LAS LLAVES

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Amber.

Buscando con impaciencia las llaves en mi bolso escucho unos pasos que se acercan. Antes de que pueda levantar la cabeza la voz gruesa de Cole me atraviesa.

- Hola amiga!

- Hola...no soy tu amiga ok y deja de perseguirme.

- Tranquila solo quiero ayudar, de lejos te vez mal por no decir que paranoica buscando algo en tu bolso. Y por último no estoy persiguiendo a nadie, vivo al lado y solo trata de ser un buen vecino.

Asimilando la nueva noticia de que Cole es mi vecino. Me doy cuenta de que tiene sentido que viva al lado de la casa de mi tía, Taylor es mi vecino deduzco que Cole se queda con él.

- Gracias por ser... " buen" vecino, pero no hay problema. Además ¿por qué crees que debes ser un buen vecino? No sabes si vivo aquí.

- Es lógico Amber. Si fuera casa de un amigo estarías esperando a alguien no buscando algo en tu bolso.

Me quedo callada no sé qué contestar.

- Ok tu ganas, adivinaste. Si vivo aquí.

- Lo sabía y ahora dime que buscas?

- Mis llaves.-Respondo cortante y sin mirarlo.

- Llegan pronto tus padres?

- No vivo con ellos.

- Quien más tiene llave?

No me pregunto porque no vivía con ellos ni con quien vivía, solo fue discreto y debo admitir que me gustó que no preguntara...fue educado.

- Mi tía, pero llega hasta después de las 8 de la noche.

- Mierda...mmm oye...

Mirándolo veo la duda en sus ojos que no había percibido antes.

- No te gustaría pasar a mi casa...bueno a la casa de Taylor, me quedaría contigo, pero aquí hace frio son comienzos de otoño, aunque bueno...es California.

- Te agradezco Cole, pero iré donde Carmen.

- ¿Tu amiga con la que me miras en receso?

- No te miraba...ok. Solo fue un cruce miradas.

- Pues yo si te miraba. Y no me avergüenzo como tú de admitirlo. Eres una buena vista Amber y más cuando eres una contestona.

- Por un momento pensé que dejarías de ser un patán Cole.

- No soy patán por decir la verdad. Mejor dime si aceptas mi oferta de la fiesta.

- No tengo llaves y tengo que recoger de la guardería a mi primo pequeño. No puedo.

- Ok...te llevo donde Carmen?

- No, gracias.

- Eres demasiado cabezota Amber.

- Tu muy perseverante.

- Solo decente.

- Adiós Cole.

- Adiós.

***

Al llegar a casa de Carmen me abre la puerta su madre.

- ¿Hola Amber, no pensé verte hoy por aquí...trabajos el primer día?

- No señora Hernández, perdí mis llaves y esperare aquí hasta la hora que sale Jack de la guardería y para esa hora supongo que mi tía estará en camino.

- Siéntete como en tu casa, Carmen está arriba ya sabes el camino.

Antes de terminar de subir las escaleras Carmen me lleva a su cuarto casi arrancando mi brazo al llegar a su habitación cierra.

- Debes contarme todo sobre Cole.

- Como sabes sobre él?

- Me pregunto por ti en clase de física, dijo que necesitaba terminar una discusión.

- Me invito a una fiesta.- Digo con aburrimiento.

- QUE! Y le dijiste que si obviamente.

- Claro que no, Carmen. Tengo a Jack y no quiero problemas a demás no hay nada de interesante.

- Eso no decías hace un año con Javi.

Javi es mi ex novio el que me rompió el corazón y ni se molestó en despedazar los pedazos cuando lo encontré en la cama con Kendal. No le conté nada Carmen. Demasiada humillación.

- Fue una recaída por extrañar a mis padres. Ya no necesito de fiestas para eso.- Lo digo en forma de escusa.

- Eres a la única que Cole le ha hablado y tú te tomas el derecho de rechazarlo como si nada.

- Le explique porque no podía ir.

- En el auditorio?

- No...

- ¿No?

- Cuando estaba buscando las llaves de mi casa... él se bajó de la camioneta de Taylor y...

- EL VIVE CON Cole!

- Si

- Es el destino. Debes ir a esa fiesta.

- No puedo, primero está Jack. Cole solo está molestando soy su distracción para hacer su vida entretenida y subir su ego.

- No lo creo, te apuesto a que la invitación de la fiesta no es fastidiar.

No conteste su comentario y encendí la televisión.

CUANDO MENOS TE LO ESPERÉS   Donde viven las historias. Descúbrelo ahora