Genial Tomás, por lo visto no voy a ser el único que la pasará huyendo de una psicópata -dijo Alex disfrutando en la situación que me había metido.

-Eso lo veremos -respondí cortando con el tema porque nuestras "amigas" había llegado.

-¿Listos para divertirnos a lo grande? -preguntó una muy entusiasta Nia.

-Tanto que lloraré -podía jurar que enserio a Alex sólo le faltaba llorar al verla otra vez.

Fuimos juntos hasta la enorme sala que comunicaba todas las habitaciones, respire profundamente mentalizando una vez más las consecuencias de lo que podía hacer, un mensaje había entrado a mi celular.

Para Andrew [En Edición] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora