Cuando Las Hojas Caen (EDITANDO)

5

Y ahí estabamos los dos, lo oiaba y lo amaba, lo aborrecía y adoraba, lo que habíamos vivido durante 15 años no se olvidaba de la noche a la mañana.
Estaba ahí parada, frente a él, queriéndo gritar su traición, pero las palabras no me salían, me temblaba el labio y las piernas, finalmente me rendí y me fui a mi habitación, me siguió como una sombra, en silencio y fiel.
-no me sigas, déjame sola -dije cuando entró justo de tras de mi a la inmaculada y elegante habitación
-¿donde estabas? -preguntó preocupado
-en el gimnasio -respondí pedante- ¿que te paso en la cara?
-perdí los estribos con un idiota que se me atravesó en el camino -dijo apretando los dientes
-y ¿desde cuando vas por la vida golpeando a la gente solo porque se te cruzó? -Derek no era una persona que se lanzará sin un argumento a los golpes, pero cuando lo hacía tenía una poderosa y justificada razón para hacer -pero el no sabía tirar puñetazos
-Jade, cosa por favor, hablemos
-¿que carajos pretendes? Ahora quieres ser el padre de familia, recuperar el tiempo perdido, ¿pues adivina que? Ese jamás regresa
-lo se Jade, pero no quiero perder un minuto más sin estar con ustedes, la vida pasa en un segundo, pero no es tarde y no todo está perdido
-me cansé de ti Derek, me cansé de esperarte, de que tuvieras tiempo, de que entrenes con Drew y que fueras a sus juegos, que estuvieras conmigo en cada cita de Regina, y que prometieras cosas que nunca cumpliste -las lágrimas me quemaban y un enorme nudo en la garganta me sofocó- no puedo seguir a tu lado, quiero que te vallas de la casa -su ojos casi se desorbitan
-¿que? pero ¿por qué?
-ya no quiero estar contigo
-Jade, se que he cometido muchos errores, pero intento cambiar, no me hagas esto, no me apartes de mi familia
-tú te apartaste solo
-no me voy a ir Jade... No Sin haberlo intentado todo
-no te vas, está bien, me voy yo
-ya Jade, dime de una puta vez que te pasa, ¿por que me tratas así? -me sarandeó por los hombros- dímelo, ahora mismo
-me lastimas -susurré- sueltame Derek -su ojos estaban perdidos
-Lo... Lo siento Jade. Estoy desesperado, intento hacer algo y tu simplemente te cierras -se pasó las manos por el pelo- perdóname, no he sido el mejor, pero todo lo que he hecho ha sido por ti, me diste una vida, un sueño tu eres mi musa y sin ti ya no soy nada
-vete Derek, sal de mi casa y de mi vida -hubo un largo silencio, el buscaba mis ojos, pero yo ya no era capaz de verle
-¿es tu última palabra?
-si -tragué con dificultad, me costó millones decirlo
-bien...sólo te pido una semana para poder comprar un departamento o algo.

Luego de dos días, la relación entre Derek y yo iba en picada, el intentaba acercarse pero yo lo rechazaba, si intentaba hablarme simplemente lo ignoraba, si quería tocarme me alejaba de él, como si el tocarme me quemara la piel, pero aun así mis obligaciones de esposa no las dejaba a un lado.
Esa mañana preparé el desayuno -como todos los días- pero ese día no desayuné con ellos, subí y me metí a la ducha y me arreglé un poco mas de lo normal.
-¿a donde vas? -me preguntó Derek con la boca abierta cuando bajé
-por mi madre al aeropuerto
-te acompaño
-no. Gracias -lo paré en seco- necesito estar con ella a solas un par de horas
-papi, podemos jugar video juegos -preguntó Reggie ordenada por su hermano, sabía que papá no le negaba nada a ella
-si princesa vallan -los dos salieron corriendo a la sala de estar
-Jade puedo invitarte a salir esta noche
-no, no puedes
-a comer ¿tal vez?
-¿por que golpeaste a Enrique? -se quedó frío ante mi pregunta
-¿Enrique? Así que se llama Enrique
-si, así se llama ¿por que lo hiciste?
-porque te desea, no soporto que alguien más te mire con deseo
-vete a la mierda Derek... Y nunca más me vuelvas a espiar -salí de la casa echa una furia ¿como se atreve a celarme?

Conduje por la carretera como alma que lleva el diablo, metiéndome entre los coches, arrebasando con rapidez, la furia y la adrenalina la lleva al tope, en ese momento, nada me importó.

-mamá -la abrace y lloré en sus brazos como cuando era pequeña- que bueno ya estas aquí
-tranquila corazón, calmate -respiré profundo y asentí.