29

247 20 2
                                    

La salud mental siempre se ve afectada por trastornos, la limerencia es una de lo trastornos por lo que todos hemos pasado al menos una vez en vida.
Es un estado mental involuntario, propio de la atracción romántica por parte de una persona hacia otra y siente una necesidad compulsiva de ser correspondido. 

Drerek

Antes

1997:
Mi carrera matutina no me ha quitado la ansiedad, ni siquiera un poco. Cada día exagero con las millas intentando canalizar la depresión, ansidad y todo los malos pensamientos que me atormentan. Pero nada de esto ayuda.

Tengo que dejar de ser un cretino con las mujeres, sin embargo, este es el único antido que encuentro para todo el veneno que me cargo.
Estoy tan podrido.

Hay mucho movimiento en la univerdiad, los chicos de primer año comienzan a instalarse en los dormitorios del campus, lo que significa nuevas chicas y por ende, carne fresca.

Miro a lo lejos, la mayoría son niños ricos que no se preocupan por nada y envidio eso. Deseo estar en su lugar, porbar las deliciosas comodidades, y obtenerlo todo con el chasquido de mis dedos, más tengo que aceptar lo que soy, pero no acepto quedarme ahí, seré un buen cirujano, el mejor. Me inclinaré por la nuerologia.

Mi cuerpo se sacude y en mis oídos retumba el agudo ruido del claxon del camaro 77 de Ryan.

—házte a un lado perdedor —se mofa de mi. Me exacerba esa palabra.

Maldito engreído.
Lo asesino con la mirada.
Pero la furia se disipa cuando veo a un ser angelical que va a su lado.
Aunque fue fugaz pude notar lo hermosa que es.

Se dirige al campus, estoy tentado a seguirlo. Mi cerebro dice -no... alejate- pero mi corazón dice que me arriesgue.
Gran parte de las veces obedezco a mi cerebro, ya que es el mas sensato, pero esta vez algo mas pedoreso vence la cordura.

Me escabullo entre los árboles y me acerco lo más que puedo.
Ryan desciende del camaro y camina al maletero y saca equipaje de este, es demasido y no parece de hombre.
El corazón me da un vuelco al ver descender al hermoso ángel de cabello castaño y piel nacar, desde esta distancia no aprecio muy bien sus facciones, pero no dudo que es hermosa. Estoy boquiabierto. Es la cosa mas linda que jamás he visto. La cosa más bella. 

Sacudo la cabeza para volver en si, no me tengo permitido soñar tan alto. Tengo que tener los pies bien puestos en la tierra.
Además, una chica como ella no se fijaría en un perdedor como yo y menos si tiene como novio al ken del equipo de fútbol. Es como competir contra Sansón.

...

Las clases inician en un par de días, prefiero repasar las lecciones para olvidarme.

—¡aaarrrg! —grito arrojando el libro contra la pared.

¿que me pasa? Solo es una chica más ¿por que no dejo de pensar en ella?
Cojo mi chaqueta y salgo con paso enérgico en busca de alguna chica y canalizar mis bajas pasiones.

Me gusta el sexo duro, follar baja mis niveles de lujuria y excitación es la única forma en la que me relajo, es como mi droga.

Hoy he traído a una exhunerante morena de piel canela, le he atado las manos, claro bajo su concentimiento y la follo como un animal mientras azoto su culo, nuca había hecho esto, pero ella me lo pidió y la experiencia ha sido de las gratificante, sinigual. Sin embargo la follo con rudeza pensando en aquella chica. La cual nuca podré tener.

Cuando Las Hojas Caen  (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora