Día 56

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—Esto es un sueño. El sueño más hermoso y maravilloso que he tenido.
—No. Este es el comienzo de la eternidad. Y si vienes (conmigo), te mostraré el resto del camino.
(E.Frank)

* * *

[Día 56]

POV MAGNUS

Al día siguiente, Alexander sigue en casa.

Se siente tan bien decirlo. En casa.

Y es realmente eso, nuestra casa, nuestro hogar, nuestra familia completa de nuevo.

No puedo evitar la sonrisa que tira de mis labios al mirar a mi hermoso ojiazul comer. Algo tan –qué palabra, justo en esta vida– mundano como mirarlo tomar un trozo de fruta y llevárselo a los labios me tiene hechizado, tan fascinado.

Mi estómago se llena de mariposas y me siento un joven enamoradizo de nuevo. Mi piel se eriza sólo con que sus manos me rocen, incluso accidentalmente, el más mínimo roce me tiene estremeciéndome como alguien que nunca hubiera sido tocado. Me estoy muriendo de amor, soy inmortal, pero muero –y vivo– de amor cada día con Alexander.

Su ceño se fruncé. Su mano se detiene a medio camino, atrayendo mi atención, regresándome a la realidad. Ladea un poco la cabeza y sus mejillas pasan de ese pálido cremoso a un rosado que hace cosquillear mis labios con ganas de besarlas.

—¿Por qué me ves así?

Me quedó en silencio, sorprendido, un momento. Después me encuentro sonriendo. Amo esto, él aquí, conmigo, con nosotros, tan cómodo, tan en su propia piel, incluso si es una vida diferente.

—¿Cómo sabes que te estoy viendo?

Mi propia pregunta me trae un recuerdo de hace casi dos meses, ese día, el que cambiaría mi vida.



«Bendita la luz, bendita la luz de tu mirada...»

Nunca olvidaré esa mañana con Cat obligándome a salir de la cama, nunca podré agradecerle lo suficiente haberme llevado a Alexander. Mi Alexander, otra vez.

El momento en que su rostro se giró y me encontré con sus ojos. Ese segundo bastó para reconocerlo –de nuevo–.

Y después cuando tomó mi mano, exactamente como si supiera donde estaba. "¿No eras...?" "Ciego, soy ciego" y él me lo dijo como si no fuera un golpe casi físico hacia mí.



Alexander pone los ojos en blanco, resopla y después sonríe, haciéndome reír a mí también. Lo amo y amo que pueda sentirse tan libre conmigo como para hacer eso, sin la timidez y lo contenido y cuidadoso que fue los primeros días, alejándome o tratando de alejarme.

Nunca lo logró.

No sucedió en la otra vida, cuando tuve que esperar que mi hermoso cazador de sombras estuviera listo para aceptar ante sí mismo y los demás lo que era y a quien quería.

Mi Nefilim estúpido.

Y no iba a suceder ahora. Cuando el alma de Alexander me reconoce y su corazón me siente aunque no me recuerde.

Tenía toda la paciencia del mundo para esperar hasta que el decidiera dar el paso hacia mí para entender lo que une a nuestros corazones.

—¿Cómo podría no darme cuenta, Magnus? –su sonrisa cambia a una tan cariñosa, tan llena de amor que no puedo creer lo afortunado que soy. Extiende su mano sobre la mesa y no dudo en tomarla. Siento como, casi imperceptiblemente, la respiración se hace más fácil ahora que estamos conectados–. Tu mirada es casi como una caricia física. La siento.

Su pulgar acaricia el dorso de mi mano y no puedo evitarlo. Mover mi silla y tirar de él hasta que está sobre mi regazo, mi mano libre sube por su brazo, hombro, cuello, acuna su rostro y lo inclino hacia mí. —Te amo –mis labios rozan los suyos cuando hablo, mi voz se rompe un poco por la emoción. Esto parece un sueño, uno de mis mejores sueños–. No tienes idea cuánto te amo, Alexander. Ni aunque pasen mil vidas podrías llegar a entenderlo.

Inesperadamente él echa su cabeza para atrás. —¿Y el que yo te busque durante esas mil vidas no te dice cuánto te amo yo, Magnus?

No puedo contestar porque hay un nudo en mi garganta y un aleteo en mi corazón.

Lo hace, realmente lo hace.

Hay un vergonzoso sonido, casi un lloriqueo, justo antes de tomar sus labios con los míos.

Y así como los recuerdos no hacen falta. Hay "Te amo's" que no se dicen, se sienten.

Y yo lo siento, antes de nuestra primera vida juntos ya sabía que había alguien sólo para mí, ahora sólo lo confirmo y lo esperaré cada día de mi existencia.






CONTINUARÁ...

Estamos en los últimos 5 días 😭 voy a intentar actualizar seguido estos últimos capítulos, no puedo creer que ya está por terminar 😞

¿Todavía recuerdan ese primer día de Tus ojos? 😭

Actualmente Tus ojos no me ven tiene 300k de lecturas y no saben qué feliz me hace, no por el número, sino saber que la leen, leer sus comentarios. No fue mi primer fic, fue el tercero -después de Amor entre libros y Mi inmortalidad por ti- pero es el más especial para mí, es mi historia favorita hasta ahora, no sé por qué, tal vez por Alec, es mi Alec más especial y del que más orgullosa me siento con su gran avance ❤

De verdad gracias por leer a mi bebé y por estar en esta segunda parte, ¿qué "final" imaginan?

Y los invito aquí también al grupo en facebook de mis historias, lo encuentran como LuisaConejo BL o el link en mi tablero y mi perfil 😊

Tu corazón me siente (malec)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora