Extra: Jace

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Incluso si hubiera sabido todo antes de tiempo, incluso si sólo fueras a quedarte por otros seis meses o seis semanas o seis días, no haría nada de forma diferente. Porque no me enamoré de ti de nuevo. Nunca dejé de amarte.
(River Jaymes)

* * *

[Extra: Jace]

Aquel primer día...cuando Magnus fue obligado por Catarina -¿y Tessa?- a salir de su cama e ir por un café.

-Alexander -el nombre, susurrado como un lamento, como desde hace un siglo, había salido de Magnus. Sus ojos llenos de lágrimas mientras el teléfono sonaba.

Hacia días que Jace y Rafa se habían dado cuenta que Alec y Magnus estaban demasiado cerca...pero no se encontraban. Porque Alec no volvería a ver a Magnus, tendría que reconocerlo de otra manera. Y porque Magnus nunca salía de su loft.

-Pero no hay nada que pueda hacerse.

Rafa se había rendido, obedeciendo las reglas, pero no Jace. ¿Qué Herondale ponía primero las leyes que a sus seres queridos?

Él había bajado, observando las rutinas de Alec, y luego había hablado con Tessa. Había visto aquellos ojos abrirse sorprendidos y felices.

Alec había renacido y estaba más cerca de Magnus de lo que él creía.

-Vamos a darle una ayuda al destino y es precisamente cerca del Destino donde volverán a encontrarse.

Jace y Tessa lo habían planeado y el día acordado ella había llamado a Catarina. Lo único que le dijo fue: -Haz que salga hoy. Por un café.

Y eso había hecho Cat.

<<Levántate, ponte mucho brillo y sal a iluminar al mundo con tu presencia... Ve al menos por un café... Y no empieces, sé que el café, y prácticamente todo, te recuerda al chico Lightwood, pero tienes que seguir...>>

Aquel fue el primer momento en que la vieja canción había sonado:

Bendita la luz de tu mirada desde el alma...

Miradas. Iba a ser importante el reconocimiento de esta nueva mirada en Alec.

Magnus había aceptado y después volvió a la cama. Jace lo había estado viendo y, cuando dos llamadas de Catarina no sirvieron, hizo que Tessa llamara.

-Hay un lugar nuevo -había dicho ella-. Destino. Ve allí, compra un café y no volveré a molestarte en unos días.

Aquella canción no dejó de escucharse durante todo el camino. Como un presagio.

Bendito el lugar y el motivo de estar ahí. Bendita la coincidencia. Bendito el reloj que nos puso puntual ahí. Bendita sea tu presencia. Bendito dios por encontrarnos en el camino y de quitarme esta soledad de mi destino...

Un café y ya, se decía Magnus, después vuelvo a la cama.

Ya casi para entrar al Destino, un leve empujón lo hizo mirar al otro lado de la calle.

"Se escuchan historias de amor gratis".

La canción sonaba. Y Magnus rió cuando una voz pareció decirle: -¿Por qué no?

¿Por qué no?, se repitió Magnus, nada pierdo. Y cruzó la calle, dejando al ángel rubio observando de este lado la escena.

Benditos ojos que me esquivaban. Simulaban desdén que me ignoraba. Y, de repente, sostienes la mirada...

Y entonces había sucedido. El tiempo se detuvo. Los ojos azules de Alec, aquellos que ya no podían verlo, pero de algún modo lo sentían, se cruzaron un par de segundos con los de Magnus.

Era él. Era increíble, pero era él.

-Hola -era su voz.

Y Jace sólo espero el dificultoso "Hola" de Magnus para irse.

Tessa ya se enteraría pronto y él tenía un castigo que recibir en el cielo y a un sobrino feliz que ver.

Su trabajo estaba hecho.

Ellos tendrían su segunda oportunidad.



CONTINUARÁ...

gracias a quien lea ❤
Hasta el siguiente con el día 34!

he visto comentarios por ahí 😂 si en algún momento quieren saber de qué libro son mis frases o los pdf, pueden decirme!

Y hoy actualizo El favorito y Aprendiendo juntos 🙌

Tu corazón me siente (malec)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora