Tu corazón me siente (malec)

Día 48 (final)

Yo no soy para ti una huella en la arena que se borra entre olas de un mar que no espera. Tampoco soy un minuto en tu tiempo, que no tenga futuro, diluido en lo eterno.

Ya está marcado mi cuerpo en tu cuerpo, mi nombre en tus labios con fuego.

Voy a ser parte de tu historia hasta el final, yo no me iré jamás, mi amor es inmortal. No hay despedidas cuando se ama de verdad, yo no me iré jamás, pues si la muerte es el olvido, entre nosotros eso no sucederá... 🎶

* * *

[Día 48 final]

"Querido Alexander:

Esto es un dejavu. Aquella vez, mientras estaba sin ti, y me daba cuenta que sin ti puedo, pero no quiero vivir, decidí darte todo de mí, mi pasado incluido.

En esta ocasión, estás en mi vida mientras lo escribo y espero que sigas en ella cuando lo leas, mi verdad. No es la misma que hace más de un siglo, porque ambos hemos cambiado.

Te amo, no puede comenzar de otro modo, te amé y te amo ahora, como eres, por lo que eres, quien eres.

Imagina, como las muchas historias de mi Historia que te conté, a un brujo. Un brujo que había vivido siglos y había amado y sido amado, buenos amores, malos amores, simplemente amores, con sus lágrimas y risas.

Este brujo se dijo que nunca le pasaría como a otros, no iba a petrificarse, a dejar de sentir, a dejar de maravillarse por el mundo, por la vida. Pero es más fácil decirlo que hacerlo. Los años, los siglos, pasan, y tal vez sí, mueres en vida. La inmortalidad no es el mejor regalo, es uno difícil.

Entonces un día conoció a este cazador de sombras. Inocente, inexperto, pero fuerte y valiente, que sobrevivió a un ataque de demonio, que me pidió una cita. ¿Qué tan difícil debió ser para él, alguien que todavía no terminaba de aceptarse y entenderse, pedirme una cita a mí, un brujo, un subterráneo, con no la mejor reputación?

Agradezco haberlo conocido. Él, con su vitalidad, su ropa vieja y rota, con sus colores oscuros, iluminó y alegró mi vida que parecía ya suficientemente brillante, pero no lo era.

No puedo decir que antes de él no amé. Un buen amigo dijo una vez que "Hay más formas de amar que estrellas en el cielo", y es cierto, aunque él fue mi gran amor, antes de él también hubo amor, aunque diferente, hubo personas que nunca olvidaré.

Él me regresó a la vida, me hizo volver a vivir, me enseñó a amar y a luchar por el amor. Y él luchó conmigo, cada día, durante toda su vida.

Es difícil ser inmortal y amar a un mortal, saber que un día se irá, al menos físicamente, aunque nunca del corazón y de los recuerdos. Yo, tal vez egoísta, habría querido que él quisiera ser inmortal, buscar la forma de estar conmigo siempre. Pero no fue así, mi valiente cazador era más fuerte que yo, siempre lo fue. Él aceptó nuestro destino, que yo iba a seguir aunque lo amaría siempre. Y no digo que sea más fácil para él, ¿qué tanto debe doler dejar a quien amas?

Él me dio dos hijos, los mejores que pude tener. Y la mejor familia, aunque no todos lo consideraran así. ¿Un brujo padre de un cazador de sombras y un cazador de sombras padre de un brujo? Fuimos a lo grande, rompiendo cada regla.

Ahora tal vez te preguntes ¿por qué te hablo de mi pasado con Alexander si quiero recuperarte? ¿y por qué, si tú ya sabes la verdad, sigo hablando como si fueran dos personas diferentes?

Porque creo que lo son. Y porque yo te hablé siempre de "Gideon" como si fuera un tercero, un recuerdo, uno siempre presente en mi corazón, y no como si fueras tú, porque así lo creo. Tal vez sí, él es parte de ti o tú eres parte de él, es complicado -no sólo para ti-, pero son dos personas diferentes.

En tiempo y espacio es diferente. Y no sólo tú, yo también. Un siglo pasó. Y ahora entiendo que él no quisiera ser inmortal, pero nuestro amor lo es, tal vez no de un modo convencional, y esto lo ha complicado todo, pero lo somos, somos inmortales juntos.

Te amé, te amo, y te amaré incluso cuando ya no estés. Incluso si no quisieras volver conmigo, o si no hubieras renacido, te seguiría amando. Pero ahora tengo la oportunidad de amarte a ti, al mundano que decidió escuchar mi historia sin saber quién era yo.

Yo sólo quiero que seas feliz, no necesito que veas, que hables, que escuches, nada de eso haría la diferencia para mí. Te amo y te acepto como eres. Y me enamoro de cada detalle nuevo de ti, de este tú, de mi presente contigo. A veces agradezco que no pudiras verme, que no forzara tus recuerdos, pero que tu corazón me sienta, que pueda sentirme, y que me ame de nuevo como yo lo hago contigo.

Todo cambia, ¿cierto? La vida, el mundo, las cosas, las personas, los sentimientos... Todo se transforma. Creo que el amor no es la excepción.

Creo que estamos teniendo la oportunidad de conocernos de nuevo y demostrar que el amor, aunque cambia, no muere. El verdadero amor no.

No sé si he explicado mi punto o no. Yo amé a mi cazador, y te amo hoy a ti, Alexander. Diferente, no más, no menos, sólo diferente. Te amo a ti, no por los recuerdos, porque yo sé -y creo que tú también- que él y tú no son el mismo. Te amo por la persona maravillosa que eres ahora. Amo como tus ojos se iluminan incluso si no me ven, como tus mejillas se sonrojan cuando te digo que eres hermoso, como tus labios se curvan en una sonrisa antes y después de un beso, como tus manos se aferran a mí y me recorren con más fuerza y delicadeza que una mirada, como me ves con caricias, amo como me quitas el aliento con tus besos, como me conoces incluso si no me reconoces. Amo tu risa. Amo cómo, con un abrazo, intentas protegerme del mundo. Amo que me amas, al hombre que conociste en esta vida, y no por los recuerdos.

Quiero hacerte dos preguntas. No tienes que responderme, o incluso a ti. Sólo quiero que lo pienses:

1. ¿Por qué crees que volviste a la vida?

2. Y, si fuera al revés, si se invirtieran los papeles, ¿crees que podrías estar conmigo sólo por los recuerdos? ¿No crees que sería una tortura más grande estar con alguien que sólo te recuerda a tu pasado, pero que ya no es tuyo, que ya no es eso que tuviste?

¿Sabes por qué no eres una tortura para mí sino un milagro? Porque yo no estoy contigo buscando revivir el pasado, no sufro cada día abriendo la herida al tenerte pero, a la vez, no. Yo estoy contigo para amarte de nuevo, para amarte otra vez, para que me ames hoy, para aprender juntos cada día y luchar por el amor real.

Y eso somos. Yo sé que lo sientes".

Alec comenzó leyendo en voz alta, aferrando el teléfono en su mano, sosteniéndolo contra su pecho cuando sentía que ya no podía, escuchando la fuerte respiración de Magnus al otro lado, y fue así hasta que llegado a uno de los últimos párrafos, aquel donde Magnus mencionaba lo que amaba de él, sus lágrimas se cayeron sin control, y su voz se rompió.

Entonces Magnus, con los ojos cerrados y las mejillas húmedas, con voz ronca, salida a empujones a través del nudo en su garganta, las repitió de memoria.

Lágrimas resbalaron por las mejillas de ambos. Lágrimas mojaron aquel cuaderno. Lágrimas mojaron la cama de Magnus. Dedos aferraron los teléfonos, corazones deseando sentirse cerca en un abrazo y no en una llamada silenciosa.

Magnus separó sus labios, la palabra "¿Alexander?" lista, pero el sonido de la llamada terminada se le adelantó.

* * *

Déjame ser una ruta de estrellas y llevarte a mi espacio, bailar abrazados. Soy esa línea de amor en tu mano, soy el destino que Dios te ha dictado.

Ya está marcado mi cuerpo en tu cuerpo, mi nombre en tus labios con fuego.

Voy a ser parte de tu historia hasta el final. Yo no me iré jamás, mi amor es inmortal. No hay despedidas cuando se ama de verdad, yo no me iré jamás, pues si la muerte es el olvido, entre nosotros eso no sucederá...

Si mi corazón se para, se quedará mi alma mirando con tu mirada. Pues si la muerte es el olvido, entre nosotros eso no sucederá... 🎶

* * *

💔😭 me está matando escribir esta parte de la historia

La canción es Inmortal de Gloria Trevi 💔❤